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jueves, 1 de agosto de 2024

La rajadura en la pared ¿Qué tendría que haber ocurrido para que la operación Rosario cumpliera sus objetivos?

¿Qué hubiese tenido que pasar para la operación Rosario cumpliese con los objetivos del Alto Mando argentino?






Para que el plan de ocupación de las Islas Malvinas por parte de Argentina en 1982 hubiese resultado en una resolución diplomática, varias condiciones y factores clave habrían tenido que alinearse de manera específica. Analizaremos estas alternativas y factores desde la perspectiva de febrero de 1982:

1. Respuesta internacional moderada:

  • Estados Unidos y la OEA: Argentina esperaba que, al ocupar las islas, el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA) y una posición neutral o favorable por parte de Estados Unidos (dada la Doctrina Monroe y el contexto de la Guerra Fría) obligarían al Reino Unido a negociar. Para que esto hubiese sido cierto, Estados Unidos y la OEA tendrían que haber adoptado una postura más conciliadora y menos inclinada hacia el apoyo a Reino Unido.
  • No intervención de la ONU: La Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU tendrían que haber optado por no involucrarse directamente o haber emitido resoluciones llamando a la negociación sin imponer sanciones a Argentina.

2. Respuesta británica menos agresiva:

  • Gobierno británico en dificultades: Si el gobierno de Margaret Thatcher hubiese enfrentado una mayor oposición interna o problemas significativos que hubiesen desviado su atención de las Malvinas, la posibilidad de una respuesta militar rápida podría haber sido menor. Problemas económicos más agudos o crisis internas significativas en el Reino Unido podrían haber disminuido la capacidad de respuesta.
  • Prestar mayor atención al Libro Blanco de la Defensa de 1981 que preveía la baja del servicio de importantes activos de superficie de la Armada Real, con especial énfasis en las fuerzas de desembarco. (ver aquí)
  • Consideraciones logísticas: Si la capacidad logística británica para movilizar una fuerza expedicionaria en el Atlántico Sur hubiese estado limitada por factores técnicos o financieros, la opción militar habría sido menos viable, forzando a una solución diplomática.

3. Preparación y diplomacia argentina:

  • Mejor planificación y comunicación: Una ocupación con mínima resistencia y sin bajas británicas podría haber favorecido una negociación. Además, Argentina habría necesitado una estrategia diplomática sólida desde el primer momento de la ocupación, buscando el apoyo de países clave y presentando su caso de manera convincente en foros internacionales.
  • Negociaciones previas y alianzas: Un trabajo previo más efectivo para obtener el apoyo de países influyentes y construir una red de alianzas diplomáticas y políticas habría sido crucial. Esto implicaría haber cultivado relaciones más estrechas con países de la Comunidad Europea, el Tercer Mundo y potencias emergentes.

4. Condiciones en las islas:

  • Colaboración o neutralidad de los isleños: Si los isleños hubiesen adoptado una postura más neutral o incluso colaborativa (lo cual es improbable dada su fuerte identidad británica), las opciones diplomáticas habrían sido más factibles. La resistencia activa de los isleños consolidó la respuesta británica.
  • Condiciones geopolíticas regionales: En el contexto de América Latina, una menor rivalidad con Chile y una mayor unidad regional podrían haber proporcionado a Argentina un respaldo más sólido para su reclamo.

5. Factores de contención:

  • Evitar provocaciones: Mantener una ocupación pacífica, evitando provocaciones o acciones que pudiesen justificar una respuesta militar por parte del Reino Unido.
  • Respuestas iniciales de bajo perfil: Si el Reino Unido hubiese adoptado una política de bajo perfil inicialmente, Argentina podría haber tenido tiempo para fortalecer su posición diplomática y consolidar su control.

Conclusión preliminar

Para que el escenario de una ocupación argentina de las Malvinas y una posterior resolución diplomática se hubiese concretado, se necesitarían una serie de eventos y decisiones estratégicas altamente improbables en la práctica. Las expectativas argentinas subestimaron la importancia de la reacción británica y el apoyo internacional al Reino Unido. Un enfoque más realista podría haber incluido una preparación más detallada para enfrentar posibles respuestas militares y un esfuerzo diplomático más robusto antes de la ocupación.

Incluso seguir con más detenimiento el Libro Blanco de la defensa británico, que preveía la baja de muchos buques hacia fines de 1982, hubiese sido un gesto de mínima prudencia y paciencia recomendable.

 

sábado, 5 de diciembre de 2020

La extensión de la plataforma submarina y los derechos argentinos sobre Malvinas

Jorge Taiana, ex terrorista y ex canciller, destacó ante DyN la decisión de la ONU de avalar el pedido de la Argentina para ampliar la plataforma marítima. Explicó qué significa el anuncio y qué impacto podría tener en las gestiones por la soberanía de las Islas Malvinas.

viernes, 18 de septiembre de 2020

Análisis en previsión de nuevos conflictos

Islas Malvinas / Faklands. En previsión de un nuevo conflicto

Revista Militar  (original en ruso)




Este año se cumple el trigésimo aniversario del conflicto armado de las Malvinas, que fue, de hecho, la última apuesta del dictador argentino Leopoldo Galtieri, un intento desesperado de mantener el poder frente a una catástrofe económica inminente.


El resultado de la aventura fue la gran derrota de Argentina, el dictador perdió sus poderes, la cuenta de pérdidas ascendió a aproximadamente mil personas en ambos lados, sin contar las enormes pérdidas materiales (para normalizar la vida en las islas, se necesitaron neutralizar aproximadamente 15 mil minas, así como una gran cantidad de municiones sin explotar y otros artículos peligrosos )

La ciencia militar se enriqueció con la primera experiencia militar exitosa en el uso de aviones de despegue y aterrizaje vertical. "Harriers" y "Sea Harriers" realizaron cerca de dos docenas de batallas victoriosas sin una sola pérdida. También se obtuvo evidencia de la importancia decisiva del uso de submarinos en las batallas navales: el único submarino británico, que hundió el crucero General Belgrano, bloqueó todas las acciones adicionales de la flota argentina.

Un escritor y publicista argentino escribió un poema en memoria de los argentinos y británicos caídos, en el que calificó el conflicto como "La batalla de los dos hombres calvos por el peine".

El cepillo para el cabello resultó ser dorado. En 2010, el Reino Unido comenzó las operaciones de perforación en alta mar cerca de las islas desafortunadas.

Por supuesto, las Islas Malvinas tienen una importancia considerable en sí mismas: esto no es solo un obstáculo en el camino desde el Océano Pacífico hasta el Atlántico, que le brinda la oportunidad de controlar las aguas del Atlántico, sino también la forma más cercana de desarrollar la riqueza de la Antártida, que tanto Argentina como Gran Bretaña reclaman. Pero el agravamiento del conflicto alrededor de las islas comenzó precisamente con el descubrimiento de campos petroleros.

En respuesta al inicio de la exploración petrolera, Argentina anunció que todos los barcos que se dirigen a las Islas Malvinas (por lo tanto, en protesta, siguen siendo llamados opositores al dominio británico, manteniendo la tradición española), deben obtener el consentimiento previo de Buenos Airos. En respuesta, el Reino Unido realizó pruebas militares cerca de las Islas Malvinas en octubre de ese año. El indignado gobierno de Argentina envió una protesta a la ONU, reprochando a Gran Bretaña por la reactivación de la política colonial y la violación de los acuerdos internacionales sobre el uso pacífico de las aguas del sur del Atlántico.

Desde entonces, la situación alrededor de las islas se está calentando constantemente. La presidenta argentina, Christina Kirchner, anunció el regreso de las Malvinas a la jurisdicción argentina como el principal objetivo de su política exterior. Esta vez, el gobierno argentino ha elegido métodos relativamente pacíficos para resolver el problema, pero está actuando de manera bastante activa en tres direcciones a la vez.

La tarea principal: conseguir el apoyo de los vecinos de la región, de hecho, ya se ha completado. En la cumbre del MERCOSUR (Mercado Común de América del Sur) celebrada a fines del año pasado, se llegó a un acuerdo para bloquear las islas. Se prohibió la entrada a los puertos de los países del Mercosur a los barcos que enarbolan pabellones de las Islas Malvinas (un símbolo de la presencia de Gran Bretaña en el extranjero). Argentina recibió el apoyo de casi todos los países de la región, incluido Chile (hace treinta años, el dictador Pinochet apoyó a Gran Bretaña).

Cabe señalar que en Londres no esperaban bloqueos, como lo demuestra el llamamiento indignado de Jeremy Brown, Jefe del Departamento Latinoamericano del Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido, a los gobiernos de Uruguay, Brasil y Paraguay, en el que calificó la decisión del Mercosur como una política de acoso e intimidación.

El primer ministro británico, David Cameron, en su mensaje de Navidad a los isleños calificó las políticas argentinas como contraproducentes y políticamente injustificadas, prometiendo una vez más que Gran Bretaña nunca se sentaría en la mesa de negociaciones de las islas hasta que los habitantes del archipiélago expresen ese deseo.

Sin lugar a dudas, si el bloqueo tiene éxito, el Reino Unido tendrá grandes problemas.

La segunda área de actividad del Gobierno de Argentina fue la formación de una opinión positiva de la comunidad mundial.

En los últimos años, se ha hecho todo lo posible para limpiar las manchas de los regímenes militares de la reputación del país. Continúan los juicios de alto perfil de criminales políticos del pasado. Entonces, en 2010, 82 años condenado por asesinato, tortura y secuestro del general Reynaldo Bignone, de 82 años, el ex comandante de la base militar Campo de Mayo, que recibió la sombría gloria del campo de tortura para los opositores al régimen.

El presidente Krishner está haciendo campaña activamente en varios foros, principalmente en la ONU, promoviendo activamente su posición. Estas acciones también han tenido bastante éxito.

Por ejemplo, Estados Unidos, que anteriormente tenía una posición categóricamente pro británica, hoy es indiferente (Washington reconoce el poder británico sobre las islas, pero expresó su deseo de no interferir en la disputa). Por supuesto, la pregunta sigue siendo cuánto puede confiar en tal posición. Estados Unidos más de una vez "filtró" a sus antiguos aliados, pero solo en los casos en que fue beneficioso para ellos.

