En 1986, el presidente estadounidense Ronald Reagan ofreció a Gran Bretaña el avión F-117
Por David Cenciotti - The Aviationist
Documentos recientemente desclasificados muestran que el presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan, ofreció a la primera ministra del Reino Unido, Margaret Thatcher, el acceso a la tecnología estadounidense de sigilo.
Recientemente documentos desclasificados de los Archivos Nacionales Británicos han expuesto algo interesante: en 1986, el entonces Presidente de los Estados Unidos Ronald Reagan ofreció a la primera ministra británica Margaret Thatcher una oportunidad para la cooperación transatlántica en la tecnología Stealth.
Según informó el Guardian, bajo el nombre de "Proyecto Moonflower", el ex POTUS (President of the US) ofreció a Downing Street un briefing sobre el Proyecto Negro y la oportunidad para que los EE.UU. y el Reino Unido trabajen juntos en él.
"Querida Margaret", un telegrama televisado de 1986 del Guardian grabó, "Estoy encantado de saber que usted será capaz de ver a Cap [Casapar Weinberger, el secretario de Defensa de EE.UU.] para discutir el programa especial que te escribió acerca de ... Me parece Adelante a recibir su reacción. Sinceramente, Ron. "
Pero el Reino Unido rechazó la oportunidad de trabajar con la tecnología furtiva estadounidense y adquirir aviones furtivos F-117, que habían hecho su primer vuelo en 1981 y continuaban operando en secreto hasta que fueron revelados al público en 1988, un par de años Antes de convertirse en famoso durante la Tormenta del Desierto en Irak.
De hecho, una carta del Ministerio de Defensa en diciembre de 1986 dirigida a Charles Powell, consejero de asuntos exteriores del primer ministro, le informó que "el Sr. Weinberger nos ha ofrecido la oportunidad de comprar el actual avión estadounidense, pero hemos respondido que no querríamos comprar hardware mientras El programa permanece estrictamente negro [secreto].
Después de rechazada la primera oferta, una versión modificada de la línea de base F-117 fue ofrecida a la Real Fuerza Aérea del Reino Unido en 1995.
Se creía que el F-117C, la variante británica, estaba previsto que estuviera equipado con "entradas de tipo B-2, un toldo tipo F-22, aviónica británica, motores F414 o EJ200, además de varios componentes estructurales de BAE O subconjuntos. "
La aeronave, también conocida como F-117A + o F-117B (B por "British") se estaba ofreciendo como reemplazo para el Tornado GR4 y se cree que esta fue la razón por la cual algunos pilotos de la RAF eventualmente volaron el sigilo de Nighthawk Jet antes de que fuera (de alguna manera) retirado en 2008.
A pesar de que la tecnología furtiva que hizo que el F-117 fuera invisible para los radares se remontara a mediados de los años 80, el Tornado GR4 ha sido un sistema de armas bastante exitoso que la Fuerza Aérea Real ha usado ampliamente en combate en todos los conflictos y crisis Operaciones de apoyo en las que ha participado en los últimos 20 años.
Mientras tanto, la furia del primer Reino Unido ha llegado finalmente en forma de un controvertido Lockheed Martin F-35 Lightning II.
miércoles, 4 de enero de 2017
martes, 3 de enero de 2017
Ministerio olvida poner a Malvinas en mapa de felicitaciones
Desarrollo Social excluyó "por error de diseño" a Malvinas del mapa argentino
La cartera de Stanley creó una tarjeta de salutación para Año Nuevo y generó el repudio del kirchnerismo y de los veteranos. El pedido de disculpas.
Perfil
Desarrollo excluyó "por error" a Malvinas del mapa argentino. Foto:Cedoc
El Ministerio de Desarrollo Social excluyó del mapa argentino a las Islas Malvinas en una tarjeta de salutación por el Año Nuevo, y generó el repudio de veteranos de la guerra de 1982 y de dirigentes del kirchnerismo, que acusaron al Gobierno de "ponerse del lado del usurpador".
"Que el 2017 nos encuentre unidos y en paz. Feliz año nuevo", indicó una tarjeta que la cartera a cargo de Carolina Stanley difundió en las redes sociales el sábado pasado, con una imagen de la Argentina pero sin las Islas Malvinas en el Atlántico Sur.
Gustavo Pirich, de la Asociación de Combatientes de Malvinas, criticó al Gobierno en diálogo con radio 10: "Me parece terrible, pero no es el único tema que nos preocupa con respecto a la soberanía", sostuvo.
"El martes a las 17.30 hacemos una movilización a la Plaza de Mayo, porque nos parece que están avanzando muy fuertemente para remover todos los obstáculos que dificultan el desarrollo de los kelpers", criticó el veterano de la guerra de 1982.
La polémica por el afiche de Desarrollo Social se conoce un día antes de cumplirse 184 años de la ocupación británica del territorio insular. Desde la cartera conducida por Carolina Stanley señalaron: "Nuestras disculpas por el error del departamento de diseño en el saludo de fin de año".
Por su parte, la ex embajadora ante el Reino Unido de la administración kirchnerista Alicia Castro sostuvo ante radio 10 que quedó "consternada por ver un mapa mutilado, podado. Normalmente lo hacen los británicos, pero nunca he visto que un Gobierno publique un mapa sin las Malvinas".
"Tiene que ver con la política de desmalvinización del Gobierno y la política de entrega. El acuerdo que firmaron en septiembre del año pasado (la canciller Susana Malcorra y su para británico para la región, Alan Duncan) plasma la voluntad y la pretensión británica de remover todos los obstáculos para el desarrollo económico de las Islas en lo que hace a exploración y explotación de petróleo, pesca y navegación", denunció.
Según Castro, el Gobierno argentino "concedió en ese acuerdo" lo que le pedían "los británicos cuando iba al Foreign Office. Ese era su deseo y es lo que ha concedido el Gobierno en un acuerdo", insistió.
En las redes sociales, usuarios que respondieron a la publicación de la cartera de Desarrollo Social hicieron hincapié en el hecho de que Puerto Argentino se llama, para los británicos, Port Stanley, el apellido de la titular de la cartera, Carolina Stanley.
La cartera de Stanley creó una tarjeta de salutación para Año Nuevo y generó el repudio del kirchnerismo y de los veteranos. El pedido de disculpas.
Perfil
Desarrollo excluyó "por error" a Malvinas del mapa argentino. Foto:Cedoc
El Ministerio de Desarrollo Social excluyó del mapa argentino a las Islas Malvinas en una tarjeta de salutación por el Año Nuevo, y generó el repudio de veteranos de la guerra de 1982 y de dirigentes del kirchnerismo, que acusaron al Gobierno de "ponerse del lado del usurpador".
"Que el 2017 nos encuentre unidos y en paz. Feliz año nuevo", indicó una tarjeta que la cartera a cargo de Carolina Stanley difundió en las redes sociales el sábado pasado, con una imagen de la Argentina pero sin las Islas Malvinas en el Atlántico Sur.
— Desarrollo Social (@MDSNacion) 31 de diciembre de 2016pic.twitter.com/JOTM5WCnf9
Gustavo Pirich, de la Asociación de Combatientes de Malvinas, criticó al Gobierno en diálogo con radio 10: "Me parece terrible, pero no es el único tema que nos preocupa con respecto a la soberanía", sostuvo.
"El martes a las 17.30 hacemos una movilización a la Plaza de Mayo, porque nos parece que están avanzando muy fuertemente para remover todos los obstáculos que dificultan el desarrollo de los kelpers", criticó el veterano de la guerra de 1982.
La polémica por el afiche de Desarrollo Social se conoce un día antes de cumplirse 184 años de la ocupación británica del territorio insular. Desde la cartera conducida por Carolina Stanley señalaron: "Nuestras disculpas por el error del departamento de diseño en el saludo de fin de año".
Nuestras disculpas por el error del departamento de diseño en el saludo de fin de año.— Desarrollo Social (@MDSNacion) 2 de enero de 2017
Por su parte, la ex embajadora ante el Reino Unido de la administración kirchnerista Alicia Castro sostuvo ante radio 10 que quedó "consternada por ver un mapa mutilado, podado. Normalmente lo hacen los británicos, pero nunca he visto que un Gobierno publique un mapa sin las Malvinas".
"Tiene que ver con la política de desmalvinización del Gobierno y la política de entrega. El acuerdo que firmaron en septiembre del año pasado (la canciller Susana Malcorra y su para británico para la región, Alan Duncan) plasma la voluntad y la pretensión británica de remover todos los obstáculos para el desarrollo económico de las Islas en lo que hace a exploración y explotación de petróleo, pesca y navegación", denunció.
