sábado, 26 de septiembre de 2015

AAM: Rafael Shafrir 2 (Israel)

Rafael Shafrir 2 


El Shafrir 2 es un misil aire-aire de segunda generación de uso en la fuerza aérea israelí.

Su desarrollo se inició en 1963 y continuó hasta 1969, cuando el misil entró en servicio en la fuerza aérea israelí.

El Shafrir 2 es un misil "fire & forget", trabaja fijando y siguiendo las señales recibidas desde la línea de visión del piloto quien observa al avión enemigo. El misil recibe estas señales e impacta al avión enemigo sin requerir al piloto fijar su aeronave a la del avión enemigo.
El Shafrir 2 participó en la Guerra de Desgaste, los misiles hicieron impactos precisos y derribaron aviones enemigos. Tiene acreditado con más de 100 derribos, principalmente durante la guerra de Yom Kippur en 1973.

El Shafrir 2 puede ser lanzado a un alcance efectivo de hasta unos 5 km, fue construido para impactar al avión hasta a 60,000 ft.

El Shafrir 2 tenía un peso de 93 kg y es 250 cm long con un diámetro del cuerpo de 15 cm, peso de la cabeza de guerra 11 kg (4 kg de ellos es explosivo), peso del motor de 50 kg y durando 5 segundos desde el lanzamiento.

Shafrir 2 desarrollo inició en 1963 porque problema que estaba presente en el Shafrir 1, el problema era que la cabeza de guerra era demasiado pequeño, para distancias cuando el misil no acertaba al blanco.


El Shafrir 2 fue adquirido en grandes cantidades por la Fuerza Aérea Argentina, estando actualmente la totalidad de los 200 misiles adquiridos fuera de servicio. 




Fotos

De práctica de la FACh El Shafrir fue ampliamente utilizado en Latinoamérica.

Buscador de misil


Engarzado por equipos de tierra

Recién salidos de la fábrica

Datos Técnicos



En Latinoamérica


C-101 de la FACh portando un AAM Shafrir 2 bajo sus alas

Un Mirage IIIE de la FAA portando un Shafrir 2


Israeli-weapons (c)

viernes, 25 de septiembre de 2015

Arte: Fenix con Pucaras

Fenix con Pucaras

Ultimo cuadro entregado por el Escuadrón Fenix a la 3a Brigada Aérea

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LV-ODZ trip AlfC.Quiroga-Alf E.Meyer
A-549 1er Ten Ayerdi
A-514 Alf LaTorre
A-522 Alf Hub

Por Exequiel Martinez

jueves, 24 de septiembre de 2015

Rugby sin Fronteras entre veteranos anglo-argentinos

Argentinos y británicos combatientes de Malvinas, unidos por el rugby


Luego de 33 años, veteranos del conflicto bélico se reencontraron para disputar un partido cerca de Londres. La pelota fue bendecida por el Papa Francisco
Argentinos y británicos combatientes de Malvinas, unidos por el rugby

Argentinos y británico que combatieron en la Guerra de Malvinas disputaron un encuentro de rugby, a pocos kilómetros de Londres, en un duelo por la paz entre ambos países tras 33 años del conflicto bélico en el archipiélago.
El encuentro se jugó en estadio del club inglés Esher, cerca de donde se disputa el Mundial de Rugby, y fue organizado por la Fundación Rugby Sin Fronteras.
"Fue una guerra innecesaria y no les guardo ningún rencor, el rencor daña a las personas", contó Horacio Gatas, un veterano argentino.
Los argentinos y británicos jugaron mezclados en los dos equipos, a los que se sumaron familiares y amigos.



Los veteranos llevaban un brazalete distintivo, y, como superan los 50 años, el partido se acortó a dos tiempos de 20 minutos.
"La belleza del rugby es lo que viene luego: hablamos, bebemos y reímos", explicó el doctor David Jackson, de 57 años, que abandonó el ejército británico para hacerse médico y especializarse en el tratamiento del estrés postraumático que él mismo sufrió.
"Los políticos fallaron y nosotros tuvimos que ir y arreglarlo", explicó Russell Craig, un veterano británico de 56 años.
"Nosotros no estamos ni a favor ni en contra de la soberanía (argentina de las Malvinas), nosotros no tenemos fronteras", sentenció Alejandro Diego, de la Fundación Rugby sin Fronteras y uno de los promotores del partido.