Y, finalmente, la tercera dirección, bastante prometedora, es la promoción del tema en la ONU.

¿Cuán realistas son los reclamos de Argentina? Hay una contradicción de dos leyes. Por un lado, las tierras, por regla general, pertenecen a los descubridores, por otro, se aplica el principio del derecho de autodeterminación de la nación.

Con respecto a la apertura de las Islas Malvinas / Malvinas, aquí las opiniones de Argentina y Gran Bretaña difieren. Los argentinos fechan el descubrimiento en 1520 y lo atribuyen al capitán español Esteban Gómez (Argentina es el sucesor de España), y los británicos confían en que el corsario inglés John Davis descubrió las Islas Malvinas en 1592.

Al darse cuenta de la debilidad de su posición, el Reino Unido celebró varios referéndums en las islas, cuyo resultado no planteó dudas, ya que la población de las islas son descendientes de inmigrantes del Reino Unido.

Conociendo los numerosos precedentes cuando el derecho internacional demostró ser impotente para resolver este tipo de conflicto, es bastante difícil predecir una decisión de la ONU.

sábado, 10 de agosto de 2019

De Chagos a Malvinas

De las islas Chagos a las Malvinas





La Asamblea General de las Naciones Unidas acaba de instar expresamente a Gran Bretaña a cesar su presencia colonial en las islas Chagos, en las que está emplazada una enorme base militar norteamericana, y a devolver lo más rápidamente posible y en no más de seis meses ese territorio a Mauricio, que lo reclama con razón. Hablamos de un archipiélago compuesto de unas 50 pequeñas islas ubicado en el océano Índico. La Argentina fue uno de los patrocinantes de la resolución referida, dictada en junio de 2017.

Esa decisión, tomada con 116 votos a favor y tan solo 6 en contra, con la abstención de algunos miembros, entre los cuales estuvieron Francia y Alemania, se suma a la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia solicitada oportunamente por la Asamblea General y emitida en idéntico sentido.

El alto tribunal internacional sostuvo que cuando Gran Bretaña concedió la independencia a Mauricio, en 1965, debió haber también entregado a ese país el archipiélago de Chagos, conforme a las normas que gobiernan los procesos de descolonización.

Gran Bretaña es aún una potencia colonial que sigue sin respetar normas que, respecto de esta delicada materia, se sancionan en el ámbito de las Naciones Unidas.

Las opiniones comentadas de la Asamblea General de las Naciones Unidas y de la Corte Internacional de Justicia tienen, en términos generales, efectos muy positivos para el diferendo de la Argentina con relación a las islas Malvinas y otras islas del Atlántico Sur ocupadas ilegalmente por Gran Bretaña.

Cabe recordar que la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General, que es la piedra angular de la descolonización, ratificó en su momento el principio de la integridad territorial como corolario de la libre determinación, que solo corresponde a aquellos pueblos que son efectivamente titulares de ese derecho y que no es el caso de los habitantes de las islas Malvinas. La Corte, por su parte, destacó el rol central de la Asamblea General de la ONU en materia de descolonización.

Pese a que Gran Bretaña sostiene que nada tiene que conversar con la Argentina sobre la soberanía respecto de las islas del Atlántico Sur, el tema está incluido en la agenda de descolonización de las Naciones Unidas, desde donde, año tras año, se aprueba una exhortación a negociar la cuestión con la buena fe que corresponde. Esta es desoída, arbitraria y sistemáticamente, por el Reino Unido. No obstante, la cuestión sigue abierta y reviste el carácter de irrenunciable para nuestro país.

Sería muy positivo que nuestra Cancillería asignara a un grupo de trabajo especial el análisis de los alcances y consecuencias legales de las decisiones comentadas, incluyendo un contacto directo con Mauricio, que cubra las posiciones y argumentos jurídicos que ese país mantiene en su diferendo con Gran Bretaña. (LA NACION)

Fundación Nuestro Mar

martes, 18 de junio de 2019

La afirmación de los derechos argentinos y la ocupación británica

Malvinas, islas, y Antártida: La afirmación de derechos y la ocupación británica

Dr. César Leren





Cuando el 30 noviembre de 1973 el presidente Juan D. Perón promulgó la Ley 20.561 que declaró el día «de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las Malvinas, Islas y del sector antártico» el 10 de junio, como «expresión de soberanía», utilizando para ello, la fecha que en 1829 el Gobernador de Buenos Aires Brig. Gral. Martín Rodriguez creó la Comandancia Política y Militar de las Islas Malvinas y adyacentes al Cabo de Hornos y, estableció también mecanismos que pusieran de manifiesto «las agresiones sufridas por la República en la región»

Luego, cuando se reformó en 1994 la Constitución Nacional, estableciendo en las “Disposiciones Transitorias” que «La Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional. La recuperación de dichos territorios y el ejercicio pleno de la soberanía, respetando el modo de vida de sus habitantes, y conforme a los principios del Derecho Internacional, constituyen un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino» nadie podía imaginarse que se tratarían de meras declaraciones inconducentes en manos del Poder Ejecutivo Nacional.

Mientras el pasado 29 de mayo los ocupantes británicos en Malvinas resolvieron ratificar, lo ya resuelto en 2012, respecto a extender en 1 millón de km2 un Área Marítima Protegida alrededor de las Islas Georgias y Sándwich del Sur, corroborando la vocación invasiva británica en el Atlántico Sur y Océano Antártico, violando las Res. de la ONU 31/49 que pidió a ambos gobiernos que aceleren las negociaciones de soberanía e instó a las partes a abstenerse de adoptar modificaciones unilaterales mientras no se realicen las negociaciones relativas a la disputa sobre soberanía (Res. 2065/65 y Res. 3160/73) y, en igual sentido, por analogía, las Res. de la ONU Nº 3171/73 y ONU 3175/73 relativas a soberanía sobre los recursos naturales que no deben explotarse en el país ocupado, el canciller Jorge Faurie, manifestaba que después de tres año y medio, el gobierno trabaja para “crear condiciones de diálogo y llevar adelante una política de recrear confianza y crear condiciones para un diálogo”.

Para “recrear esa confianza”, a la que refiere el ministro, ya la Argentina acordó investigar recursos pesqueros que son vitales para la economía de las Islas (140 mil millones de dólares de productos finales desde 1976); otorgó a favor de tres empresas inglesas áreas estratégicas en el atlántico sur para la explotación petrolera offshore; acordó nuevos vuelos -resignando la línea área de bandera argentina- a San Pablo, que facilitarán la logística y el comercio de las Islas con el mundo.

Habría que observarle al ministro Faurie que es muy ingenuo para ser el canciller o tiene una errónea apreciación respecto a que la desconfianza inglesa habría “surgido con el conflicto bélico” (sic). Las Islas fueron ocupadas en 1883 y, las Naciones Unidas, desde hace 54 años que instan sin solución de continuidad a ambos países a negociar la soberanía, sin que jamás el Reino Unido se hubiese dignado a hacerlo. La invasión y ocupación estratégica británica es una cuestión geopolítica y, si nuestro ministro de Relaciones Exteriores no lo ha entendido, estamos en serios problemas, porque no ha entendido que vivimos en un país ocupado (1.639.900 km2 marítimos e insulares) y, que, la voluntad popular de los argentinos ratificó «su legítima e imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y, Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes».

¿Pensará el canciller argentino, que la base misilística instalada en Malvinas, es para evitar un nuevo intento armado de recuperar las Islas por parte de los argentinos? Bueno, ello sería suponer que los ingleses no conocen nuestra limitadísima capacidad de fuego y que nuestro presupuesto de defensa es similar al de Chile o Perú, con un territorio continental y marítimo infinitamente menor.

Aquí no se trata de cuestionar idoneidades, se trata de establecer una estrategia nacional para dar cumplimiento a la voluntad popular plasmada en la Constitución Nacional y, en ello, desde el inicio de esta gestión, en su intento infructuoso por recrear confianza, el canciller incumple con lo prescripto en la Carta Magna y, en todo caso, ajusta su proceder a todo lo acordado en el Tratado de Madrid, cuyo contenido no cuenta con la aprobación del Congreso de la Nación.
Se lo llamó “Relaciones Carnales”, ahora “restablecer Confianza”. Por razones de decoro, omitimos decir de que se trata.

No será posible recuperar Malvinas y los territorios marítimos ocupados, sino se deroga el referido Tratado de Madrid y el consecuente acuerdo Foradori-Duncan; se denuncia al Reino Unido ante los organismos internacionales por la explotación y depredación de los recursos pesqueros de la Argentina; se acuerda la explotación de los recursos originarios en el área adyacente a la ZEE con los países que pescan nuestros recursos migratorios; se promueva ante la UE -con motivo del Brexit- la colocación de los mismos aranceles de importación que sufren los productos argentinos, a los originados en las Islas o los países que capturen bajo su licencia ilegal; se deje sin efectos los vuelos que desde las Islas transponen nuestro espacio aéreo; se acuerde con la República Oriental del Uruguay para finalizar con el apoyo logístico que le prestan sus puertos a los buques extranjeros; se dote a las fuerzas navales de nuestro país de los medios aptos para ocupar y controlar el territorio marítimo y continental patagónico, se lleve adelante una política activa en el Atlántico Sur, considerando a este espacio, de función social, interés y desarrollo para todos los argentinos.
La soberanía no se declama. Se ejerce. (DR. CÉSAR AUGUSTO LERENA)

Fundación Nuestro Mar

* El autor es experto en Atlántico Sur y Pesca, ex Secretario de Estado, ex Secretario de Bienestar Social (Ctes) ex Profesor Universidad UNNE y FASTA, Asesor en el Senado de la Nación, Doctor en Ciencias, Consultor, Escritor, autor de 24 libros (entre ellos “Malvinas. Biografía de Entrega”) y articulista de la especialidad.

viernes, 24 de mayo de 2019

ONU vota descolonización de Chagos y crea antecedente para Malvinas

Fallo de la ONU contra el Reino Unido sería precedente positivo en el conflicto por Malvinas



Jorge Faurie, canciller argentino.