Según Castro, el Gobierno argentino "concedió en ese acuerdo" lo que le pedían "los británicos cuando iba al Foreign Office. Ese era su deseo y es lo que ha concedido el Gobierno en un acuerdo", insistió.
En las redes sociales, usuarios que respondieron a la publicación de la cartera de Desarrollo Social hicieron hincapié en el hecho de que Puerto Argentino se llama, para los británicos, Port Stanley, el apellido de la titular de la cartera, Carolina Stanley.
domingo, 1 de enero de 2017
Biografías: CN (VGM) Carlos Hugo Robacio (Argentina)
Adiós a un héroe
Carlos Hugo Robacio comandó nada menos que al Batallón de Infantería de Marina Nº 5 durante la guerra de Malvinas (1982) y los combates que libró fueron memorables. Fue un patriota, ejemplo de entrega y coraje. Murió el 29 de mayo de 2011, a los 76 años. Ahora descansa en paz en el cementerio de Bahía Blanca.
Robacio, durante un adiestramiento de 1981 con el BIM5, antes de la guerra por las Malvinas (1982). El último a la derecha es el Capitán Giachino, primera baja de la recuperación de las Malvinas.
Durante la guerra de Malvinas hubo desempeños excepcionales de la Armada Argentina. Entre ellos, el de nuestra Aviación Naval, reconocida en todo el mundo por su pericia, precisión y efectividad, y el Batallón de Infantería de Marina Nº 5 (BIM5).
En este último caso, los jefes británicos pidieron conocer al comandante de esos hombres que se asemejaban a “demonios tirando”; al comandante de esos hombres que no pudieron hacer retroceder. Ese comandante era el entonces capitán de fragata de Infantería de Marina Carlos Hugo Robacio.
Con el tiempo, ya con el grado de contralmirante y en situación de retiro, Robacio repasaría una y otra vez su experiencia al frente del BIM5, llegando a redactar el libro Desde el frente, que recorre los más de 70 días del batallón en las islas, sus percepciones y experiencias, los detalles de aquellos momentos de gloria y dolor.
Retroceder, nunca
Como comandante del Batallón de Infantería de Marina Nº 5, el entonces capitán de fragata Carlos Hugo Robacio estuvo a cargo de los hombres que se negaron a retroceder en Malvinas. Comandó a 700 Infantes de Marina (entre personal de cuadro y conscriptos) y alrededor de 200 hombres del Ejército Argentino durante los combates desarrollados en el monte Tumbledown, Sapper Hill y monte William. Allí enfrentaron a dos batallones de paracaidistas ingleses, a la guardia real inglesa y a los gurkas. Lo hicieron hasta agotar toda su munición.
“Fue el primero en llegar y el último en irse de Malvinas”, recuerda el suboficial mayor Carlos Sini, que en aquel entonces era cabo segundo del batallón de Robacio. Ahora, cumple funciones en el Comando de la Fuerza de Infantería de Marina Austral con asiento en Río Grande.
Con su mirada puesta en el recuerdo, asegura que no olvidará la figura del comandante pidiendo el alistamiento para ir al frente de batalla.
“Estábamos desplegados haciendo nuestra segunda o tercera salida al terreno. Cubríamos desde Hito I, en el extremo norte de Tierra del Fuego, hasta la cabecera del lago Fagnano, en el centro. Se ordenó el repliegue del batallón y nos reunió a todos en la plaza de armas. Pidió a la gente que no se desaliste, que en menos de lo que pensábamos tendríamos que estar en Malvinas. Nos habló de muerte y de heridos. Dio opción. Todos elegimos ir”, relata Sini
El pasaje a la isla comenzó por aire en la madrugada de 7 de abril de 1982. Al otro día estaban todos en Malvinas y no hubo que esperar mucho para el bautismo de fuego.
"El 1º de mayo sucedió el primer ataque británico y en ese momento –recuerda Sini– el capitán Robacio utilizó el sistema de radio y dijo 'la guerra ha llegado. El enemigo está presente. Les deseo suerte a todos'. Esa noche el batallón tuvo su primer muerto."
Robacio recorrió todas las posiciones del batallón durante los 72 días que estuvieron desplegados. No estaban cerca; había 10 o hasta 12 kilómetros entre ellas. Pero él estuvo al lado de su gente en todo momento. "Si exigía que caminen, era el primero que caminaba. Si exigía sacrificios, era el primero en sacrificarse; fue un líder por naturaleza”, cuenta Sini.
Y es que el ejemplo es la mejor forma de asumir y ejercer el liderazgo en el combate. Los Infantes de Marina sabían del riesgo al que estaban expuestos, su comandante se los había dicho, debían estar en el terreno frente a un enemigo más grande. Por ello la labor de Robacio mereció el reconocimiento enemigo, porque es en la total desventaja capaz de desmotivar a cualquier hombre donde se torna fundamental la orientación del líder. Su voz cohesiona corazones, moviliza voluntades, da valor en momentos en donde todo se desploma. Los resultados dan apenas un ejemplo del talento y determinación del entonces capitán Robacio: 16 muertos y 105 heridos contra más de 350 caídos de las fuerzas británicas.
Pero también sus palabras dieron otro ejemplo, años después, vinculadas a la humildad con la que un hombre de su desempeño vivió a pesar de las glorias obtenidas: "Yo no soy ni bravo ni valiente ni nada por el estilo. Soy un hombre común. Tengo miedo cuando cruzo la calle. Pero en Malvinas no pude tener miedo. No pude tenerlo porque creo que Dios no me dejó tenerlo, y la preocupación por mis hombres, su entrega, obviamente no me podían permitir el privilegio de tener miedo", declaró alguna vez el almirante Robacio.
Condujo estoicamente a sus hombres en todo momento y quienes fueron parte de aquel feroz batallón marcaron a fuego en su memoria cada acción del comandante. “Él siempre nos llevó al límite en tiempos de paz. Nos fue formando y forjando. Sabía que teníamos que estar preparados para algo más duro, ver morir al camarada al lado y seguir peleando –dice Sini en un tono reflexivo–. Supo conducir a su gente y no titubeó cuando tuvo que ponerla en combate.”
De igual manera el suboficial mayor de Infantería de Marina Daniel Benítez, hoy destinado en la División Veteranos de Guerra y en aquel entonces cabo segundo, recuerda al contralmirante Robacio como un comandante que, pese a todas las inclemencias, siguió combatiendo y contraatacando. De carácter firme pero siempre al lado de la tropa.
“Dado su accionar fue admirado por comandantes gurkas y galeses y reconocido por el Ejército Argentino y demás fuerzas”, concluyó Benítez quien participó del conflicto como miembro del BIM5 en la zona de Sapper Hill.
Fue como un padre para muchos
Carlos Robacio dejó --además de su familia compuesta de su mujer Estela, sus 2 hijos Carlos y Edda y sus 5 nietos-- a un puñado de hijos que lo adoptaron como un referente de la vida, ya que muchos de sus hombres llegaron a considerarlo un segundo padre. Y también dejó un legado para los oficiales y suboficiales de la Infantería de Marina: la necesidad del adiestramiento. Es esa preparación para el combate lo que une al espíritu actual del BIM5 con el de los héroes de Malvinas.
Con su figura desaparece otro de los grandes jefes de la Armada Argentina en el campo de batalla, de los que tuvo la Nación Argentina en la defensa de nuestras Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur. Entre sus laureles se encuentra la condecoración de la Nación Argentina al Heroico Valor en Combate; la del Congreso de la Nación a los Combatientes de Malvinas; y las del Ejército Argentino “Orden a los Servicios Distinguidos” y al “Merito Militar” en grado de Comendador. También le dieron las medallas “Cruz Peruana al Mérito Naval” y “La Legión al Mérito” en grado de Comandante de la República del Perú.
Sin embargo, el valor más alto en sus 76 años fue el afecto de su gente, de la familia naval que lo honra y admira, de los compatriotas que volvieron con él y gracias a él de nuestras Malvinas, y de los familiares de los héroes que quedaron allá custodiando eternamente ese suelo y que reconocieron en su figura a la de un comandante ejemplar que no dejó a nadie atrás en la batalla.
El contralmirante retirado Carlos Hugo Robacio falleció en Bahía Blanca el pasado domingo 29 de mayo de 2011. Con él se fue un referente militar y guerrero, un ejemplo de ética profesional que no dudó en arriesgar su vida y la de sus hombres en la defensa de la Patria, pero sobre todo, que no vaciló en cuidarlas, dando una lección de conducción y liderazgo.
Foto de Carlos Robacio como comandante del Batallón de Infantería de Marina N° 5
Fuente:
ESPECIAL de GACETA MARINERA digital
Carlos Hugo Robacio comandó nada menos que al Batallón de Infantería de Marina Nº 5 durante la guerra de Malvinas (1982) y los combates que libró fueron memorables. Fue un patriota, ejemplo de entrega y coraje. Murió el 29 de mayo de 2011, a los 76 años. Ahora descansa en paz en el cementerio de Bahía Blanca.