Diario Popular

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Biografía: Menéndez, un tipo poco capacitado en el momento más necesario

Las guerras del general Menéndez
En 2008 y 2012, PERFIL publicó las últimas entrevistas que concedió el gobernador de Malvinas en 1982. Sus críticas a Balza y la defensa de su rol en el conflicto. 

Por Hérnan Dobry | Perfil


Poder. El momento más significativo en la vida militar de Menéndez: gobernador de las islas durante la guerra. | Foto: Cedoc


El general de brigada (R) Mario Benjamín Menéndez falleció el viernes en Buenos Aires luego de haber estado internado durante dos semanas. En 2008 dio su última entrevista a Perfil en la que atacó al teniente general Martín Balza, criticó al teniente general Benjamín Rattenbach y defendió su rol como gobernador de las islas Malvinas durante la guerra.

—¿Cómo vivió las últimas horas antes de la rendición?
—La situación estaba absolutamente deteriorada. Hablé con el general (Leopoldo Fortunato) Galtieri y se la describí. El  no podía o no quería entenderla, así que se lo tuve que repetir y le pregunté si podía contar con algún apoyo aéreo u otra cosa. Me explicó que no me podía garantizar ninguno. Entonces le dije: como comandante no sé qué va a ser de esta guarnición al final del día de hoy. Ante eso, me voy a hacer responsable. Y le corté.

—¿Ya tenía en mente la rendición?
—No sabía qué iba a hacer porque no había habido contacto con los ingleses. Era como una especie de nebulosa: ¿cómo hacemos ahora? ¿Vamos a seguir combatiendo hasta que las acciones se interrumpan o a tratar de tomar contacto con los ingleses? Esto último me parecía que significaba ponerme de entrada en una posición inferior. En ese momento, el capitán de navío (Barry) Hussey me dijo que había una comunicación con los británicos que ofrecían un cese del fuego para iniciar conversaciones y terminar con las operaciones. Resolví aceptarlo y les sugerí reunirnos a las 16.



—¿Cómo se preparó para ese momento?
—Me fui a la residencia porque estaba agotado, me lavé, me afeité y me puse presentable. Llevaba 36 horas sin dormir. Ni me cambié de ropa ni me lustré las botas, como dicen algunos. Pensé que era el final. Me puse a juntar los papeles y, después, nos fuimos caminando hasta la secretaría a esperar a los emisarios ingleses. Ahí, llegó el coronel (Michael) Rose e iniciamos la reunión.

—¿Qué ocurrió allí?
—El planteó, de entrada, que había que resolver en qué momento y forma se produciría la rendición. La verdad es que lo asumí. Sabía cómo estaba mi gente, así que no lo discutí. Les pedí llevarnos nuestras banderas que nos habían acompañado en la guerra, acordamos en qué condiciones iba a producirse el repliegue de nuestra gente, la entrega de administración, que no iba a haber ningún desfile, ni periodistas en la ceremonia de capitulación. Quedamos en el horario en que el general (Jeremy) Moore iba a estar ahí y me fui a hablar con Galtieri, quien me dijo que me había extralimitado.

La última entrevista de Menéndez a PERFIL: "El mayor error fue aceptar la Guerra"
—¿Cómo fue la reunión con Moore?
—Él hizo una introducción y luego me dijo: “Ahora usted me tiene que firmar la rendición”. Estaba en inglés, la leí, y cuando vi la palabra incondicional me planté: “General, esto no es lo que se pactó esta tarde”. “Cómo, ésta es la rendición, acá está”. No, porque se estipularon condiciones y acá habla de una rendición incondicional, o sea, están cambiando los términos. Esto no lo acepto. No sé en qué condiciones, pero si usted insiste en esto, los argentinos seguimos peleando. Se quedó y después lo aceptó: “Está bien, tachemos la palabra”. Podría haber discutido Falkland/Malvinas porque las Naciones Unidas lo aprobaban. Pero era un momento muy difícil.