Un total de 116 países votaron a favor de la resolución, que urge al Reino Unido a "retirar su administración colonial" de las islas de Chagos


La Cancillería argentina destacó este jueves la aprobación por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas de una resolución que exige al Reino Unido "finalizar la administración colonial del Archipiélago de Chagos", ubicado en el océano Índico, y que marca un antecedente en el reclamo de Argentina por la soberanía de las Islas Malvinas.

El archipiélago de Chagos fue separado del territorio de las Islas Mauricio antes de su independencia, siendo arrendada su principal isla, Diego García, a Estados Unidos para instalar una base militar.

"La República de Mauricio, desde su independencia en 1968, reclama la recuperación ese territorio. En febrero de 2019, la Corte Internacional de Justicia concluyó que la descolonización de ese país no se completó legalmente dado que al quebrantarse su integridad no se respetó la voluntad de su pueblo", explicó un comunicado difundido por el Palacio San Martín.

La Asamblea General votó ayer por amplia mayoría a favor de esta opinión del máximo Tribunal de la ONU y "esta decisión es una victoria para Mauricio y un precedente muy positivo para países como la Argentina y su pueblo, que también han sido privados del ejercicio pleno de su soberanía sobre una parte de su territorio que continúa sujeto a una ocupación colonial ilegítima e ilegal", añadió.

La Cancillería consignó que "Argentina patrocinó la Resolución de la Asamblea General de la ONU e intervino en todas las instancias previas ante la Corte Internacional de Justicia".

"Aunque el caso del Archipiélago de Chagos no puede igualarse a la Cuestión Malvinas, en ambos casos están involucrados principios rectores de la descolonización", remarcó la cartera conducida por Jorge Faurie.

El caso Chagos


El archipiélago del océano Índico está en el centro de una larga disputa por la decisión del Reino Unido de separarlo de Mauricio en 1965 para establecer una base militar conjunta con Estados Unidos en Diego García, la más grande de sus más de 50 islas.

Los chagosianos expulsados de la isla, que desde hace 40 años hacen campaña por el retorno, han denunciado el "doble discurso" de Londres, que defiende el derecho a la autodeterminación de los kelpers de Malvinas pero les niega a ellos ese derecho.

Un total de 116 países, entre ellos Argentina, votaron a favor de la resolución no vinculante, que fue presentada por países africanos y que urge al Reino Unido a "retirar su administración colonial" de las islas de Chagos en un plazo de seis meses.

Sólo seis países de los 193 que integran la asamblea, entre ellos el Reino Unido y Estados Unidos, votaron contra la medida, co patrocinada por Argentina, mientras que otros 56 se abstuvieron, incluyendo a Canadá, Francia y Alemania. Quince naciones no votaron.

"Vemos como algo muy positivo que la comunidad internacional haya apoyado la resolución y los principios de la legalidad internacional", dijo el embajador argentino ante la ONU, Martín García Moritán.

"Es muy importante para los procesos de descolonización", agregó.

La votación llegó tres meses después de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya concluyó que el Reino Unido había separado las islas de manera ilegal y debía devolverlas a Mauricio, una ex colonia británica que se independizó en 1968.

Luego de que el Reino Unido rechazara la "opinión consultiva" de la CIJ, máximo tribunal de Naciones Unidas, Mauricio pidió la intervención de la Asamblea General.

La resolución dice que la ONU y sus organismos deben reconocer la soberanía de Mauricio sobre Chagos y llama a todos los gobiernos a "no reconocer, apoyar ni ayudar a la administración colonial ilegal" británica de Chagos, informó la cadena BBC.

Aunque las resoluciones de la Asamblea General de la ONU no son de cumplimiento obligatorio, sí tienen todo el peso moral del más democrático y amplio de los órganos de Naciones Unidas.

El conflicto por Chagos ha sido comparado al de Malvinas, otro territorio objeto de un reclamo internacional contra el Reino Unido.

En febrero pasado, el canciller Jorge Faurie celebró el fallo de la CIJ sobre Chagos y dijo que tenía "una enorme validez" para el reclamo argentino de la soberanía de las Malvinas.

"Se trata, en el caso del archipiélago de Chagos, como en el de Malvinas, de una situación de desmembramiento territorial donde la población que se encontraba en las islas fue trasladada contra su voluntad, en este caso al territorio continental argentino, en 1833", agregó entonces el ministro.

Al dirigirse a la asamblea antes de la votación, el primer ministro de Mauricio, Pravind Kumar Jugnauth, dijo que la ONU debía enviar "una clara señal de que el colonialismo ya no puede ser tolerado".

A su turno, la embajadora británica Karen Pierce dijo que la base militar de Diego García "juega un rol vital" para mantener seguros a los aliados en la región, incluyendo a Mauricio.

Estados Unidos ha utilizado aviones estacionados en la base para lanzar ataques en Irak y Afganistán.

En 2016, el Reino Unido extendió el acuerdo de arrendamiento con Estados Unidos para el uso de Diego García hasta 2036.

iProfesional

martes, 26 de febrero de 2019

ONU condena colonialismo británico en Chagos y favorece postura argentina

La Haya falló contra el Reino Unido en un caso que favorece el reclamo por Malvinas

La Corte Internacional de Justicia ordenó que los británicos devuelvan un archipiélago que fue retenido a la isla de Mauricio y que funciona como base militar de los Estados Unidos. El Gobierno celebró el fallo tras haber hecho gestiones contra la posición de Londres.

Por E.M. Chabay



 La base militar en Diego García, la única isla habitada del archipiélago de Chagos.

El Gobierno argentino celebró el fallo por el que la Corte Internacional de Justicia determinó que el Reino Unido debe devolver a la República de Mauricio, un país insular ubicado en suroeste del océano Índico, un archipiélago que le fue retenido años antes de su independencia y que hoy funciona como base militar de los Estados Unidos.
Por 13 votos contra uno, el máximo tribunal judicial de las Naciones Unidas emitió su Opinión Consultiva sobre la separación del archipiélago de Chagos de las islas Mauricio, ocurrido en 1965, y consideró que la ocupación británica es "ilegal" y que, por tanto, debe ponerse fin a la actual administración para completar la descolonización de esta región del mundo.
La opinión consultiva de Chagos tiene relevancia en el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas por tratarse de una situación de desmembramiento territorial e involucrar también un caso de desplazamiento de la población autóctona, que fue obligada a dejar su lugar de origen.
Asimismo, el tribunal no reconoció que la actual población pueda considerarse un "pueblo" con el derecho a la autodeterminación, todo lo cual apoya los argumentos argentinos por Malvinas.



Este martes, en Casa Rosada, el canciller Jorge Faurie puso al Gobierno al corriente del fallo favorable para el reclamo argentino sobre las islas del Atlántico sur, y más tarde dijo que el fallo "tiene enorme validez para la reclamación argentina por Malvinas".
"En Chagos hubo una situación de desmembramiento territorial; la población que habitaba las islas fue trasladada contra su voluntad, como sucedió en 1833 [en Malvinas], y la posición argentina ante las Naciones Unidas siempre ha hecho hincapié en la necesidad de recuperar la integridad territorial argentina, no siendo aplicable en este caso el principio de autodeterminación", explicó Faurie.
"La Argentina ha presentado un reclamo similar ante el Comité de Descolonización y la Asamblea General de las Naciones Unidas", recordó el jefe de la diplomacia argentina.
Además del apoyo dado a Islas Mauricio, la Argentina patrocinó en 2017 la Resolución de la Asamblea General que solicitó la intervención de la Corte de La Haya, e intervino con el equipo legal de la Cancillería durante todo el procedimiento.



Un enclave colonial en África

El Reino Unido retuvo el archipiélago de Chagos luego de que Mauricio obtuviera su independencia en 1968. Cerca de 1500 isleños nativos fueron deportados y la isla más grande fue arrendada a los Estados Unidos para instalar la base aérea militar Diego García, en 1971. Los deportados nunca pudieron regresar a sus hogares.
Conocida la noticia, la prensa británica calificó el fallo como "un humillante golpe al prestigio de Gran Bretaña en el escenario mundial". Al respecto, el diario The Guardian lo calificó como "una derrota significativa" y una pérdida de respaldo de aliados tradicionales, en medio del proceso de salida de la Unión Europea (Brexit).
El gobierno de Mauricio y la Unión Africana de Naciones celebraron el fallo que, se calcula, será el puntapié para iniciar el proceso de descolonización. Al respecto, la mancomunidad de naciones del continente negro expresó que "es impensable que hoy, en el siglo XXI, haya una parte de África que aún esté sujeta al gobierno colonial europeo".

El especialista en derecho internacional Marcelo Kohen opinó que la opinión consultiva de la Corte sobre Chagos "es la victoria del imperio del derecho y de la justicia", porque "muestra que un pequeño Estado haciendo frente a la máxima potencia colonial" y al tribunal "cumpliendo su rol de 'decir el derecho', sin importar las presiones políticas de los poderosos".



miércoles, 20 de diciembre de 2017

Por el Brexit, Europa dice que le quitará el apoyo a UK en la ONU

Brexit: advierten que la Unión Europea podría retirarle el respaldo al Reino Unido en la ONU sobre Malvinas

La pérdida de influencia de Londres sobre el bloque regional podría afectar la postura histórica de los países del Viejo Continente en la Asamblea General
Infobae


Theresa May, premier británica (Reuters)

La salida del Reino Unido del bloque de la Unión Europea podría afectar el habitual respaldo que recibía Londres en las votaciones de la ONU sobre Malvinas por parte de los países del continente, según advirtieron experimentados diplomáticos británicos.

La pérdida de influencia del Reino Unido es un asunto que preocupa en las oficinas de Asuntos Exteriores, en medio de las negociaciones para concretar el brexit.

David Hannay, ex embajador británico ante las Naciones Unidas, advirtió que el Reino Unido ya sufrió un revés en una votación de junio con respecto al Archipiélago de Chagos, situación que se podría repetir cuando se discutan asuntos de Malvinas en la Asamblea General.