Robacio, durante un adiestramiento de 1981 con el BIM5, antes de la guerra por las Malvinas (1982). El último a la derecha es el Capitán Giachino, primera baja de la recuperación de las Malvinas.
Durante la guerra de Malvinas hubo desempeños excepcionales de la Armada Argentina. Entre ellos, el de nuestra Aviación Naval, reconocida en todo el mundo por su pericia, precisión y efectividad, y el Batallón de Infantería de Marina Nº 5 (BIM5).
En este último caso, los jefes británicos pidieron conocer al comandante de esos hombres que se asemejaban a “demonios tirando”; al comandante de esos hombres que no pudieron hacer retroceder. Ese comandante era el entonces capitán de fragata de Infantería de Marina Carlos Hugo Robacio.
Con el tiempo, ya con el grado de contralmirante y en situación de retiro, Robacio repasaría una y otra vez su experiencia al frente del BIM5, llegando a redactar el libro Desde el frente, que recorre los más de 70 días del batallón en las islas, sus percepciones y experiencias, los detalles de aquellos momentos de gloria y dolor.
Cita: |
“Había llegado la orden de repliegue. Sobre nuestras posiciones caían mil proyectiles de obuses por hora, además del bombardeo naval, más los aviones y los helicópteros. Era tremendo… También recuerdo que, en el momento de decidir el contraataque, llamo a los oficiales de mi Estado Mayor y les cuento mi plan. Ellos se miran entre sí. No dicen nada. Cumplen. Pero después del 14 de junio, a mí me había quedado una duda: ¿por qué se miraron entre ellos? Un día se los pregunté. Me dijeron que pensaban que yo estaba loco. Entonces seguí preguntando: ¿Y ustedes qué hubieran hecho, aún así? “Hubiéramos cumplido la orden… Eso era el BIM5”, contó alguna vez. |
Retroceder, nunca
Como comandante del Batallón de Infantería de Marina Nº 5, el entonces capitán de fragata Carlos Hugo Robacio estuvo a cargo de los hombres que se negaron a retroceder en Malvinas. Comandó a 700 Infantes de Marina (entre personal de cuadro y conscriptos) y alrededor de 200 hombres del Ejército Argentino durante los combates desarrollados en el monte Tumbledown, Sapper Hill y monte William. Allí enfrentaron a dos batallones de paracaidistas ingleses, a la guardia real inglesa y a los gurkas. Lo hicieron hasta agotar toda su munición.
“Fue el primero en llegar y el último en irse de Malvinas”, recuerda el suboficial mayor Carlos Sini, que en aquel entonces era cabo segundo del batallón de Robacio. Ahora, cumple funciones en el Comando de la Fuerza de Infantería de Marina Austral con asiento en Río Grande.
Con su mirada puesta en el recuerdo, asegura que no olvidará la figura del comandante pidiendo el alistamiento para ir al frente de batalla.
“Estábamos desplegados haciendo nuestra segunda o tercera salida al terreno. Cubríamos desde Hito I, en el extremo norte de Tierra del Fuego, hasta la cabecera del lago Fagnano, en el centro. Se ordenó el repliegue del batallón y nos reunió a todos en la plaza de armas. Pidió a la gente que no se desaliste, que en menos de lo que pensábamos tendríamos que estar en Malvinas. Nos habló de muerte y de heridos. Dio opción. Todos elegimos ir”, relata Sini
El pasaje a la isla comenzó por aire en la madrugada de 7 de abril de 1982. Al otro día estaban todos en Malvinas y no hubo que esperar mucho para el bautismo de fuego.
Cita: |
"Si exigía sacrificios, era el primero en sacrificarse." |
"El 1º de mayo sucedió el primer ataque británico y en ese momento –recuerda Sini– el capitán Robacio utilizó el sistema de radio y dijo 'la guerra ha llegado. El enemigo está presente. Les deseo suerte a todos'. Esa noche el batallón tuvo su primer muerto."
Robacio recorrió todas las posiciones del batallón durante los 72 días que estuvieron desplegados. No estaban cerca; había 10 o hasta 12 kilómetros entre ellas. Pero él estuvo al lado de su gente en todo momento. "Si exigía que caminen, era el primero que caminaba. Si exigía sacrificios, era el primero en sacrificarse; fue un líder por naturaleza”, cuenta Sini.
Y es que el ejemplo es la mejor forma de asumir y ejercer el liderazgo en el combate. Los Infantes de Marina sabían del riesgo al que estaban expuestos, su comandante se los había dicho, debían estar en el terreno frente a un enemigo más grande. Por ello la labor de Robacio mereció el reconocimiento enemigo, porque es en la total desventaja capaz de desmotivar a cualquier hombre donde se torna fundamental la orientación del líder. Su voz cohesiona corazones, moviliza voluntades, da valor en momentos en donde todo se desploma. Los resultados dan apenas un ejemplo del talento y determinación del entonces capitán Robacio: 16 muertos y 105 heridos contra más de 350 caídos de las fuerzas británicas.
Pero también sus palabras dieron otro ejemplo, años después, vinculadas a la humildad con la que un hombre de su desempeño vivió a pesar de las glorias obtenidas: "Yo no soy ni bravo ni valiente ni nada por el estilo. Soy un hombre común. Tengo miedo cuando cruzo la calle. Pero en Malvinas no pude tener miedo. No pude tenerlo porque creo que Dios no me dejó tenerlo, y la preocupación por mis hombres, su entrega, obviamente no me podían permitir el privilegio de tener miedo", declaró alguna vez el almirante Robacio.
Condujo estoicamente a sus hombres en todo momento y quienes fueron parte de aquel feroz batallón marcaron a fuego en su memoria cada acción del comandante. “Él siempre nos llevó al límite en tiempos de paz. Nos fue formando y forjando. Sabía que teníamos que estar preparados para algo más duro, ver morir al camarada al lado y seguir peleando –dice Sini en un tono reflexivo–. Supo conducir a su gente y no titubeó cuando tuvo que ponerla en combate.”
Cita: |
El BIM5 soportó durante más de 40 días el fuego naval y de artillería sobre sus posiciones. Defendió hasta la última piedra agotando toda su munición. |
De igual manera el suboficial mayor de Infantería de Marina Daniel Benítez, hoy destinado en la División Veteranos de Guerra y en aquel entonces cabo segundo, recuerda al contralmirante Robacio como un comandante que, pese a todas las inclemencias, siguió combatiendo y contraatacando. De carácter firme pero siempre al lado de la tropa.
“Dado su accionar fue admirado por comandantes gurkas y galeses y reconocido por el Ejército Argentino y demás fuerzas”, concluyó Benítez quien participó del conflicto como miembro del BIM5 en la zona de Sapper Hill.
Fue como un padre para muchos
Carlos Robacio dejó --además de su familia compuesta de su mujer Estela, sus 2 hijos Carlos y Edda y sus 5 nietos-- a un puñado de hijos que lo adoptaron como un referente de la vida, ya que muchos de sus hombres llegaron a considerarlo un segundo padre. Y también dejó un legado para los oficiales y suboficiales de la Infantería de Marina: la necesidad del adiestramiento. Es esa preparación para el combate lo que une al espíritu actual del BIM5 con el de los héroes de Malvinas.
Con su figura desaparece otro de los grandes jefes de la Armada Argentina en el campo de batalla, de los que tuvo la Nación Argentina en la defensa de nuestras Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur. Entre sus laureles se encuentra la condecoración de la Nación Argentina al Heroico Valor en Combate; la del Congreso de la Nación a los Combatientes de Malvinas; y las del Ejército Argentino “Orden a los Servicios Distinguidos” y al “Merito Militar” en grado de Comendador. También le dieron las medallas “Cruz Peruana al Mérito Naval” y “La Legión al Mérito” en grado de Comandante de la República del Perú.
Sin embargo, el valor más alto en sus 76 años fue el afecto de su gente, de la familia naval que lo honra y admira, de los compatriotas que volvieron con él y gracias a él de nuestras Malvinas, y de los familiares de los héroes que quedaron allá custodiando eternamente ese suelo y que reconocieron en su figura a la de un comandante ejemplar que no dejó a nadie atrás en la batalla.
El contralmirante retirado Carlos Hugo Robacio falleció en Bahía Blanca el pasado domingo 29 de mayo de 2011. Con él se fue un referente militar y guerrero, un ejemplo de ética profesional que no dudó en arriesgar su vida y la de sus hombres en la defensa de la Patria, pero sobre todo, que no vaciló en cuidarlas, dando una lección de conducción y liderazgo.