—¿Qué sintió en ese momento?
—Un sentimiento muy mezclado. Es terrible tener que estar ahí. Sabe que tiene que hacerlo y no por usted, por las tropas, pero al mismo tiempo es una frustración, una decepción. Es la bronca de haber llegado a eso porque, además, es una de las cosas en las que un militar nunca quiere pensar. Están los tipos que dicen: “¿por qué no se pegó un tiro? Creo que el suicidio no es una solución. Era muy fácil, pero es dejarle a otro que cuente la historia como quiera. Usted sabe que las cosas que tenía que hacer las hizo, y bastante bien. Hubo una serie de fallas que son de orden estratégico operacional. En lo táctico, no podía dar mucho más de lo que dio y, en última instancia, estaba cumpliendo con mi obligación de comandante. Hay muchos que dicen: usted salvó a miles de hombres. No sé a cuántos salvé, creo que tomé la decisión táctica que debía. Esa noche no pude dormir. Pensaba en todo lo que había vivido y pasado, las cosas que había pensado y dicho en el transcurso de las operaciones.

—¿Qué sensación tuvo cuando llegó al continente?
—Fue una recepción fría como el hielo, estaban nada más que los familiares en Tablada.

—¿Cómo se sintió con el trato que le dio Galtieri después de la guerra?
—Me enteré una vez por otros generales que le habían preguntado si alguna vez nos había vuelto a ver a los que habíamos ido a Malvinas. Dijo: “No, pensé que los muchachos iban a venir a verme”. Entonces les respondí: ¿no creen que él nos debió haber llamado cuando regresamos y no nosotros ir ahí a rendirle cuentas? Nos mandó y mantuvo allá. Si nos sobraron o nos faltaron cosas, fue su responsabilidad y del resto de la Junta. Le hice un tribunal de honor y se lo gané.

—¿Leyó alguna vez las críticas que le hizo el general Balza en su libro?
—Mejor no hablemos. Es un mentiroso. Lo pensé mucho antes de hacerle un tribunal de honor. A él no le gustan porque se ha tenido que chupar varios. Sabe que no tiene razón, pero es muy hábil y ha inventado la historia de que no participó de la guerra contra el terrorismo y que fue el tipo que más hizo en Malvinas y que los otros fueron unos nabos o pusilánimes. Él es políticamente aceptable, nunca va a decir que no es cierto lo de los 30 mil desaparecidos. No digo que no los haya, pero creo que 30 mil es una cifra inventada. Para él, es más fácil atribuirse el hecho de que quería que tal cosa se hiciera o no, pero no integraba el Estado Mayor. Era un jefe de grupo de artillería al cual se le dio la misión de integrar los fuegos de la artillería terrestre, ni siquiera la defensa antiaérea, porque el responsable era otro.

—El informe Rattenbach tampoco lo deja muy bien parado.
—El general Rattenbach firmó en desacuerdo y en disidencia el informe realizado de la famosa Comisión de Análisis y Evaluación. Por eso, es un contrasentido que se llame así. A mí, además de ese informe, me enjuiciaron dos veces y fui absuelto de todos los cargos que se me formularon. Cuando he hecho tribunales de honor, los he ganado todos. Soy un ciudadano que puede salir a la calle como usted, debo hacerlo porque además tengo una responsabilidad que es la de dar un testimonio.



—¿Cuál fue el mayor error que se cometió en Malvinas?
—Aceptar la guerra, porque no la propusimos nosotros. Para ese entonces, teníamos una plaza llena que condicionó al gobierno.

—¿Alguien tendría que haberlo previsto?
—No lo sé. Entonces la alternativa fue: vamos a reforzar las Malvinas para defenderlas, de manera que los ingleses pierdan tiempo, que les cueste y que eso los pueda llevar a hacer lo que nosotros queríamos: la negociación. Eso prácticamente está plasmado en lo que nos dijo el general Leopoldo Fortunato Galtieri el 22 de abril: “Las fuerzas de tareas inglesas cada vez están más al sur. En la medida en que sigan, no van a poder volver sin hacer algo. Ahora, si ese algo es atacar Malvinas y ustedes aguantan yo creo que después nos vamos a sentar a la mesa”. Le pregunté: ¿Aguantamos o no? Desde  el 1º de mayo, aguantamos 44 días, más los anteriores.

—¿Por qué no renunció si no estaba de acuerdo?
—Debería haberme enojado y vuelto al continente porque no se hacía caso al asesoramiento del hombre que estaba en el terreno. Resolví aceptar una solución a medias, que no son las mejores. En la Comisión Rattenbach lo definí en dos palabras y no sé si les gustó o no: imprevisión, improvisación.

viernes, 18 de septiembre de 2015

Biografía: Murió M.B. Menendez

Murió Mario Benjamim Menéndez
Tenía 85 años. Fue gobernador de las Islas Malvinas durante la guerra del ‘82. Galería de imágenes.