"Podemos tener el mismo fenómeno cuando el asunto se presente en la ONU en alguna estancia u otra en el futuro", señaló, en una sesión parlamentaria.



La Asamblea General de la ONU (Reuters)

A mitad de año, el Reino Unido sufrió una derrota calificada de "humillante" en Ginebra, donde se acordó llevar la disputa de Chagos, reclamado la república de Mauricio, a resolverse en la Corte Internacional de La Haya, con la abstención de numerosos países europeos. Esta votación "mostró que el viento está soplando", añadió Hannay. "La solidaridad de la Unión Europea está, me temo, en juego, y creo que vamos a perder", vaticinó.

Su parecer fue replicado por John Sawers, también ex embajador ante la ONU y ex jefe del MI6 (servicio secreto). "La posición del Reino Unido está siendo cuestionada", señaló.

Sawers repasó que Londres ha perdido luego de varias décadas su lugar en el tribunal de la Corte Internacional de Justicia (asiento ahora ocupado por un magistrado francés), lo que, en su opinión, refleja la pérdida de liderazgo y centralidad en el Viejo Continente.

Además, apuntó que Theresa May, pese a ser respetada en el plano internacional, podría ver desgastada su imagen por la ruptura con la UE, un proceso que va en contra de la integración global impulsada por la mayoría de líderes, con la clara excepción de Donald Trump. "Significa que ya no podrá tener el mismo rol a nivel mundial como el que ha desplegado en los últimos meses el presidente francés (Emmanuel Macron). Eso solo es describir la realidad", subrayó.

Por ello, según The Independent, Asuntos Exteriores ha lanzado un estudio para evaluar la influencia del Reino Unido en la ONU y el eventual impacto del brexit.

martes, 1 de agosto de 2017

Latinos en Puerto Argentino

Una colonia de latinos
Alan Soria Guadalupe | LA NACION


La expectativa por el operativo no alteró la quieta calma en las islas

PUERTO ARGENTINO.- En las Islas Malvinas los vecinos no acostumbran a juntarse con amigos en una casa a pasar un buen rato. Pero, aún así, cada tanto es común ver las ventanas de una de las casas encendidas hasta bien entrada la noche. Se escucharán carcajadas y, si se presta atención, el idioma no es el inglés. Es que no son isleños, son latinos.

En esta capital, donde viven poco más de 2100 personas, hay una creciente comunidad de latinoamericanos que se instaló en las islas en busca de nuevas oportunidades. La mayoría son chilenos, pero en los últimos tiempos comenzaron a llegar peruanos también. Algunos ya viven aquí hace décadas. Otros vienen sólo por un tiempo y trabajan hasta que ahorran dinero y se van.

Es que aquí, donde la libra es la moneda corriente, se gana bien. Al menos así lo dice Jocelyn, una chilena de 22 años que trabaja de moza en el restaurant de un hotel. Graduada como prevencionista de riesgos, la joven afirma que gana más dinero sirviendo la comida en ese lugar que lo que puede llegar a ganar ejerciendo su profesión en Chile. "Es increíble, lo sé, pero es así", dice, en diálogo con la nacion, resignada, mientras levanta los platos de una mesa. "Soy joven todavía", agrega y se ríe.

Entre comentarios acerca de cómo es su vida en las Malvinas, Jocelyn sonríe cuando habla de las reuniones periódicas que hacen en Puerto Argentino. La última fue ayer, cuando se juntaron a ver a la selección chilena de fútbol.

Pero los latinoamericanos no son los únicos inmigrantes que viven en las islas. Además, hay filipinos, que fueron los últimos en llegar, y trabajadores de Zimbabwe, que llegaron a las Malvinas para trabajar en la limpieza de algunas zonas que todavía permanecen minadas. También hay otros que son extranjeros, pero no tanto: vienen de otras colonias británicas.

domingo, 25 de junio de 2017

Identificando al soldado argentino solo conocido por Dios

La misión de la Cruz Roja, por dentro: tensión, lágrimas y el compromiso con los familiares
La dura tarea del equipo que debe tomar muestras de ADN de los 123 cuerpos no identificados
Alan Soria Guadalupe | LA NACION



El equipo de la Cruz Roja, en el cementerio de Darwin, en un alto de sus tareas


PUERTO ARGENTINO.- Después de despedirse, los ojos del jefe de los forenses se humedecieron hasta que un pestañeo parecía bastar para que cayera la primera lágrima. Pero esa lágrima resistió y nunca apareció. Morris Tidball-Binz acaba de explicar, en un tono solemne, la carga emocional que la tarea de exhumación de los 123 cuerpos de soldados argentinos enterrados sin nombre le imprime al equipo del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que trabaja en las islas Malvinas. Todos tienen décadas de experiencia en tareas similares, pero conocer lo que pasa en el detrás de escena de la misión humanitaria muestra con claridad que, para ellos, esta tarea no es una más.

LA NACION tuvo acceso a los alrededores del cementerio de Darwin, que por los próximos dos meses permanecerá cercado a un kilómetro a la redonda y acordonado por un laboratorio, una morgue, contenedores, camiones y más de una decena de especialistas que caminan por el lugar vestidos con mameluco blanco y barbijo.

Son jornadas intensas que empiezan antes de que salga el sol y terminan bien entrada la noche, cuando llega el tiempo de la camaradería en el Darwin Lodge, donde se hospeda la comitiva.

En el equipo cuentan, sin embargo, que durante el día hay un ambiente especial que les recuerda dónde están y el compromiso que asumieron con las familias de los caídos en combate, que esperan respuestas. Y eso los aflojó. Al final de la primera jornada de exhumaciones, el martes último, los forenses se reunieron en el laboratorio que se instaló en el terreno y se fundieron en un abrazo. "No faltaron lágrimas", cuenta Morris, que hace su primer silencio después de unos diez minutos de hablar sin parar. "Fue un día agotador y ése fue el momento de soltar las tensiones que fuimos juntando", agrega.

El protocolo de ese primer día, en el que se exhumó sólo uno de los cuerpos, se repetirá todas las jornadas hasta fines de agosto si el clima lo permite. Se espera que incluso sean más trabajosas, pues el objetivo es tomar las muestras de hasta tres cuerpos por día.

Según un plan de acción elaborado antes de llegar a las islas, el trabajo en el terreno debe comenzar poco antes de las nueve de la mañana y debe terminar a las 16, poco antes del anochecer.

La excavación y la exhumación del cuerpo demora entre tres horas y cuatro. La remoción de la tierra con una excavadora es lo que demanda más tiempo. Una vez que se encuentra al cuerpo dentro de las bolsas mortuorias -que según Morris casi no se deterioraron en estos años-, se avanza con la extracción y posterior traslado a la morgue, donde los forenses le toman las muestras. Eso demora otras dos horas.

El ADN de los soldados será cotejado con el de las familias que dieron su consentimiento. De todas maneras, explicaron en el CICR, si alguna familia cambia de opinión y accede a proveer una muestra lo podrá hacer. Los datos genéticos serán conservados para ello.

Una vez que termina el trabajo en la morgue, el equipo se encarga de acondicionar el cuerpo para inhumarlo otra vez en un ataúd y en el mismo lugar, una tarea que sale del esquema convencional del trabajo forense, explicó Morris.

En medio de todo el proceso, coordinado por un patólogo, los arqueólogos forenses preparan en el laboratorio informes que ingresan en un sistema cerrado que se conecta con un servidor "la base", ubicada en Darwin, el pequeño pueblo cercano. Al final de cada jornada se escriben nuevos informes y se preparan los equipamientos para el día siguiente.

Morris despoja el gesto adusto cuando cuenta que antes de dormir recuerdan todo lo que pasó en el día. Destaca que el operativo es un tema "muy fuerte" tanto en lo profesional como en lo personal, como cuando uno de los especialistas rompió en llanto al llegar por primera vez al cementerio y ver las cruces blancas. Para el forense no fue algo tan inusual: "Dicen que nosotros tenemos piel dura, pero uno es científico de día y llora de noche. Esta vez también toca llorar de día".

sábado, 24 de junio de 2017

Histeria kelper en la ONU: Levantando el muerto de Malcorra

Malvinas: Faurie debutó en la ONU con un tenso cruce con los kelpers
El canciller renovó el reclamo de soberanía, pero se encontró con una postura rígida de los isleños, que se consideran "un país" y cuestionan la falta de avances con la gestión de Macri
Rafael Mathus Ruiz | LA NACION



Foto: LA NACION

NUEVA YORK.- Los kelpers llevaron ayer a las Naciones Unidas una dura crítica al gobierno de Mauricio Macri, que renovó el reclamo sobre las islas Malvinas con gestos conciliadores para el Reino Unido y los isleños.


El ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Faurie, cumplió por primera vez con el ritual anual de defender los argumentos argentinos para demandar la soberanía de las Malvinas y los espacios marítimos circundantes en la reunión anual del Comité de Descolonización de la ONU. Faurie abogó, una vez más, por zanjar la disputa con el Reino Unido en una negociación.

Mike Summers, miembro de la Asamblea Legislativa de las "Falkland", defendió la postura de los kelpers por última vez: se retirará este año. Summers insistió en que su "país" no era una colonia del Reino Unido, sino una economía exitosa y autosuficiente, y que los isleños tienen derecho a la "autodeterminación", un principio respaldado por Londres que Naciones Unidas nunca les ha reconocido.


El histórico contrapunto surgió, esta vez, en un nuevo contexto: el acercamiento entre Buenos Aires y Londres trazado por Macri, que llevó a la firma del comunicado conjunto entre ambos gobiernos que le valió críticas a la ex canciller, Susana Malcorra. Ese acuerdo ha abierto una nueva etapa de diálogo y cooperación que ya ha dejado un resultado concreto: la misión actual de la Cruz Roja que trabaja para identificar los cuerpos de 123 soldados argentinos enterrados en 1982 en el cementerio Darwin.

Summers dijo que hubo un "muy bienvenido progreso" con la Argentina, y recordó que, entre otros temas, se había comenzado a discutir la restitución de los vuelos comerciales entre las islas y el continente. Pero advirtió que, tras esos primeros avances, ahora todo ha quedado parado. Además, acusó a la Argentina de ejercer "colonialismo económico" y socavar la economía de los isleños y presionarlos con sanciones.