Foto de Carlos Robacio como comandante del Batallón de Infantería de Marina N° 5
Fuente:
ESPECIAL de GACETA MARINERA digital
sábado, 31 de diciembre de 2016
Ex piloto naval británico cuenta sus experiencias de combate
Un expiloto británico de Sea Harrier explicó sus vivencias durante la Guerra de las Malvinas
La Sala Canudas del Aeropuerto de Sabadell acogió la tarde del 13-6-09 una conferencia del capitán de corbeta de la Royal Navy Stephen Lord Harrison, que fue uno de los pilotos de Sea Harrier que intervino en la Guerra de la Malvinas. Harrison ya no pertenece a la Royal Navy y, seguramente, ese factor le permitió expresarse con casi total libertad y relatar algunas de sus experiencias durante el conflicto bélico.
El acto lo organizó la Fundació Parc Aeronáutic de Catalunya, que ya ha promovido otras conferencias en las que pilotos y civiles han explicado sus vivencias profesionales. Asistieron a la conferencia unas 80 personas.
Su exposición, aunque se atuvo a la cronología de los hechos más relevantes del conflicto, resultó algo desordenada pues estuvo salpicada de comentarios personales y vivencias subjetivas, muchas de ellas relatadas en tono irónico y poco autocomplaciente con la típica imagen del «top gun». Ilustró su exposición con el pase de diapositivas y de dos maquetas, una de Sea Harrier y otra del Mirage III, con las que recreó los combates aéreos. Además, aportó datos sobre la prestaciones de algunas aeronaves británicas y argentinas que intervineron en el conflicto y sobre las tácticas de combate que se emplearon. El conferenciante rehusó abordar el hundimiento del navío «Belgrano», cuestión sobre la que dijo que «no sé nada». Stephen dijo que cuando comenzó el conflicto aún no había cumplido los 21 años (nacio en 1961) y que fue el piloto más joven enviado a Malvinas.
Afirmó que una de sus grandes preocupaciones eran los cinco misiles Exocet que tenía Argentina, pues estos misiles, tras el «dispare y olvídese», volaban a baja altura para no ser detectados por el radar, con lo cual eran un arma precisa y mortífera. En el portaviones «Invencible» estaban ocho Sea Harrier y 12 pilotos y otros 12 Harrier con sus 18 pilotos, muy pocos en comparación con las aeronaves de que disponía Argentina. «No teníamos ni idea de a lo que nos estábamos enfrentando. Tenía miedo a sufrir quemaduras o quedar mutilado».
Después criticó y hasta ridiculizó los vuelos que realizaron los bombarderos Vulcan desde la lejana Isla Ascensión para, tras sucesivos reabastecimientos en vuelo, intentar bombardear la pista del aeropuerto de Las Malvinas. Comentó que estos aviones lanzaron 21 bombas y que ninguna consiguió inutilizar la pista. Tras señalar que el Reino Unido perdió siete Sea Harrier (ninguno en combate directo con los cazas argentinos), explicó los daños que sufrió el Sheffield al ser alcanzado por un misil Exocet. Afirmó que el misil no llegó a explosionar, pero que causó 20 muertos y varias decenas de heridos. «Entonces supimos que estábamos en una guerra de verdad. Supimos que podían pasar nuestras defensas y que podían matarnos. A partir de entonces, nuestra mentalidad cambió y tuve que empezar a ganarme el suelo».
Relató que algunas de sus misiones consistían en proteger a los navíos de su país, al aguardar en vuelo a baja altura la llegada de los aviones argentinos para enfrentarse a éstos. En algunas ocasiones, la presencia de los Sea Harrier disuadió al enemigo y él se alegraba de no tener que disparar. Calculó que las misiones que realizó duraban una dos horas y media.
Relató que le encargaron sobrevolar una noche la bahía de San Carlos, donde posteriormente se realizó el mayor desembarco de tropas británicas. Dijo que no conseguía ver nada y que tras realizar pasadas a baja altura recibió fuego antiaéreo. Su Sea Harrier resultó dañado y a duras penas llegó al «Invencible». Dijo que no le hacía ninguna gracia tener que ejectarse del aparato y aguardar en las gélidas aguas a que viniera en helicóptero a rescatarle el príncipe Andrés. El aterrizaje fue brusco pero llegó ileso. En la cubierta del «Invencible» apenas podía andar, estaba agarrotado y temblaba del miedo que había pasado y un superior le autorizó a tomarse unos tragos de ron para superar el trance.
Stephen elogió la actitud de los pilotos argentinos, de los que dijo que «veían como perdían a compañeros pero seguían peleando» con tenacidad y defendiendo su posición en Las Malvinas. También dijo que le encomendaron bombardear las posiciones antiaéreas y antitanque de las tropas argentinas en la isla, llevando en cada misión tres bombas de mil libras cada una. Dijo que «no tengo ni idea de dónde cayeron. Creo que maté muchas ovejas».
Asimismo, recordó que el conflicto enseñó a la Royal Navy que durante los combates tuvieron una escasa cobertura de radar y que habrían sido en este terreno más superiores si hubiesen dispuesto de radares en los helicópteros Sea King. En otro momento de su intervención elogió la táctica de los argentinos de utilizar los Learjet y otros jets civiles para confundir a los británicos y tratar de despistarlos.
El expiloto militar dio cuenta de las barcos británicos que fueron alcanzados por los argentinos. Afirmó que no «siento rencor» y recordó que algunos de sus compañeros llegaron a conocer años después a algunos de los pilotos argentinos. Tras su intervención, los asistentes le formularon preguntas que respondió, a excepción de una sobre las prestaciones de los motores del Sea Harrier. «La respuesta a tu pregunta la encontrarás en Google», respondió irónico.
Sobre los Sea Harrier, consideró que durante los primeros días de la guerra se mostraron superiores a los Mirage y Super Etendard argentinos, al poder frenarse los Harrier en vuelo, esquivar al enemigo y dejar que éste les adelantase, con lo cual se situaban en su cola y les podían atacar sin peligro, pues la velocidad mínima de los Mirage para no perder altura no podía bajar de los 300 kilómetros por hora.
TEXTO Y FOTOS: JOSE FERNANDEZ GARCIA para TODALAAVIACION/AEROSABADELL.COM
La Sala Canudas del Aeropuerto de Sabadell acogió la tarde del 13-6-09 una conferencia del capitán de corbeta de la Royal Navy Stephen Lord Harrison, que fue uno de los pilotos de Sea Harrier que intervino en la Guerra de la Malvinas. Harrison ya no pertenece a la Royal Navy y, seguramente, ese factor le permitió expresarse con casi total libertad y relatar algunas de sus experiencias durante el conflicto bélico.
El acto lo organizó la Fundació Parc Aeronáutic de Catalunya, que ya ha promovido otras conferencias en las que pilotos y civiles han explicado sus vivencias profesionales. Asistieron a la conferencia unas 80 personas.
Su exposición, aunque se atuvo a la cronología de los hechos más relevantes del conflicto, resultó algo desordenada pues estuvo salpicada de comentarios personales y vivencias subjetivas, muchas de ellas relatadas en tono irónico y poco autocomplaciente con la típica imagen del «top gun». Ilustró su exposición con el pase de diapositivas y de dos maquetas, una de Sea Harrier y otra del Mirage III, con las que recreó los combates aéreos. Además, aportó datos sobre la prestaciones de algunas aeronaves británicas y argentinas que intervineron en el conflicto y sobre las tácticas de combate que se emplearon. El conferenciante rehusó abordar el hundimiento del navío «Belgrano», cuestión sobre la que dijo que «no sé nada». Stephen dijo que cuando comenzó el conflicto aún no había cumplido los 21 años (nacio en 1961) y que fue el piloto más joven enviado a Malvinas.
Afirmó que una de sus grandes preocupaciones eran los cinco misiles Exocet que tenía Argentina, pues estos misiles, tras el «dispare y olvídese», volaban a baja altura para no ser detectados por el radar, con lo cual eran un arma precisa y mortífera. En el portaviones «Invencible» estaban ocho Sea Harrier y 12 pilotos y otros 12 Harrier con sus 18 pilotos, muy pocos en comparación con las aeronaves de que disponía Argentina. «No teníamos ni idea de a lo que nos estábamos enfrentando. Tenía miedo a sufrir quemaduras o quedar mutilado».