 
En 1982, como general y subjefe del Primer Cuerpo de Ejército en Buenos Aires, el militar ocupó la Gobernación de las Malvinas durante parte de la guerra que Argentina combatió contra el Reino Unido.




En 1982, como general y subjefe del Primer Cuerpo de Ejército en Buenos Aires, el militar ocupó la Gobernación de las Malvinas durante parte de la guerra que Argentina combatió contra el Reino Unido.
Archivo | "Nuestro peor error fue haber aceptado la guerra"
A los 85 años, murió hoy el exgobernador de las Islas Malvinas Mario Benjamín Menéndez. Según trascendió, estaba internado por una dolencia física desde hace dos semanas.

En 1982, como general y subjefe del Primer Cuerpo de Ejército en Buenos Aires, el militar ocupó la Gobernación de las Malvinas durante parte de la guerra que Argentina combatió contra el Reino Unido.



Retirado de la política desde la caída de la dictadura, el exrepresor mantuvo un perfil bajo, que quebró en contadas oportunidades. Una de ellas fue la entrevista que brindó a PERFIL en 2012, donde reconoció que el país no estaba en condiciones de sostener un conflicto bélico como el de 1982.



Investigaciones. Sumado a su accionar durante los últimos años de la dictadura militar, Menéndez fue detenido en 2012 por su participación en el Operativo Independencia, como jefe d

Se hundió, como el país, el velero kirchnernista

Tierra del Fuego | Se hundió el velero usado por La Cámpora
“La Sanmartiniana", armada por la agrupación de Máximo Kirchner, había quedado varada con nueve tripulantes a bordo, que fueron rescatados.
Perfil


La nave, que fue comprada por la agrupación de Máximo Kirchner, costó 90 mil dólares. | Facebook

"La Sanmartiniana", un velero propiedad de la agrupación kirchnerista La Cámpora, quedó varado el martes en Isla de los Estados, Tierra del Fuego, motivo por el cual el Ministerio de Seguridad había lanzado un operativo de emergencia. Un pesquero acudió al rescate, pero camino al puerto de Río Grande, la linga de amarre se cortó y la embarcación desapareció.

Las nueve personas que viajaban en el velero fueron rescatadas por el pesquero "San Arawa II". Los tripulantes eran en su mayoría militantes sociales y sindicales ligados a la agrupación kirchnerista.



El pesquero remolcaba en la noche del miércoles el velero con la intención de llevarlo al puerto de Río Grande. Pero la linga que unía a ambas embarcaciones, de unos 300 metros, se cortó y el velero se extravió, informó Radio Fueguina.


Preparan operativo de rescate para el velero de La Cámpora

El buque había sido adquirido por la Fundación Interactiva para promover la Cultura del Agua (FIPCA) a un costo de 90 mil dólares en 2013. Hace una semana zarpó de Ushuaia con militantes, que tenían la intención de "concientizar sobre la importancia del conocimiento y el desarrollo de los recursos marinos nacionales".

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Velero alentado políticamente queda en emergencia frente a Malvinas

El velero de La Cámpora, en emergencia en aguas del sur: lanzan operativo de rescate
La embarcación quedó en medio de un temporal en Tierra del Fuego, con 9 tripulantes. Los está remolcando un pesquero. La alerta llegó a TN y la Gente.


EN EMERGENCIA. Este es el velero rescatado. (foto TN y la Gente) TN Y LA GENTE EN


El velero de La Cámpora, "La Sanmartiniana", comprado por la agrupación de Máximo Kirchner, sufrió una emergencia en Isla de los Estados, Tierra del Fuego, y el Ministerio de Seguridad lanzó un operativo de rescate. Los 9 tripulantes están a salvo, informaron fuentes oficiales a TN.com.ar.

El capitán del velero, Javier Vázquez, emitió la alerta el martes a las 17. Los 9 tripulantes se declararon en emergencia cuando quedaron envueltos en un temporal. Además la situación se complicó por la rotura de una de las bombas de agua de la nave. Fue esa misma alarma la que llegó esta madrugada a TN y la Gente, el portal de periodismo ciudadano de este portal.