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"La Argentina ha fallado en honrar los acuerdos vigentes", disparó en su discurso Summers, quien culpó a la oposición en el Congreso y al Gobierno por el impasse.

Faurie optó por un tono conciliador. Reiteró que el Gobierno está convencido de que la relación con el Reino Unido "debe ser recuperada" y que quieren una "agenda amplia" con Londres; habló de un "nuevo marco", y de "avances" en comercio, inversiones, ciencia y tecnología, educación y cultura, seguridad y derechos humanos, y afirmó: "Creemos firmemente en el valor de sentarse a la mesa a discutir cualquier tema".

El canciller también brindó una señal a los kelpers: "La Argentina tiene la firme determinación de respetar y defender el modo de vida de quienes viven en Malvinas. Es un compromisos que ha sido asumido por todos los gobiernos democráticos". Luego, señaló que la resolución de la disputa deberá tener en cuenta como requisito indispensable los "intereses de la población de las islas". Al final de la sesión, Faurie se acercó hasta donde estaba sentado Summers y le estrechó la mano.

Como ocurre cada año, el Comité aprobó por unanimidad una resolución que reitera el llamado a buscar una "solución pacífica y negociada de la controversia sobre soberanía" que existe entre la Argentina y el Reino Unido. La resolución fue presentada por Bolivia, Chile, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela.

Summers destacó el tono "discreto" y "conciliador" del canciller. Sin embargo, criticó la tarea del Comité de Descolonización, que siempre ha respaldado por unanimidad el reclamo argentino y ha abogado por una negociación con el Reino Unido, y lo acusó de desconocer el desarrollo en las islas y los derechos de los isleños. Le exigió que se "pusiera al día con la realidad", y en una de sus frases filosas, preguntó: "¿Quiénes son para decirnos que estamos equivocados?".

Rafael Darío Ramírez Carreño, embajador de Venezuela, presidente del comité y uno de los funcionarios más antiguos del chavismo, le respondió: "Es un ejercicio diplomático escucharlo".

Al finalizar la sesión Summers dijo a LA NACION que dudaba mucho que la disputa pudiera ser resuelta porque la Argentina y los isleños "vienen de direcciones muy distintas". Y afirmó: "Nada ha cambiado en todo el tiempo que he estado aquí, o en los diez años antes de que yo empezara a venir".

sábado, 1 de octubre de 2016

Derechos argentinos reclamados en Ginebra

Argentina ante la ONU: "Las Islas Malvinas se encuentran ilegítimamente ocupadas por el Reino Unido"
La delegación nacional pidió por la reanudación de las negociaciones bilaterales, en línea con lo dispuesto por la Asamblea General. Fue en el cierre de la 33ª Sesión del Consejo de Derechos Humanos, en Ginebra
Por Darío Mizrahi - Infobae



Recinto del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra (AFP)


Tras varias semanas de cuestionamientos por la política de acercamiento a Reino Unido ensayada por el gobierno de Mauricio Macri, que incluyó una declaración conjunta sobre la explotación petrolera en Malvinas, Argentina ratificó ante la ONU que el reclamo histórico por la soberanía de las islas sigue vigente. Fue durante el cierre de la 33ª Sesión del Consejo de Derechos Humanos (CDH), en Ginebra.

Ya habían concluido las votaciones y la sesión entraba en el último tramo, las conclusiones y comentarios finales de las delegaciones. Entonces pidió la palabra la representante argentina, Victoria Gobbi. Su declaración se enmarcó en un proyecto que se había presentado sobre la autodeterminación de los pueblos, un argumento habitualmente utilizado por Reino Unido para defender su ocupación: son los isleños los que deben decidir si quieren ser independientes, ser parte de Argentina o del Reino Unido.

"La resolución 2.065 y subsiguientes de la Asamblea General sobre las Islas Malvinas —dijo—, así como también las resoluciones adoptadas sobre el mismo tema por el Comité Especial de Descolonización a la fecha, reconocen de modo expreso la existencia de una disputa de soberanía entre la República Argentina y el Reino Unido, reconociéndolos como la únicas partes en la disputa, y estableciendo que la única forma de resolverla es a través de la reanudación de negociaciones bilaterales, a fin de encontrar a la mayor brevedad posible, una solución justa, pacífica, y definitiva a la controversia".

"La libre determinación requiere para su ejercicio un sujeto activo. Eso es un pueblo sujeto a subyugación y explotación extranjera. De no existir dicho sujeto no hay derecho a la libre determinación. Las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, y los espacios marítimos circundantes, se encuentran ilegítimamente ocupados por el Reino Unido, que expulsó a la población local y la reemplazó por población propia. Este hecho otorga el derecho a la libre determinación inaplicable a la cuestión de las Islas Malvinas", concluyó Gobbi.

De esta manera, Argentina empieza a clarificar su estrategia respecto de un tema tan sensible para el país. Por un lado, buscar un acercamiento en materia de intercambio comercial y de cooperación económica y cultural. Pero por otro, seguir planteando la soberanía argentina sobre las Malvinas y la necesidad de avanzar en una negociación bilateral como la única alternativa viable para la resolución del conflicto.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

Según Macri, UK discutiría la soberanía

Macri señaló que Gran Bretaña "conversaría" por la soberanía de las Islas Malvinas
El mandatario reveló que mantuvo un encuentro informal con Theresa May. "Habría que empezar a conversar", dijo la mandataria británica.
Perfil


El presidente Mauricio Macri ante la ONU. El presidente Mauricio Macri ante la ONU. 
Foto:Telam

Acercamientos, acuerdos y polémica. Esa fue la trayectoria de los últimos encuentros bilaterales que mantuvieron la Argentina y Gran Bretaña con la soberanía de las Islas Malvinas como invisible telón de fondo. Sin embargo, el avance habría llegado a un punto inédito ya que el presidente Mauricio Macri reveló que su par británica le dijo que "habría que empezar a conversar" por las Islas.

"En el almuerzo sí saludé a Theresa May, nos cruzamos con la primer ministro británica, y le dije que estoy listo para comenzar un diálogo abierto que incluya por supuesto el tema soberanía sobre las Islas Malvinas", reveló Télam que le dijo el Presidente esta tarde al concluir su segunda jornada en las Naciones Unidas.

Macri no estaba sentado en la misma mesa que May sino que la primer ministro británica estaba en la mesa de al lado, y, según su relato, "se cruzaron al borde de las mesas". El mandatario relató que May le dijo "que sí, que habría que comenzar a conversar", y que coincidió en que, aunque sea un proceso que llevará años, lo bueno es que comience.

El mandatario indicó que "no hubo ninguna referencia a la declaración conjunta" que firmaron ambos cancilleres recientemente en Buenos Aires, que abre la puerta a que las dos naciones empiecen a trabajar en diversos temas. "Es una declaración, donde cada uno plantea lo que quiere discutir. Nosotros planteamos el tema de soberanía y de pesca, y ellos la exploración de petróleo y la conexión aérea con la isla", explicó.

"Ellos aceptan dialogar sobre todo", aseguró, y agregó que "hay que tener cuidado, hay que manejar la ansiedad" porque esto va a llevar muchos años.

El encuentro entre Macri y May tuvo lugar en el marco del almuerzo que el secretario general de Naciones Unidas, Ban KI Moon, ofreció a todos los jefes de Estado y Gobierno que participaron de la apertura del 71° período de sesiones ordinarias de la Asamblea General de Naciones Unidas.

"En algún momento, lo que es obvio, que es que las Malvinas son argentinas se va a dar, pero si no comenzamos el diálogo es tiempo perdido, que es lo que pasó en los últimos doce años".

lunes, 19 de septiembre de 2016

Macri: La soberanía "no es negociable"

Macri: el reclamo por la soberanía de Malvinas "es permanente y no negociable"
Luego de las críticas por la declaración conjunta entre Argentina y Gran Bretaña, el Presidente se referirá al tema en la la 71ª Sesión de la Asamblea General de la ONU
Infobae


El presidente Mauricio Macri participará de la 71ª Sesión de la Asamblea de la ONU (Télam)

Mauricio Macri llegó este domingo a Nueva York, donde participará de la 71ª Sesión de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas. El Presidente aseguró que su principal intención es mostrarle al mundo "la vocación de trabajo en conjunto y ser parte de la soluciones a los desafíos globales".

Entre los temas más importantes que tratará el jefe de Estado en las Naciones Unidas estará el reclamo de soberanía por las Islas Malvinas. Macri confirmó que ratificará la posición argentina al mundo de que el reclamo "es permanente y no negociable".

El último viernes, la canciller argentina, Susana Malcorra, aseguró que el "tema Malvinas tomará tiempo para que se solucione totalmente". En un comunicado emitido por la Cancillería expresó que "hay ciertas cosas que se pueden hacer mientras tanto, sin abandonar nuestros derechos sobre las islas".

En ese marco, el Presidente aseguró que la soberanía de Malvinas será uno de los temas principales que tratará durante su participación en la Asamblea de la ONU. En los últimos días el Gobierno recibió críticas por el acuerdo comercial alcanzando con Reino Unido.

Luego del acuerdo que lograron Malcorra y el vice canciller británico, Alan Duncan, diferentes sectores de la oposición y el oficialismo marcaron su posición y anunciaron que le pedirán a la canciller que explique el acuerdo logrado.

El presidente del bloque de diputados de la UCR, Mario Negri, pedirá una reunión con la canciller para que "explique cómo impactan" los puntos que se mencionan en el comunicado conjunto que firmó con el vicecanciller británico "sobre el reclamo por la soberanía argentina de las Islas Malvinas".

En su cuenta de la red social Twitter, el legislador nacional advirtió que "todo paso vinculado a Malvinas debe ser bajo dos premisas: el tema de la soberanía no se resigna y cuidar, no alterar una política de Estado".

Malcorra y Duncan acordaron una serie de medidas para avanzar en el trabajo conjunto de ambos países en las Islas Malvinas, entre las que se destaca el establecimiento de un nuevo vuelo mensual, con escalas en territorio continental argentino, y lo vinculado a la exploración de hidrocarburos, al tema de pesca y comercio en general en el archipiélago.