Después criticó y hasta ridiculizó los vuelos que realizaron los bombarderos Vulcan desde la lejana Isla Ascensión para, tras sucesivos reabastecimientos en vuelo, intentar bombardear la pista del aeropuerto de Las Malvinas. Comentó que estos aviones lanzaron 21 bombas y que ninguna consiguió inutilizar la pista. Tras señalar que el Reino Unido perdió siete Sea Harrier (ninguno en combate directo con los cazas argentinos), explicó los daños que sufrió el Sheffield al ser alcanzado por un misil Exocet. Afirmó que el misil no llegó a explosionar, pero que causó 20 muertos y varias decenas de heridos. «Entonces supimos que estábamos en una guerra de verdad. Supimos que podían pasar nuestras defensas y que podían matarnos. A partir de entonces, nuestra mentalidad cambió y tuve que empezar a ganarme el suelo».
Relató que algunas de sus misiones consistían en proteger a los navíos de su país, al aguardar en vuelo a baja altura la llegada de los aviones argentinos para enfrentarse a éstos. En algunas ocasiones, la presencia de los Sea Harrier disuadió al enemigo y él se alegraba de no tener que disparar. Calculó que las misiones que realizó duraban una dos horas y media.
Relató que le encargaron sobrevolar una noche la bahía de San Carlos, donde posteriormente se realizó el mayor desembarco de tropas británicas. Dijo que no conseguía ver nada y que tras realizar pasadas a baja altura recibió fuego antiaéreo. Su Sea Harrier resultó dañado y a duras penas llegó al «Invencible». Dijo que no le hacía ninguna gracia tener que ejectarse del aparato y aguardar en las gélidas aguas a que viniera en helicóptero a rescatarle el príncipe Andrés. El aterrizaje fue brusco pero llegó ileso. En la cubierta del «Invencible» apenas podía andar, estaba agarrotado y temblaba del miedo que había pasado y un superior le autorizó a tomarse unos tragos de ron para superar el trance.
Stephen elogió la actitud de los pilotos argentinos, de los que dijo que «veían como perdían a compañeros pero seguían peleando» con tenacidad y defendiendo su posición en Las Malvinas. También dijo que le encomendaron bombardear las posiciones antiaéreas y antitanque de las tropas argentinas en la isla, llevando en cada misión tres bombas de mil libras cada una. Dijo que «no tengo ni idea de dónde cayeron. Creo que maté muchas ovejas».
Asimismo, recordó que el conflicto enseñó a la Royal Navy que durante los combates tuvieron una escasa cobertura de radar y que habrían sido en este terreno más superiores si hubiesen dispuesto de radares en los helicópteros Sea King. En otro momento de su intervención elogió la táctica de los argentinos de utilizar los Learjet y otros jets civiles para confundir a los británicos y tratar de despistarlos.
El expiloto militar dio cuenta de las barcos británicos que fueron alcanzados por los argentinos. Afirmó que no «siento rencor» y recordó que algunos de sus compañeros llegaron a conocer años después a algunos de los pilotos argentinos. Tras su intervención, los asistentes le formularon preguntas que respondió, a excepción de una sobre las prestaciones de los motores del Sea Harrier. «La respuesta a tu pregunta la encontrarás en Google», respondió irónico.
Sobre los Sea Harrier, consideró que durante los primeros días de la guerra se mostraron superiores a los Mirage y Super Etendard argentinos, al poder frenarse los Harrier en vuelo, esquivar al enemigo y dejar que éste les adelantase, con lo cual se situaban en su cola y les podían atacar sin peligro, pues la velocidad mínima de los Mirage para no perder altura no podía bajar de los 300 kilómetros por hora.
TEXTO Y FOTOS: JOSE FERNANDEZ GARCIA para TODALAAVIACION/AEROSABADELL.COM
miércoles, 28 de diciembre de 2016
Israel: Antisemitismo y Daggers
La compra de armas a Israel: entre la necesidad y el antisemitismo
By Hernan Dobry - Operación Israel
El antisemitismo es una de las contradicciones más visibles que se plantearon tanto dentro de las Fuerzas Armadas, a la hora de hacer las compras, como del lado israelí, para la venta, cuando se realizaron las primeras operaciones de equipamientos bélicos que hizo la Argentina durante la última dictadura, ya que en años anteriores el rechazo había sido explícito y directo, con frases que rozaban el odio más visceral.
“Ese sentimiento antisemita se exteriorizaba en la década del ’70 cuando los vendedores israelíes intentaban ingresar en el mercado de las Fuerzas Armadas y les decían: Nosotros a ustedes no les vamos comprar nunca porque son judíos y mataron a Cristo”, afirma el periodista Hernán Dobry en el programa Diapositivas, por Radio América 1190 Mhz.
En su libro Operación Israel: El rearme argentino durante la dictadura (1976-1983), destaca que las primeras operaciones se debieron a la necesidad y la urgencia con la que la Argentina debió conseguir equipamientos bélicos para enfrentar una guerra con Chile, en 1978.
“Se encontraron que tenían unas Fuerzas Armadas que no podían hacer frente a una guerra de esa escala que iba a llevar años y los precisaban en tres meses. Justo se dio que Israel dejaba utilizar una serie de aviones y los tenía disponibles para entregarlos en un par de meses”, concluye Dobry.
Operación Israel: El rearme argentino durante la dictadura (1976-1983) acaba de ser publicado en la Argentina por Ediciones Lumiere y ya puede conseguirse en todas las librerías.
By Hernan Dobry - Operación Israel
El antisemitismo es una de las contradicciones más visibles que se plantearon tanto dentro de las Fuerzas Armadas, a la hora de hacer las compras, como del lado israelí, para la venta, cuando se realizaron las primeras operaciones de equipamientos bélicos que hizo la Argentina durante la última dictadura, ya que en años anteriores el rechazo había sido explícito y directo, con frases que rozaban el odio más visceral.
“Ese sentimiento antisemita se exteriorizaba en la década del ’70 cuando los vendedores israelíes intentaban ingresar en el mercado de las Fuerzas Armadas y les decían: Nosotros a ustedes no les vamos comprar nunca porque son judíos y mataron a Cristo”, afirma el periodista Hernán Dobry en el programa Diapositivas, por Radio América 1190 Mhz.
En su libro Operación Israel: El rearme argentino durante la dictadura (1976-1983), destaca que las primeras operaciones se debieron a la necesidad y la urgencia con la que la Argentina debió conseguir equipamientos bélicos para enfrentar una guerra con Chile, en 1978.
“Se encontraron que tenían unas Fuerzas Armadas que no podían hacer frente a una guerra de esa escala que iba a llevar años y los precisaban en tres meses. Justo se dio que Israel dejaba utilizar una serie de aviones y los tenía disponibles para entregarlos en un par de meses”, concluye Dobry.
Operación Israel: El rearme argentino durante la dictadura (1976-1983) acaba de ser publicado en la Argentina por Ediciones Lumiere y ya puede conseguirse en todas las librerías.
martes, 27 de diciembre de 2016
Guerra aérea: Pilotos argentinos y británicos y palmarés individual
Guerra de las Malvinas : 1982
Gran Bretaña__
| ||||||||
Auld Andrew Donaldson
|
2
|
Barton Paul S.
|
1
|
Blissett Michael S.
|
1
| |||
Curtiss W. A.
|
1
|
Frederiksen R. V.
|
1
|
Hale Martin
|
1
| |||
Leeming John
|
1
|
Morgan David Henry Spencer
|
3
|
Morrell Clive R. W.
|
2
| |||
Penfold R.
|
1
|
Smith David A.
|
2
|
Thomas Neil Wynell
|
1
| |||
Thomas Stephen R.
|
3
|
Ward Nigel David
|
3
| |||||
Argentina__
| ||||||||
AGUIRRE Héctor Walter
|
.
|
ALBELOS Manuel Alberto
|
.
|
ARDILES José Leónidas
|
.
| |||
ARRARAS Juan José
|
.
|
BEAN Pedro Ignacio
|
.
|
BERNHARDT Juan Domingo
|
.
| |||
BOLZAN Danilo Rubén
|
.
|
BONO Jorge Alberto
|
.
|
BORDON Héctor Ramón
|
.
| |||
BRASHICH Andrés Luis
|
.
|
BUSTOS Manuel Oscar
|
.
|
CANTEZANO Carlos Domingo
|
.
| |||
CARDONE Miguel Angel
|
.
|
CARRIZO Miguel Angel
|
.
|
CASADO Fernando Juan
|
.
| |||
CASCO Jorge Eduardo
|
.
|
CASTAGNARI Luis Darío José
|
.
|
CASTILLO Carlos Julio
|
.
| |||
CASTILLO Omar Jesús
|
.
|
De IBAÑEZ Eduardo Jorge Raúl
|
.
|
DE LA COLINA Rodolfo Manuel
|
.
| |||
DUARTE Mario
|
.
|
FALCONIER Juan José Ramón
|
.
|
FARIAS Jorge Ricardo
|
.