El barco pesquero "San Arawa II" respondió al llamado y cerca de la una de la madrugada logró contactarlos y enganchar la embarcación para remolcarla. Los tripulantes recibieron asistencia sin poder abandonarlo. El velero está valuado en 90 mil dólares.

El Ministerio de Seguridad de la Nación le confirmó a TN.com.ar que la nave está a 100 kilómetros de la costa de Río Grande y que los 9 tripulantes están fuera de peligro. Un helicóptero de rescate fue puesto en alerta para un eventual operativo.

Desde la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua, que compró el velero, también confirmaron la información. "Salieron hace más de una semana desde Ushuaia y los agarró una tormenta. Venían de Isla de los Estados, en Tierra del Fuego".

"Ahora están yendo a Río Grande, asistidos por un pesquero, y llegarán a la noche porque van a 6 kilómetros por hora, por las grandes olas", le dijeron a TN.com.ar.

TN

martes, 15 de septiembre de 2015

Sobre reclamos argentinos y británicos, según The Economist

Cómo compiten las reclamaciones por las Malvinas / Falkland 

The Economist



Uno de los primeros líderes extranjeros en felicitar a Jeremy Corbyn por su elección como nuevo líder del Partido Laborista de Gran Bretaña el 12 de septiembre fue Cristina Fernández de Kirchner. El presidente de Argentina tuiteó felicitaciones de su gobierno al Sr. Corbyn, "un gran amigo de Latinoamérica, [cuyas] acciones, en solidaridad, nuestras demandas por la igualdad y la soberanía política." Se refería a una larga disputa entre Gran Bretaña y Argentina sobre las Islas Malvinas o Falkland, como se les conoce en español, que se encuentran 480 kilómetros (300 millas) de la costa oriental de América del Sur. Gran Bretaña y Argentina, tanto ellos afirman. Inusualmente para un político británico, el Sr. Corbyn ha argumentado que las islas deben ser administrados en forma conjunta. ¿Cómo se comparan respectivas reivindicaciones de los países?

En 1982 la dictadura militar de entonces de Argentina invadió las islas en una búsqueda desesperada de popularidad en el país. Gran Bretaña las re-invadió después de una guerra de diez semanas en el que 649 argentinos y 255 soldados británicos murieron, junto con tres isleños. La derrota militar provocó un retorno a la democracia en Argentina. Sus gobiernos posteriores han renunciado al uso de la fuerza, pero todavía interponer una demanda diplomática a las islas. Fernández ha sido particularmente enérgica en este sentido. Argentina despliega dos argumentos principales. En primer lugar, según el Ministerio de Relaciones Exteriores, en 1833 Gran Bretaña "ocupó ilegalmente las islas y desalojó a las autoridades argentinas", evitando un asentamiento argentino allí. En segundo lugar, la Argentina dice que el Reino Unido está actuando como una potencia colonial en contra de la Carta de la ONU. Gran Bretaña se opone tanto a estas afirmaciones, y dice que no hay nada que negociar. Argumenta que continuamente y legalmente ha ocupado las Islas Malvinas desde 1833 y que sus habitantes tienen el derecho a la libre determinación en virtud de la Carta de la ONU.

Las islas fueron ocupadas intermitentemente en el siglo 18 por los marineros franceses, españoles y británicos, pero no tenía habitantes permanentes entre 1806 y 1826. En 1820 el Estado de reciente independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el precursor de Argentina, declaró que había heredado la soberanía española sobre las islas. Esta afirmación fue disputada por Gran Bretaña y los Estados Unidos. Buenos Aires nombró a un gobernador en 1829, pero su pequeño poblado fue arrasado por un buque de guerra estadounidense dos años más tarde; Su reemplazo fue asesinado por un grupo de convictos argentinos. Gran Bretaña y luego ocupó las islas en 1833, declarándolos una colonia de la Corona y resolver con escoceses y galeses.

Hoy las Malvinas son un territorio británico de ultramar autónomo, con 2.932 habitantes, algunas de cuyas familias han vivido allí durante siete generaciones. La economía de las Malvinas ha sido impulsada por la expedición de certificados para la pesca y de la exploración de petróleo. En marzo de 2013 el gobierno de las Malvinas celebrará un referéndum sobre el estatus político del territorio en el que el 99,8% de los votantes apoyaron el status quo. Ninguna de las partes va a cambiar su mente para el futuro previsible.