Por otra parte, la Mesa Nacional de la Coalición Cívica ARI manifestó su "preocupación" ante el acuerdo firmado días atrás por el Gobierno porque este país "entiende la negociación como una imposición de sus condiciones", dijo, y exigió que el convenio sea tratado en el Congreso.

"El objetivo de la política de Estado de nuestro país no se alcanzará por medio de un esquema de cooperación en el que el gobierno británico solo entiende la negociación como una imposición de sus condiciones", expresaron las autoridades del partido, que forma parte de la alianza oficialista Cambiemos.

"El anuncio realizado constituye un acuerdo cuya eventual aprobación requiere ineludiblemente la debida intervención del Congreso Nacional", advirtió. En el acuerdo, destacó la CC-ARI, "se soslaya la cuestión de la soberanía" por lo que existe "incompatibilidad" con "la disposición transitoria primera de la Constitución Nacional".

miércoles, 18 de mayo de 2016

Malcorra quiere encapsular y kelperizar las negociaciones para acceder a la ONU

El ajedrez de Macri: mover a Susana Malcorra sin entregar las Malvinas
La jugada para lograr protagonismo en la ONU. El temor a un acuerdo secreto con Gran Bretaña por la soberanía de las Islas.


Por Rodrigo Lloret | Perfil

Malcorra, candidata a suceder a Ban Ki-moon en la ONU. | Foto: Cedoc


El presidente Mauricio Macri está jugando por estas horas una crucial partida de ajedrez sobre el tablero mundial. Pero el deseo de impulsar la candidatura de Susana Malcorra para la Secretaría General de las Naciones Unidas podría tener un impensado impacto en el histórico reclamo argentino por la soberanía de las islas Malvinas.

Malcorra tiene una carrera brillante en la diplomacia de las Naciones Unidas, donde trabajó por 12 años. Fue directora de Operaciones del Programa Mundial de Alimentos entre 2004 y 2008. Luego fue secretaria general adjunta del Departamento de Apoyo a las Actividades sobre el Terreno, donde se desempeñó hasta 2012. Y, finalmente, se convirtió en la jefa de Gabinete del secretario general Ban Ki-moon, hasta el 10 de diciembre de 2015, cuando fue convocada por Macri para conducir el Palacio San Martín.

La jefa de la diplomacia argentina, no quedan dudas, tiene un gran aval para ser la sucesora del surcoreano desde el 1° de enero de 2016. Pero, para alcanzar su objetivo, Malcorra debe lograr dos condiciones: obtener la mayoría en el Consejo de Seguridad de la ONU y que ninguno de los miembros permanentes vote en contra. Si tan solo un país de los cinco grandes se opone, el camino de la canciller estará clausurado.

El mismo reglamento de la Asamblea General indica que el Consejo de Seguridad debe presentar al candidato para que luego sea votado en sesión privada y secreta. Por lo tanto, Malcorra solo podrá ser secretaria general de las Naciones Unidas si Estados Unidos, Gran Bretaña, Rusia, China y Francia la apoyan.

Y es en Gran Bretaña donde se plantea el principal obstáculo. ¿Por qué apoyaría el gobierno británico a una candidata de Argentina a convertirse en nada menos que la principal funcionaria del principal organismo internacional donde se discute la soberanía de las Malvinas?

Malcorra jura que ese tema no fue tratado en la reciente reunión que mantuvo con su colega británico, Philip Hammond. En cambio, aclaró que solo se avanzó en los temas en común: cooperación en el Atlántico Sur, la promoción de inversiones y lucha contra el crimen organizado. Ambos cancilleres se encontraron el pasado 4 de julio en Londres y la reunión representó el primer encuentro entre funcionarios de tan alto nivel de Argentina y Gran Bretaña en 15 años.

Curiosamente, la cumbre se produjo muy pocos días antes de que Argentina oficializara que Malcorra competirá por la ONU.

Es en ese marco, donde hay que prestar atención a las recientes declaraciones que Malcorra hizo a la prensa, en particular, una extensa entrevista que concedió al diario Clarín en Londres, donde la canciller ha pasado los últimos días.

La estrategia de Malcorra sobre Malvinas podría resumirse en dos puntos:

1. Encapsular Malvinas (una fórmula que recuerda la figura del “paraguas” utilizada por el menemismo)

“(Con Gran Bretaña) tenemos lo que yo como ingeniera digo, el principio de Paretto: hay un 80% de cosas en las cuales estamos de acuerdo y siempre hay un 20% en el cual no estamos tan de acuerdo. La ventaja con Gran Bretaña es que sabemos cual es ese 20%: son las Malvinas. Entonces, en lugar de dedicar todo nuestro tiempo a ese 20%, vamos a trabajar y producir resultados en el 80%. En el caso de Malvinas, nosotros tenemos un mandato claro, definido por la Constitución. Entonces ni siquiera hay un signo de pregunta respecto de si esto es o no es un tema prioritario para nosotros. Pero también reconocemos que, con esta retórica enormemente agresiva que hemos tenido en los últimos tiempos, no se ha avanzado en ningún resultado concreto, no nos ha servido a los efectos de estar más cerca de una solución”.

2. Sumar a los kelpers a la mesa de negociación (algo que también hizo el menemismo)

“A medida que avanzan los tiempos, y hay un mayor reconocimiento a la participación de los pueblos, hay un mayor reconocimiento a la participación de la sociedad civil en distintas formas, uno puede ir pensando en opciones de aperturas. No tengo ninguna sobre la mesa en este momento. Pero sería flexible a decir: ‘a ver, escuchemos y pensemos abiertamente’. (…) Vamos a pensar en la gente, en las personas. Una de las cosas que yo quiero resaltar es que, hoy por hoy, no hay ningún impedimento por parte de la Argentina en que los isleños tengan autorización para viajar y para volar en cualquier momento que necesiten, particularmente si hay una emergencia. Pero, de repente, hay cosas que podemos hacer para flexibilizar y facilitar eso aún más. Entonces parte de lo que debemos trabajar en los próximos meses es precisamente en que cosas puntuales. Que pueden ser pequeñas grageas. Nada va a ser una enorme política de estado, podemos trabajar para facilitar esta apertura”.

No está mal, nada mal, que se recuperen las relaciones con Gran Bretaña. Argentina debe superar el conflicto más importante para su diplomacia a través del diálogo. Pero tratándose de un tema tan importante, no debe quedar ninguna duda de lo que se está negociando.

Algo de eso planteó recientemente el ex canciller Dante Caputo en una columna titulada “La oportunidad de Malcorra”, publicada en el diario La Nación. “La campaña que implica hablar con cada uno de los países para obtener el apoyo llevará, lógicamente, a un encuentro con el Reino Unido. Esa reunión no debería convertirse en una negociación en la cual la cuestión Malvinas esté en el centro de la discusión. La Argentina deberá reafirmar su posición sobre la solución diplomática y eventualmente avanzar hacia alguna idea innovadora que cuente con apoyo del gobierno y la mayoría de la oposición. Me parece indispensable que en esas reuniones estén presentes dos miembros de la oposición parlamentaria. Los motivos son sencillos de imaginar: todo acuerdo de palabra debe tener testigos que aseguren su cumplimiento y conviene que en un tema de esta naturaleza haya una representación más amplia que la del gobierno. Un procedimiento sencillo que dará seguridad para el Reino Unido y para la Argentina”.

Nunca antes en la historia de la ONU, un argentino logró convertirse en secretario general de las Naciones Unidas. Se trata de un lugar de mucho prestigio para nuestra diplomacia. Pero es también un premio que no debe lograrse a cualquier precio.

Macri debe pensarlo muy bien antes de mover a su Dama.

martes, 5 de abril de 2016

Aprovechando la nueva resolución de la ONU


Plataforma Continental: entre la celebración legítima y el efectismo innecesario




(FNM) En un encuentro celebrado en el Palacio San Martín durante la mañana del lunes 28, el Gobierno efectuó una presentación del Límite Exterior de la Plataforma Continental Argentina, al culminarse exitosamente una parte del largo y complejo proceso tendiente a definir límites “definitivos y obligatorios”, según lo establecido por la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR). La complejidad del tema y cierto descuido en la presentación de la información, contribuyeron sin embargo a generar interpretaciones erróneas y triunfalistas que se han venido difundiendo en medios de prensa durante las últimas horas.

En efecto, se ha creado la inexacta idea de que el país ha “sumado” algo más de 1.700.000 kilómetros cuadrados adicionales de plataforma continental merced a un “fallo” de la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU (CLPC). En rigor la favorable respuesta de la Comisión –que no es un “fallo”-, se refiere a apenas una fracción mínima de tamaña superficie.

Los antecedentes

Haciendo un poco de memoria, podrá recordarse que el 21 de abril de 2009 –y tras más de diez años de responsables y complejos trabajos científicos desarrollados durante diferentes gobiernos-, Argentina presentó  en la sede de la ONU ante la CLPC,  la información sobre los límites de su plataforma continental más allá de las 200 millas marinas de sus costas, determinados según los criterios establecidos en el Art 76 de la CONVEMAR. Lo hizo, según lo narró oportunamente NUESTROMAR, “dentro de los plazos estipulados, y con la profundidad y rigor técnicos que tan seria –y compleja- elaboración merecen”.            

La presentación argentina incluyó el límite exterior de la plataforma continental correspondiente al total del territorio argentino, tanto en su porción continental, como insular, -incluidas Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur- y también al de la Antártida Argentina.

Dicha propuesta de delimitación, arroja un total de 1.782.000 km2 “adicionales” de plataforma, esto es, plataforma que se extiende más allá de las 200 millas marinas medidas desde las líneas de base (la costa).

Una vez entregada la propuesta, y siempre de acuerdo con las estipulaciones de la CONVEMAR, correspondió a la CLPC el examen de los datos e información presentados, a efectos de comprobar que los resultados se ajusten efectivamente a las pautas del Art. 76. El proceso de análisis por parte de la Comisión es interactivo con el Estado ribereño y puede demandar una considerable cantidad de reuniones aclaratorias y de discusión de los aspectos técnicos de la presentación.