| |||
GARCIA CUERVA Gustavo Argentino
|
.
|
GARCIA Guillermo Ubaldo
|
.
|
GARCIA Jorge Osvaldo
|
.
| |||
GAVAZZI Fausto
|
.
|
GIMENEZ Miguel Angel
|
1
|
GONZALEZ Mario Hipólito
|
.
| |||
GUADAGNINI Luciano
|
.
|
IBARLUCEA Jorge Rubén
|
.
|
JUKIC Daniel Antonio
|
.
| |||
KRAUSE Carlos Eduardo
|
.
|
LASTRA Julio Jesús
|
.
|
LOPEZ Néstor Edgardo
|
.
| |||
LOTUFO Marcelo Pedro
|
.
|
LUNA Francisco Tomás
|
.
|
LUNA Mario Ramón
|
.
| |||
MALDONADO José Alberto
|
.
|
MANZOTTI Daniel Fernando
|
.
|
MARIZZA Guido Antonio
|
.
| |||
MARTEL Rubén Héctor
|
.
|
MEISNER Hugo César
|
.
|
MONTAÑO Agustín Hugo
|
.
| |||
NIVOLI Mario Victor
|
.
|
PALAVER Hugo Angel
|
.
|
PERALTA José Luis
|
.
| |||
RODRIGUEZ Juan Antonio
|
.
|
SEVILLA Luis Guillermo
|
.
|
VALKO Mario Luis
|
.
| |||
VARAS Héctor Hugo
|
.
|
VAZQUEZ Alfredo Jorge Alberto
|
.
|
VAZQUEZ José Daniel
|
.
| |||
VOLPONI Héctor Ricardo
|
.
|
.
|
lunes, 26 de diciembre de 2016
May insta a los kelpers a tener buenas relaciones con Argentina
Malvinas: la primera ministra británica instó a los isleños tener una buena relación con la Argentina
Si bien May destacó que Gran Bretaña está "absolutamente comprometida" con el derecho a la autodeterminación de los isleños, también instó a los habitantes de Malvinas a avanzar en los acuerdos con Buenos Aires
Martín Dinatale | LA NACION
En su tradicional mensaje navideño y de fin de año, la primer ministra británica Theresa May envió un mensaje directo a los isleños de Malvinas al sostener que "una mejor relación con la Argentina será beneficioso para todos" y aventuró que con ello "se cosecharán recompensas" para la economía de las islas.
Si bien May destacó que Gran Bretaña está "absolutamente comprometida" con el derecho a la autodeterminación de los isleños, también instó a los habitantes de Malvinas a avanzar en los acuerdos con Buenos Aires."La mejor relación con Argentina es de interés de todos" , dijo. De esta manera, la primer ministra del Reino Unido adelantó que el acuerdo que se espera cerrar con el gobierno de Mauricio Macri en torno a las Malvinas "cosechará las recompensas con beneficios para vuestra economía, mejorando el comercio y el turismo, a la vez que desarrollando vuestras industrias de hidrocarburos y de pesca".
Por otra parte, May recordó a los militares británicos que lucharon "con tanta valentía" en el conflicto bélico con la Argentina. Aunque también agradeció al gobierno de las Islas Malvinas por su apoyo en los trabajos de identificación de 123 soldados argentinos desconocidos, sepultados en Darwin. En este sentido, May dijo que el gobierno de Malvinas ha estado involucrado "muy de cerca" en la discusión de "los siguientes pasos de este asunto de tanta sensibilidad humanitaria que será liderado por el Comité Internacional de la Cruz Roja". Estas tareas de identificación de los soldados NN comenzará en enero y se desplegará en julio del año que viene en las islas Malvinas.
Theresa Maydijo que está comprometida con la autodeterminación de los isleños
De esta manera, la primer ministra británica dijo que tanto este como otros acuerdos "permitirá abrir áreas previamente clausuradas para beneficio de vuestra economía", en relación a la situación de los isleños. También la primer ministra May dijo que las Malvinas es "un lugar que representa mucho para el Reino Unido". En el mensaje navideño May destacó que el comunicado conjunto acordado en setiembre con la Argentina, que la semana pasada se avanzó en Londres en torno a ese documento, "fue un paso en la dirección correcta". Para Londres, resulta necesario "continuar el trabajo con el gobierno de Argentina y vuestro gobierno [por las islas Malvinas] para hacer de los cometidos del comunicado conjunto una realidad".
Si bien May destacó que Gran Bretaña está "absolutamente comprometida" con el derecho a la autodeterminación de los isleños, también instó a los habitantes de Malvinas a avanzar en los acuerdos con Buenos Aires
Martín Dinatale | LA NACION
En su tradicional mensaje navideño y de fin de año, la primer ministra británica Theresa May envió un mensaje directo a los isleños de Malvinas al sostener que "una mejor relación con la Argentina será beneficioso para todos" y aventuró que con ello "se cosecharán recompensas" para la economía de las islas.
Si bien May destacó que Gran Bretaña está "absolutamente comprometida" con el derecho a la autodeterminación de los isleños, también instó a los habitantes de Malvinas a avanzar en los acuerdos con Buenos Aires."La mejor relación con Argentina es de interés de todos" , dijo. De esta manera, la primer ministra del Reino Unido adelantó que el acuerdo que se espera cerrar con el gobierno de Mauricio Macri en torno a las Malvinas "cosechará las recompensas con beneficios para vuestra economía, mejorando el comercio y el turismo, a la vez que desarrollando vuestras industrias de hidrocarburos y de pesca".
Por otra parte, May recordó a los militares británicos que lucharon "con tanta valentía" en el conflicto bélico con la Argentina. Aunque también agradeció al gobierno de las Islas Malvinas por su apoyo en los trabajos de identificación de 123 soldados argentinos desconocidos, sepultados en Darwin. En este sentido, May dijo que el gobierno de Malvinas ha estado involucrado "muy de cerca" en la discusión de "los siguientes pasos de este asunto de tanta sensibilidad humanitaria que será liderado por el Comité Internacional de la Cruz Roja". Estas tareas de identificación de los soldados NN comenzará en enero y se desplegará en julio del año que viene en las islas Malvinas.
Theresa Maydijo que está comprometida con la autodeterminación de los isleños
De esta manera, la primer ministra británica dijo que tanto este como otros acuerdos "permitirá abrir áreas previamente clausuradas para beneficio de vuestra economía", en relación a la situación de los isleños. También la primer ministra May dijo que las Malvinas es "un lugar que representa mucho para el Reino Unido". En el mensaje navideño May destacó que el comunicado conjunto acordado en setiembre con la Argentina, que la semana pasada se avanzó en Londres en torno a ese documento, "fue un paso en la dirección correcta". Para Londres, resulta necesario "continuar el trabajo con el gobierno de Argentina y vuestro gobierno [por las islas Malvinas] para hacer de los cometidos del comunicado conjunto una realidad".
viernes, 23 de diciembre de 2016
Malvinas: Escenas de combate aéreo
Victorias aire-aire argentinas
Zampini Diego, (Falklands):
29.08.2009
Este artículo contiene principalmente la versión argentina de la Guerra de Malvinas. La versión británica será mencionada como referencia cuando corresponda. De todos modos considero a las afirmaciones de los pilotos argentinos como la verdad. Este artíclo está dedicado a todo el personal de la Fuerza Aérea Argentina que combatió y murió durante la Guerra de Malvinas de 1982 — Diego Zampini
Es bien conocido el excelente desempeño de los Sea Harrier durante el conflicto en el rol de cazas, derribando 21 aviones argentinos, pero lo que no es tan conocido es que la Fuerza Aérea Argentina derribó tres aeronaves británicas — un Sea Harrier y dos helicópteros. Lo que sigue es la narración de esas victorias.
Dagger contra Sea Harrier
A las 14:00 hs del 21 de mayo de 1982 despegó desde la base aérea de San Julián en la Patagonia argentina una escuadrilla de tres aviones Dagger (copia israelí del Mirage 5 francés, fabricada con el nombre de Nesher, y vendida a argentina con el nombre de Dagger) del Grupo 6 de Caza, armados con bombas para atacar objetivos navales y sin misiles aire-aire. Su indicativo radial era «Ratón» y la integraban el Capitán Guillermo Donadille (quién volaba el Dagger matrícula C-403), el Mayor Carlos Justo Piuma (C-404) y el Primer Teniente Jorge D. Senn (C-407). Una hora después del despegue pasaron sobre la Gran Malvina para atacar los buques británicos en el estrecho de San Carlos.
Desgraciadamente, los británicos habían detectado los corredores de ingreso que utilizaban los Dagger, que no podían, como si lo hacían los A-4 Skyhawk debido a su capacidad de repostar en vuelo, realizar grandes rodeos dado que su consumo de combustibles les impediría luego regresar a sus bases. Fue así que los Sea Harrier estaban al acecho, esperando a sus presas.
