miércoles, 15 de octubre de 2025

Tumbledown: El valiente soldado Ramón García


El valiente soldado Ramón García


Como tantos héroes anónimos, poco se sabe de este valiente soldado. No pudimos encontrar ninguna foto de él, pero sabemos que sirvió en el Regimiento de Infantería N° 12.

Este relato nos lleva a la noche del 13 de junio de 1982. Esa noche, los infantes de marina del BIM 5 estaban reforzados por soldados del Ejército pertenecientes a los regimientos 4 y 12. Estos soldados habían llegado el día anterior, después de haber combatido contra los ingleses en los montes Harriet y Dos Hermanas. Entre ellos se encontraba un joven callado, pero que decidió voluntariamente quedarse a pelear junto a los infantes de marina. Se trataba del soldado Ramón García, del RI-12.

El subteniente Silva, del RI-4, fue puesto a cargo de un grupo de cinco hombres: el cabo Pintos, los soldados Castillo, Gregorio y Frías (todos del RI-4) y el soldado García (del RI-12). Su misión era cubrir el sector de repliegue en caso de que los hombres del BIM 5 fueran sobrepasados y tuvieran que retroceder. Desde su posición, también podían apoyar con sus armas a los infantes de marina.

Esa noche, habían sido atacados por la Guardia Escocesa. Los hombres del BIM 5 y del Ejército lograron rechazarlos tras un combate que se extendió desde las 23:00 hasta la 01:00. Cuando los escoceses comenzaron a retroceder, se escucharon los gritos de alegría de los infantes de marina. El subteniente Silva exclamaba: "¡Viva la Patria, viva la Patria, carajo!". Continuamente alentaba a sus hombres, les ordenó recargar munición al máximo y les aseguraba que pronto llegarían refuerzos.

De pronto, se lanzó un segundo ataque inglés. Esta vez, avanzaron directamente sobre el suboficial de Infantería de Marina Castillo y su grupo, quienes combatieron con una ferocidad impresionante. Los hombres de Silva, entre ellos el soldado García, comenzaron a cubrir a Castillo y su unidad. El fuego era infernal, las explosiones iluminaban la noche como si fuera de día. Se escuchaban gritos de ambos bandos, el monte era un infierno. Ya no había un solo frente de ataque, sino tres; los escoceses avanzaban desde distintos flancos. La artillería comenzó a castigar a los ingleses.



Era un combate sin tregua: disparar, recargar y sobrevivir. Se lanzaban granadas, cohetes, se utilizaba todo lo disponible. En medio del caos, una ráfaga alcanzó al soldado Gregorio (RI-4), hiriéndolo gravemente. Gritaba de dolor, mientras el soldado Ramón García permanecía a su lado. El subteniente Silva intentó socorrer a Gregorio, lo tomó y lo arrastró hasta un lugar seguro. Luego, recogió un FAP para seguir combatiendo, pero fue alcanzado por una ráfaga enemiga.

A pesar de la brutalidad del combate, García continuaba disparando contra las tropas británicas. Pero un cohete LAW de 66 mm impactó cerca de él, acabando con la vida de este valiente soldado.

Una vez finalizada la guerra, una patrulla compuesta por el TFIM Marquardt, el GUIM García, el CSIM Sánchez, el CSIM Robles, el CSIM Valdez y el sargento británico Canesa recorrió el sector oeste de Tumbledown (posiciones del TC Vázquez). Todo estaba cubierto de nieve. Encontraron el cuerpo del subteniente Silva junto a dos soldados del Ejército (todos del RI-4). Silva evidenciaba una actitud de combate hasta el final, y es posible que los británicos le hubieran retirado su fusil de las manos. El TFIM Marquardt le cortó la chapa de identificación y posteriormente la entregó en mano al jefe de su unidad, el teniente coronel Soria (RI-4).

Más allá, estaban los cinco infantes de marina caídos. Finalmente, la patrulla halló a un soldado del Ejército solo, dentro de su posición, con una cantidad enorme de vainas servidas en su pozo. Lo encontraron porque uno de los infantes de marina tropezó con la nieve que cubría el refugio. Ese valiente era el soldado Ramón García, del RI-12.

Hoy, este soldado descansa en paz en el cementerio de Darwin.



Que Dios te tenga en su gloria, valiente soldado Ramón García. Contamos esta historia para que tu nombre nunca sea olvidado.



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