Una vez efectuado el examen de la presentación, la Comisión puede formular recomendaciones al Estado ribereño, sobre cuestiones que se estime deban modificarse. El Estado ribereño puede aceptar dichas recomendaciones o reformular su propuesta y hacer una nueva presentación en un plazo razonable.  Una vez que el estado ribereño determine los límites en base a las recomendaciones de la CLPC, éstos serán considerados “definitivos y obligatorios”.

Lo que ha ocurrido días atrás – el 11 de marzo- es que la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU (CLPC), adoptó por consenso (sin votos en contra), las Recomendaciones producidas como resultado del examen de una parte de la presentación argentina, que abarca solamente la porción norte de la plataforma (correspondiente con el litoral bonaerense y norpatagónico hasta la altura aproximada del Golfo San Jorge), y un pequeño sector al sur de Tierra del Fuego.

El resto de la presentación argentina, no fue considerada por la Comisión, en virtud del propio reglamento de la CLPC, que establece que “en casos en que haya una controversia territorial o marítima, la Comisión no examinará ni calificará la presentación hecha por cualquiera de los Estados Partes en esa controversia”.  Por ello, y ya en septiembre de 2009, la Comisión había determinado que de acuerdo con el reglamento, no se hallaba en condiciones de examinar ni de calificar la parte de la presentación que se refería a los espacios marítimos de las islas Malvinas, Georgias del Sur  y Sandwich del Sur, ni a la plataforma continental perteneciente a la Antártida. En síntesis, la Comisión (CLPC) solo analizó la propuesta de delimitación presentada por la Argentina en una fracción de su “plataforma ampliada” que no superaría el 20% de los anunciados 1,7 millones de km2.



Datos positivos

Varios fueron los aspectos positivos del proceso hasta aquí desarrollado, que fueron apropiadamente destacados durante la presentación ofrecida en el Palacio San Martín ante autoridades nacionales, invitados especiales y representantes de la prensa.

Entre otros, cabe destacarse el reconocimiento de la Comisión de la ONU –integrada por expertos internacionales- a la excelencia del trabajo y argumentos presentados y defendidos por los especialistas argentinos, integrados en la Comisión del Límite Exterior de la Plataforma Continental Argentina (COPLA), que realizaron un trabajo digno del mayor encomio. La complejidad técnica de la tarea y la utilización de todos los criterios y restricciones estipulados en la CONVEMAR hicieron del argentino un “leading case”. La consistencia del trabajo realizado permitió así arribar a un resultado con mínimos cambios respecto de la presentación original.

La tarea habría permitido asimismo, avanzar significativamente en el conocimiento geológico del margen continental, así como en la apreciación de sus potenciales recursos.

Un resultado no menor, es el referido al reconocimiento  por parte de la CLPC de la existencia de una "disputa de soberanía" en torno a las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, que el del Reino Unido pretendió desconocer.

Por otra parte, todo el desarrollo hasta aquí alcanzado – la creación de COPLA, el apoyo y financiamiento para su trabajo técnico, el involucramiento de las distintas instituciones participantes - en un proceso que lleva más de 20 años, ha demostrado que es posible encarar empresas trascedentes de manera coherente e ininterrumpida, más allá del signo político de los gobiernos y las dificultades coyunturales.

Los pendientes más acuciantes

Sin disminuir en un ápice los genuinos motivos de orgullo que dieron lugar al tono celebratorio de la reunión de este lunes, es imprescindible advertir con idéntico rigor, que la cuestión marítima continúa esencialmente fuera de la agenda nacional.

Presentaciones como la desarrollada, deberían enfatizar mucho más explícitamente el hecho de que la mayor parte de nuestros espacios marítimos se encuentran en situación de disputa, con límites que están lejos de obtener la aceptación internacional que los convierta en “definitivos y obligatorios”. Es precisamente en el mar, donde nuestra soberanía es sistemáticamente cuestionada y disputada. Sin embargo, y a pesar de tamaño riesgo, seguimos careciendo de una Política Oceánica Nacional que establezca objetivos, políticas y principios básicos, así como mecanismos de coordinación para orientar el accionar coherente de las distintas autoridades y actores del vasto,  vacío y descuidado escenario marítimo nacional.

Y si cabe celebrar la continuidad en la tarea de la delimitación de la Plataforma Continental, no podemos menor que lamentar la volubilidad de nuestras políticas en relación con “la cuestión Malvinas”, así como la inconstancia en la presencia en el espacio marítimo antártico.

Del mismo modo, es hora de dejar el “párrafo de ocasión” sobre los recursos marinos del lecho y subsuelo para encarar iniciativas concretas y continuas en materia de exploración y eventual explotación de los mismos.

Es de esperar, al menos, que las nuevas dirigencias comiencen por advertir y reconocer que el país necesita un cambio profundo en esa anodina aproximación a la problemática marítima con la que venimos actuando desde hace ya demasiadas décadas. (Fundación NUESTROMAR)

Artículo relacionado: Plataforma continental: un buen paso, un largo camino.

viernes, 1 de abril de 2016

La histeria británica ante el fallo de la ONU


Medios británicos advierten sobre la recomendación de la ONU

María Laura Avignolo - Clarín

El gobierno y los diarios británicos debaten por estas horas el informe de las Naciones Unidas sobre la nueva plataforma continental argentina y buscan reasegurar a los isleños en las islas Malvinas que nada cambiará para ellos. Pero los editoriales de los periódicos y los inversores no descartan litigios en los tribunales por los derechos petroleros alrededor de las islas.

La cancillería británica calificó hoy el informe como "recomendaciones, que son simplemente eso, que no son legalmente obligatorias".

Una vocera del Foreign Office explicó el miércoles a Clarín que aún no han recibido los detalles del informe de la Comisión con las recomendaciones a la que el Ministerio de Relaciones Exteriores argentino se refiere porque “no son públicas”.

"La Comisión sobre Limites de la Plataforma continental no tiene jurisdicción sobre las soberanía de las islas Falkland (sic)", dijo la vocera del Foreign Office a Clarín. "La propia ONU ha reconocido que la Comisión (CLCS) no podía y no consideró reclamos relacionados a las islas Falkland (sic) dentro de la presentación argentina". "El gobierno británico continúa sin tener la menor duda sobre la soberanía de las islas Falkland (sic) y el derecho de los isleños a determinar su propio futuro", concluyó.



El Foreign Office británico insistió en que la comisión de la ONU "no tiene jurisdicción sobre soberanía. En sus propias reglas de procedimiento establece que no puede considerar áreas donde reclamos se superponen, como en la plataforma marítima y otras disputas como delimitación de limites, que es el caso en relación a las islas".

Después, aclaró que, por esa razón, "la ONU ha establecido claramente que la Comisión no puede y no consideró los reclamos relacionados a las islas”.

La vocera  hizo referencia a un comunicado de la ONU del 28 de marzo, donde la Comisión explica su trabajo de cinco semanas considerando presentaciones hechas por una serie de países, como Brasil, Sudáfrica, Papua New Guinea, Kenia y Argentina.

En ese comunicado , la Comisión  de la ONU explica que "a nivel de plenario, la Comisión adoptó, sin voto, dos clases de recomendaciones con respecto a la presentación hechas por Argentina. Con vista  a las recomendaciones con respecto a la presentación de Argentina se recuerda que anteriormente la comisión decidió que no estaba en condiciones de examinar y calificar las partes de la presentación que estaban sujetas a disputa y de aquellas partes relacionadas con la plataforma continental accesoria a la Antártida( ver CLCS/64,paras 76 y 77)", según el comunicado.

Altas fuentes argentinas explicaron a Clarín que el informe de la comisión  de la ONU "se sumará al caso legal con el que Argentina fundamenta su soberanía sobre las islas". Pero son conscientes de que "será parte de una larga negociación política y Gran Bretaña tiene poder de veto en el Consejo de Seguridad". Lo ven "más como un argumento geográfico que político", que "no va alterar la voluntad del nuevo gobierno argentino de tener relaciones civilizadas con Gran Bretaña y sin provocaciones".

El diario The Times dedicó el editorial al tema. Dijo que los argentinos estaban celebrando lo que imaginaban “un progreso” para conseguir las sobrenias sobre las islas.

“El nuevo presidente Mauricio Macri debe respirar profundamente, recuperar el sentido de la perspectiva y calmar las expectativas de sus ciudadanos .La Comisión de la ONU, un grupo de expertos, es un cuerpo consultivo. En otras palabras, Buenos Aires no puede exponer sus reclamos sobre las Falkland (sic) sobre la base de una investigación de la ONU, que está basada en geografía y geología antes que en títulos legales. Esto no sería suficiente reaseguro para los isleños. Es claro que esta decisión sobre la plataforma continental  no afecta la vital pesca de peces y calamares en las Islas, (pero) vuelve incierta la explotación de petróleo en su lecho marítimo", escribió The Times.

El tradicional diario británico cree que habrá argumentos que y Gran Bretaña debe estar lista a batallar en los tribunales. Pero recordó que la oposición está adoptando la versión británica del conflicto y mencionó que Seumas Milne, director de estrategia del laborismo bajo el liderazgo de Jeremy Corbyn, llamó a “compartir soberanía con Argentina”, tras describir las islas como "una absurda de Ruritania de 75 millones de libras al año". Ruritania era un país mítico y falso en Europa central, completamente absurdo, en un film de Peter Sellers.

El diario conservador The Daily Telegraph calificó como una "oscura" comisión de la ONU la que ha emitido un fallo ofensiva para Gran Bretaña y también lo mencionó en su editorial. Considera que no afecta el derecho a de los isleños a la autodeterminación .”Pero puede darles ciertos derechos (a los argentinos) sobre los recursos de las plataforma continental, como el petróleo. El Telegraph cree que “el nuevo gobierno es poco probable que reclame sobre las islas, pero tal decisión va a alentar nacionalistas, que piensan que Malvinas debe ser tomada por la fuerza".