Capitán Guillermo Donadille: «Cuando estábamos a un minuto del objetivo, que eran los buques ingleses en San Carlos, mi número 3, Senn, ubicado a la izquierda, me pega un grito por la radio: ‘¡Atento, un avión a la derecha!’ Me fijo y efectivamente veo un avión un poco más lejos y volando casi en nuestro rumbo.
Ahora resulta que lo curioso de la situación -pero esto recién lo supe más tarde- es que Senn me estaba indicando otro avión que se acercaba un poco de frente y el que yo veo era un segundo aparato que estaba más lateral.»
Donadille admite que en un primer momento pensó que se trataba de un Skyhawk argentino, ya que había poca luz y además lloviznaba. Pero cuando el piloto del Sea Harrier vió a Senn y comenzó a virar para atacarlo ya no hubo dudas, era un enemigo.
Capitán Guillermo Donadille: «Entonces ordeno a la escuadrilla largar todas las bombas y los tanques suplementarios, porque con toda esa parafernalia no se puede virar en forma suficientemente rápida para intentar alguna maniobra defensiva contra los ágiles aviones ingleses, de manera que ordeno eyectar las cargas y enfrentar a los Harrier.»
Senn maniobnró para enfrentar al que iba hacia él pero no vió al otro Sea Harrier, a la derecha del jefe de la CAP, que estaba posicionado para disparar un misil («soldar el caño» en la jerga de los pilotos argentinos).
Capitán Guillermo Donadille: «Aunque el Harrier se encontraba fuera de la distancia de tiro de los cañones de 30 mm de mi avión, la única arma con la que contábamos para hacerles frente, o sea que estabamos a más de 700 metros, igual comienzo a disparar con la idea que, como el fuego de los dos cañones ilumina toda la parte inferior del fuselaje, el británico me viera y no prosiguiera con su ataque al inadvertido Senn.
Efectivamente me ve porque inmediatamente lo deja a Senn, invierte y pica hacia el suelo. Yo como mejor pude invertí mi avión hacia donde supuestamente pasaría el inglés, todo esto a unos 100 metros del suelo, y empiezo a disparar, sin mira ni dad, le apunté con el avión y tiré donde imaginaba que iba a pasar… y al parecer pasó por ahí. Yo casi me tragué el suelo por seguirlo pero el Harrier pasó por el ‘chorro’ de proyectiles. Pasamos tan bajo que en un momento pensé que el piloto británico se había estrellado.
Logré salir de esa riesgosa situación, pero solo para encontrarlo a Senn, que venía cerrando como un enloquecido, así que tuve que volver a invertir o sino chocábamos los dos. Pero pasé, acomodé el avión y en ese momento me pegan un misilazo1 y tengo que eyectarme.»
Pocos segundos más tarde los otros dos miembros de la escuadrilla -Senn y Piuma- fueron derribados por los Sea Harrier, pero todo pudieron eyectarse exitosamente y fueron más tarde recuperados por las fuerzas de tierra argentinas en la Gran Malvina2 y llevados a Port Howard.
De acuerdo a la versión británica, Donadille y sus dos compañeros fueron derribados por dos Sea Harrier FRS.1 del No.801 Sqdn volados por Nigel D. «Sharkey» Ward y Steve R. Thomas. Según esta misma versión, el piloto al que le disparó Donadille fue Ward, que pudo esquivar la ráfaga de cañon. A continuación Nigel Ward derribó a Senn y Thomas hizo lo mismo con Donadille y Piuma con sus misiles AIM-9L.
Esto no concuerda con lo observado por los argentinos: de acuerdo al radar de Puerto Argentino3 no menos de cinco Sea Harrier interceptaron a los tres Dagger de la escuadrilla4 «Ratón». Más aún, un puesto de observación en tierra cerca del lugar de la batalla había visto pasar a un Harrier desprendiendo humo negro a las 15:00 hs aproximadamente (la hora del combate aéreo). Un investigador argentino, Rubén Oscar Moro5, contactó fuentes británicas para conocer las pérdidas reales británicas en aviones y helicópteros. Estas fuentes le brindaron la información (según él sus datos son 100% confiables) pero a cambio le pidieron anonimato. En agosto de 1984 dichas fuentes le confirmaron que el Sea Harrier dañado por el Capitán Donadille era tripulado por el Lieutenant Commander Harry Trent, que tras alejarse unos 30 kms del lugar del combate aéreo, se vió obligado a eyectarse y fue rescatado por un helicóptero Sea King.
Asesinos de Helicópteros
Las otras dos victorias aire-aire argentinas ocurrieron el 28 de mayo de 1982, cuando varios aviones del tipo FMA6 IA-58 Pucará del Grupo 3 de Ataque fueron enviados a brindar apoyo a las tropas argentinas del RI 127 que estaban peleando contra el 2 Parachutist Battalion en el área de Darwin-Prado del Ganso8. Dos de estos aviones, tripulados por los Tenientes Miguel Ángel Giménez (líder, N 1) y C. R. «Chino» Cimbaro (punto, numeral, wingman, N 2) despegaron del aeropuerto de Puerto Argentino a las 10:30 hs y, tras un vuelo con mal clima bajo una espesa capa de nubes y con mala visibilidad, alcanzaron la zona de Camilla Creek a las 10:55 hs. Entonces divisaron a dos helicópteros británicos que se estaban dirigiendo hacia una zona de aterrizaje donde otros aparatos similares estaban descargando provisiones o evacuando heridos, cerca de Darwin.
Teniente C. R. «Chino» Cimbaro: «Cuando llegamos sobre las líneas inglesas y próximos a Goose Green, divisamos dos helicópteros y de inmediato escuché que el ‘Sombra’ [el indicativo radial o callsign de Giménez — Nota del autor] me asignaba uno de los blancos. Rasantes como estábamos, lanzamos nuestros cohetes en salva. Los del guía dieron de lleno en el primer helicóptero, explotando el mismo en el aire. El segundo fue tocado por mis cohetes, desplomándose a tierra. Ví como algunos de los integrantes intentaban salir del aparato.
La victoria de Miguel Ángel Giménez, quién volaba el IA-58 Pucará matrícula A-537, es la única confirmada por los británicos: su víctima fue el Scout S/N XT629/DR del 3 CBAS (3rd Command Brigade Air Squadron) del Army Air Corp británico, cuyo piloto el Lieutenant Nunn falleció pero el copiloto Sargeant Belcher pudo sobrevivir. El helicóptero abatido por el Teniente Cimbaro fue un Sea King, pero aunque el relato del «Chino» no deja lugar a dudas que este fue totalmente destruido, los británicos niegan haber sufrido pérdidas adicionales ese día, y por el contrario afirman que otro Scout fue atacado por un Pucará pero que no fue ni siquiera dañado.
Despues de finalizar exitosamente su misión, ambos pilotos argentinos regresaron a Puerto Argentino por sendas de vuelo distintas con la intención de dificultar una intercepción por parte de cualquier posible CAP de Sea Harrier presente en el área. Desafortunadamente, el mal clima le jugó una mala pasada a Giménez, quien se estrelló accidentalmente contra la Blue Mountain durante el vuelo de retorno. Los restos de su avión y su cuerpo fueron descubiertos en 1986. Cimbaro, por el contrario, regresó sin problemas y rapidamente informó de las victorias obtenidas por él y Giménez.
Diego Fernando Zampini
Bibliografía:
«La Guerra de las Malvinas», Fascículo N 40, Ediciones Fernández Reguera, Buenos Aires, diciembre 1986
«Guerra Aérea en las Malvinas», Brigadier Benigno H. Andrada, Emecé Editores S. A., Buenos Aires, 1983
«La Guerra Inaudita. Historia del Conflicto del Atlántico Sur», Rubén Oscar Moro, Editorial Pleamar, Buenos Aires, 1985.
«Dios y los Halcones», Pablo Marcos Rafel Carballo, Editorial Abril S. A., Buenos Aires, 1983.
«Falklands, the Air War», Rodney A. Burden — Michael I. Draper — Douglas E. Rough — Colin R. Smith & David A. Wilton, Arms and Armour Press, 1987.
Fuente
Zampini Diego, (Falklands):
29.08.2009
Este artículo contiene principalmente la versión argentina de la Guerra de Malvinas. La versión británica será mencionada como referencia cuando corresponda. De todos modos considero a las afirmaciones de los pilotos argentinos como la verdad. Este artíclo está dedicado a todo el personal de la Fuerza Aérea Argentina que combatió y murió durante la Guerra de Malvinas de 1982 — Diego Zampini
Es bien conocido el excelente desempeño de los Sea Harrier durante el conflicto en el rol de cazas, derribando 21 aviones argentinos, pero lo que no es tan conocido es que la Fuerza Aérea Argentina derribó tres aeronaves británicas — un Sea Harrier y dos helicópteros. Lo que sigue es la narración de esas victorias.