Liza Watson, la directora del isleño Penguin News y con siete generaciones en las islas, dijo que "las actitudes argentinas son irracionales e hipócritas y las comparó con las de un acosador. "Tener un vecino como Argentina es como como vivir en la puerta de al lado de tu acosador, uno que te aterroriza pero luego, lagrimeando, te reprende por rechazar sus avances", describió en una columna en The Daily Telegraph.

A los inversores en el petróleo alrededor de las islas les preocupa el informe de la Comisión de la ONU y cómo va a afectar el futuro de su inversión. Las acciones de las dos compañías que están presentes en las islas cayeron ayer al conocerlo: Northern Falkland Basin y Rockhopper Exploration.

jueves, 31 de marzo de 2016

ONU: Las aguas de Malvinas son Argentinas

Cómo reflejaron los medios británicos el fallo de la ONU sobre la plataforma argentina
Los diarios más importantes del país se hicieron eco del anuncio argentino respecto del nuevo límite exterior del país



LONDRES.- Ayer, la cancillería argentina presentó el nuevo límite exterior de la plataforma continental del país sobre el Atlántico Sur, que agrega 1,7 millones de kilómetros cuadrados y que fue aprobada por la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Desde el Gobierno destacaron que el nuevo límite "reafirma los derechos de soberanía" del país en el Atlántico Sur, "zona política, económica y estratégicamente importante", donde se ubican las islas Malvinas, administradas por el Reino Unido desde 1833 pese al constante reclamo argentino de soberanía.


"Es una ocasión histórica y un gran paso en la demarcación del límite exterior de la Argentina", destacó la canciller argentina, Susana Malcorra, a través de un video que grabó en Estados Unidos, donde se encuentra actualmente.

Y la noticia se hizo eco en los medios de todo el mundo. Y en el Reino Unido no dejaron pasar la noticia desapercibida. Los diarios más importantes del país se hicieron eco del anuncio argentino y hasta sentaron su postura al respecto.



The Guardian

"Las Falklands [como los ingleses nombras a las Islas Malvinas] se encuentran en aguas argentinas según Naciones Unidas"

La publicación remarca que la Argentina "celebra la decisión de ampliar su territorio marítimo, a pesar de conflicto no resuelto con Gran Bretaña sobre las islas".

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The Times

"La decisión de la ONU aprueba el reclamo de la Argentina sobre el territorio de Falklands"

El prestigioso diario destaca que la aprobación del organismo internacional resulta "sorpresiva" y que con esta decisión el gobierno argentina expande su territorio en 1.7 millones de metros cuadrados.


The Telegraph

"Falklands Islands: Argentina celebra la decisión de la ONU de expandir su territorio marítimo para incluir las disputadas 'Malvinas'""La decisión de la comisión de la ONU de expandir el territorio marítimo de la Argentina en el Océano Atlántico Sur en un 35 por ciento es considerada como cambio de juego", publica el medio.


The Daily Mail

"La comisión de la ONU establece que las Falklands están dentro de las aguas argentinas lo que hace temer que la nación sudamericana reclamará sus valiosas reservas de petróleo"

En su artículo, la publicación asegura que un fallo de la ONU dictaminó que las Malvinas son argentinas por lo que crece el temor de que el país reclame las vastas reservas de petróleo de la región.


The Independent

"La ONU falla que las Falkland Islands están en aguas argentinas"

El diario también se hizo eco de la noticia e indica que "la propiedad de los recursos naturales que se encuentran en las aguas de las islas ahora podría estar bajo amenaza"

jueves, 24 de diciembre de 2015

La versión kelper de la Resolución 2065

Malvinas y Resolución 2065: La ONU fue 'soberanamente engañada'
Las Naciones Unidas fueron “soberanamente engañadas” hace cincuenta años, sostuvo el legislador de las Islas Malvinas Mike Summers en respuesta a la celebración en Argentina del quincuagésimo aniversario de la resolución de la ONU reconociendo la existencia de una disputa de soberanía respecto a las Malvinas.

Fuente: Mercopress



 La resolución 2065 sostiene que las Malvinas están encuadradas en una 'situación colonial', la cual debe ser resuelta tomando en consideración el objetivo de eliminar toda forma de colonialismo.
La resolución de 1965 invita a las partes a encontrar una solución pacífica a la disputa y que se tome en consideración los intereses de los habitantes de las Islas.
Pero MLA Summers afirma que la Resolución 2065 de la ONU se basó en una serie de mentiras, engaños y medias verdades elevadas a la ONU por el entonces embajador argentino José María Ruda.
El legislador sostiene que existen por lo menos doce 'no verdades' en la resolución y se vienen repitiendo una y otra vez por los sucesivos políticos argentinos.
MLA Summers reiteró una afirmación que elevó ante el Comité de Descolonización de la ONU haciendo resaltar que el embajador Ruda había afirmado que la soberanía española sobre las Malvinas era caso cerrado, pues España había realizado una reserva expresa de su soberanía sobre las Islas el 22 de enero de 1771.


“No fue así; tanto Gran Bretaña como España se reservaron sus posiciones respecto a la soberanía sobre las Islas en el tratado”. El Dr. Ruda también argumentó que Gran Bretaña expulsó a la población argentina de las Malvinas en 1833.
“No fue así”, resaltó Summers, “lo que hizo Gran Bretaña fue remover un destacamento militar ilegal, pero persuadió a muchos civiles argentinos y uruguayos a que permanecieran en las Islas”.
Argentina afirma que los habitantes residentes argentinos resistieron a los 'invasores' británicos: “no fue así, por el contrario dieron la bienvenida y buscaban ayuda para escapar del fracasado emprendimiento de Vernet, y permanecieron en las Islas”.


También afirman que Gran Bretaña reemplazó a los habitantes argentinos con súbditos británicos: “no fue así”, afirma MLA Summers, “muchos de los civiles argentinos se quedaron, y con el correr de los años fueron suplementados por nuevos colonos de otros países de Europa y América del Sur, incluyendo Chile, Argentina, Uruguay el Reino Unido y Escandinavia”.
El embajador argentino Ruda afirmó que no existía acuerdo internacional alguno que confirmara la posesión británica de las Malvinas y que Argentina jamás había aceptado la posesión británica de las Malvinas.
De acuerdo a MLA Summers, “La convención del Acuerdo de 1849 ratificada por ambos gobiernos en 1850, confirmaba que no había disputas pendientes entre los dos países. Es decir, Argentina aceptó la soberanía británica sobre las Malvinas”.
Argentina afirma que ”los Falkland Islanders (Isleños) eran una población británica temporal“, pero MLA Summers describe esta afirmación como quizá ”la mayor de todos los engaños, pues ahora podemos demonstrar que existen nueve o hasta diez generaciones de colonos de 61 diferentes orígenes étnicos“.

MLA Summers remata argumentando que la resolución 2065 ha sido más que desacreditada por la historia. ”Fue consignada al basurero en 1982 cuando Argentina recuperó las Malvinas, y hecha totalmente irrelevante por el referendo de 2013“.
”Resulta desafortunado“ que el nuevo gobierno argentino haya decidido que nuevamente quiere poner al frente dicha resolución, ”pero creo que desde nuestra perspectiva me gustaría reiterar que el camino está abierto para que el nuevo gobierno de Argentina encuentre una forma mejor y de cooperación para convivir en el Atlántico sudoeste“.
”Esto no quiere decir, nunca quiso y nunca significará que estamos preparados a discutir la soberanía de las Falkland Islands. (PN).


miércoles, 23 de diciembre de 2015

Otra reflexión sobre la Resolución 2065

Las Islas Malvinas 
PABLO ORTIZ GARCÍA - El Comercio



El 16 de diciembre se cumplieron 50 años de la expedición de la Resolución 2065 de la Organización de las Naciones Unidas, a través de la cual, y sin voto en contra alguno, el mundo entero reconoció la existencia de una controversia sobre la soberanía de las Islas Malvinas (no Islas Folkland, como los ingleses las llaman). Este conflicto debía ser resuelto, según la Resolución de la ONU indicada, cuidando la integridad territorial y los intereses de sus habitantes. El doctor Ezequiel Pereyra Zorraquín, abogado argentino y experto en materia de Derecho Internacional Público, afirma que “en pleno fin del colonialismo, ellos consiguieron (se refiere a los expertos argentinos encargados del tema de las Islas Malvinas), que la disputa se concentrara sobre el territorio, pero no sobre un pueblo, que en realidad era un injerto colonial”. Con el reconocimiento de la ONU, que se dio cuando Arturo Illia ejercía la Presidencia de la República Argentina, el siguiente paso a seguir fue que se “una” el territorio continental argentino con el insular, para lo cual con cierta regularidad barcos argentinos arribaban a esas Islas, al igual que la ruta entre esos dos territorios separado por el Océano Atlántico se cubría por vía aérea al menos dos veces por semana. En lo referido a la población llevada desde Inglaterra, se le enseñaba el idioma español, al igual que se le ofrecía becas para que estudie en las universidades argentinas en el continente. Se proveía de gas y combustible a sus habitantes. Es decir, las autoridades gubernamentales en Buenos Aires ejercían actos de soberanía en la parte insular de su territorio. Sin embargo, el golpe de Estado que el general Onganía propició en contra del mandatario del Partido Radical, Arturo Illia, tuvo como resultado, entre otras consecuencias nefastas, que toda la política internacional llevada a efecto por expertos de la Cancillería argentina sobre las Islas Malvinas, se fuera al garete. Y, poco a poco, la política colonialista del Reino Unido se consolidó en un territorio ubicado a poca distancia de Argentina y a miles de kilómetros de Londres. La política colonialista de los grandes imperios que existieron en el mundo, se desmoronó. Los pueblos “conquistados” han regresado a sus orígenes; es decir, a tener su propia identidad y a desarrollarse de acuerdo a sus principios. Pero en lo que respecta a las Islas Malvinas, Argentina se extravió en su pretensión de recuperarlas, y América del Sur, al no haber un líder, no se ha unido en la lucha por acabar con una colonia inglesa enclavada en un lugar estratégico para América del Sur. Los nuevos vientos libertarios que están llegando a América ojalá logren que la política internacional de Argentina sea más diáfana en la lucha por unas islas que le pertenecen por historia.