Dagger contra Sea Harrier
A las 14:00 hs del 21 de mayo de 1982 despegó desde la base aérea de San Julián en la Patagonia argentina una escuadrilla de tres aviones Dagger (copia israelí del Mirage 5 francés, fabricada con el nombre de Nesher, y vendida a argentina con el nombre de Dagger) del Grupo 6 de Caza, armados con bombas para atacar objetivos navales y sin misiles aire-aire. Su indicativo radial era «Ratón» y la integraban el Capitán Guillermo Donadille (quién volaba el Dagger matrícula C-403), el Mayor Carlos Justo Piuma (C-404) y el Primer Teniente Jorge D. Senn (C-407). Una hora después del despegue pasaron sobre la Gran Malvina para atacar los buques británicos en el estrecho de San Carlos.
Desgraciadamente, los británicos habían detectado los corredores de ingreso que utilizaban los Dagger, que no podían, como si lo hacían los A-4 Skyhawk debido a su capacidad de repostar en vuelo, realizar grandes rodeos dado que su consumo de combustibles les impediría luego regresar a sus bases. Fue así que los Sea Harrier estaban al acecho, esperando a sus presas.
Capitán Guillermo Donadille: «Cuando estábamos a un minuto del objetivo, que eran los buques ingleses en San Carlos, mi número 3, Senn, ubicado a la izquierda, me pega un grito por la radio: ‘¡Atento, un avión a la derecha!’ Me fijo y efectivamente veo un avión un poco más lejos y volando casi en nuestro rumbo.
Ahora resulta que lo curioso de la situación -pero esto recién lo supe más tarde- es que Senn me estaba indicando otro avión que se acercaba un poco de frente y el que yo veo era un segundo aparato que estaba más lateral.»
Donadille admite que en un primer momento pensó que se trataba de un Skyhawk argentino, ya que había poca luz y además lloviznaba. Pero cuando el piloto del Sea Harrier vió a Senn y comenzó a virar para atacarlo ya no hubo dudas, era un enemigo.
Capitán Guillermo Donadille: «Entonces ordeno a la escuadrilla largar todas las bombas y los tanques suplementarios, porque con toda esa parafernalia no se puede virar en forma suficientemente rápida para intentar alguna maniobra defensiva contra los ágiles aviones ingleses, de manera que ordeno eyectar las cargas y enfrentar a los Harrier.»
Senn maniobnró para enfrentar al que iba hacia él pero no vió al otro Sea Harrier, a la derecha del jefe de la CAP, que estaba posicionado para disparar un misil («soldar el caño» en la jerga de los pilotos argentinos).
Capitán Guillermo Donadille: «Aunque el Harrier se encontraba fuera de la distancia de tiro de los cañones de 30 mm de mi avión, la única arma con la que contábamos para hacerles frente, o sea que estabamos a más de 700 metros, igual comienzo a disparar con la idea que, como el fuego de los dos cañones ilumina toda la parte inferior del fuselaje, el británico me viera y no prosiguiera con su ataque al inadvertido Senn.
Efectivamente me ve porque inmediatamente lo deja a Senn, invierte y pica hacia el suelo. Yo como mejor pude invertí mi avión hacia donde supuestamente pasaría el inglés, todo esto a unos 100 metros del suelo, y empiezo a disparar, sin mira ni dad, le apunté con el avión y tiré donde imaginaba que iba a pasar… y al parecer pasó por ahí. Yo casi me tragué el suelo por seguirlo pero el Harrier pasó por el ‘chorro’ de proyectiles. Pasamos tan bajo que en un momento pensé que el piloto británico se había estrellado.
Logré salir de esa riesgosa situación, pero solo para encontrarlo a Senn, que venía cerrando como un enloquecido, así que tuve que volver a invertir o sino chocábamos los dos. Pero pasé, acomodé el avión y en ese momento me pegan un misilazo1 y tengo que eyectarme.»
Pocos segundos más tarde los otros dos miembros de la escuadrilla -Senn y Piuma- fueron derribados por los Sea Harrier, pero todo pudieron eyectarse exitosamente y fueron más tarde recuperados por las fuerzas de tierra argentinas en la Gran Malvina2 y llevados a Port Howard.
De acuerdo a la versión británica, Donadille y sus dos compañeros fueron derribados por dos Sea Harrier FRS.1 del No.801 Sqdn volados por Nigel D. «Sharkey» Ward y Steve R. Thomas. Según esta misma versión, el piloto al que le disparó Donadille fue Ward, que pudo esquivar la ráfaga de cañon. A continuación Nigel Ward derribó a Senn y Thomas hizo lo mismo con Donadille y Piuma con sus misiles AIM-9L.
Esto no concuerda con lo observado por los argentinos: de acuerdo al radar de Puerto Argentino3 no menos de cinco Sea Harrier interceptaron a los tres Dagger de la escuadrilla4 «Ratón». Más aún, un puesto de observación en tierra cerca del lugar de la batalla había visto pasar a un Harrier desprendiendo humo negro a las 15:00 hs aproximadamente (la hora del combate aéreo). Un investigador argentino, Rubén Oscar Moro5, contactó fuentes británicas para conocer las pérdidas reales británicas en aviones y helicópteros. Estas fuentes le brindaron la información (según él sus datos son 100% confiables) pero a cambio le pidieron anonimato. En agosto de 1984 dichas fuentes le confirmaron que el Sea Harrier dañado por el Capitán Donadille era tripulado por el Lieutenant Commander Harry Trent, que tras alejarse unos 30 kms del lugar del combate aéreo, se vió obligado a eyectarse y fue rescatado por un helicóptero Sea King.
Asesinos de Helicópteros
Las otras dos victorias aire-aire argentinas ocurrieron el 28 de mayo de 1982, cuando varios aviones del tipo FMA6 IA-58 Pucará del Grupo 3 de Ataque fueron enviados a brindar apoyo a las tropas argentinas del RI 127 que estaban peleando contra el 2 Parachutist Battalion en el área de Darwin-Prado del Ganso8. Dos de estos aviones, tripulados por los Tenientes Miguel Ángel Giménez (líder, N 1) y C. R. «Chino» Cimbaro (punto, numeral, wingman, N 2) despegaron del aeropuerto de Puerto Argentino a las 10:30 hs y, tras un vuelo con mal clima bajo una espesa capa de nubes y con mala visibilidad, alcanzaron la zona de Camilla Creek a las 10:55 hs. Entonces divisaron a dos helicópteros británicos que se estaban dirigiendo hacia una zona de aterrizaje donde otros aparatos similares estaban descargando provisiones o evacuando heridos, cerca de Darwin.
Teniente C. R. «Chino» Cimbaro: «Cuando llegamos sobre las líneas inglesas y próximos a Goose Green, divisamos dos helicópteros y de inmediato escuché que el ‘Sombra’ [el indicativo radial o callsign de Giménez — Nota del autor] me asignaba uno de los blancos. Rasantes como estábamos, lanzamos nuestros cohetes en salva. Los del guía dieron de lleno en el primer helicóptero, explotando el mismo en el aire. El segundo fue tocado por mis cohetes, desplomándose a tierra. Ví como algunos de los integrantes intentaban salir del aparato.
La victoria de Miguel Ángel Giménez, quién volaba el IA-58 Pucará matrícula A-537, es la única confirmada por los británicos: su víctima fue el Scout S/N XT629/DR del 3 CBAS (3rd Command Brigade Air Squadron) del Army Air Corp británico, cuyo piloto el Lieutenant Nunn falleció pero el copiloto Sargeant Belcher pudo sobrevivir. El helicóptero abatido por el Teniente Cimbaro fue un Sea King, pero aunque el relato del «Chino» no deja lugar a dudas que este fue totalmente destruido, los británicos niegan haber sufrido pérdidas adicionales ese día, y por el contrario afirman que otro Scout fue atacado por un Pucará pero que no fue ni siquiera dañado.
Despues de finalizar exitosamente su misión, ambos pilotos argentinos regresaron a Puerto Argentino por sendas de vuelo distintas con la intención de dificultar una intercepción por parte de cualquier posible CAP de Sea Harrier presente en el área. Desafortunadamente, el mal clima le jugó una mala pasada a Giménez, quien se estrelló accidentalmente contra la Blue Mountain durante el vuelo de retorno. Los restos de su avión y su cuerpo fueron descubiertos en 1986. Cimbaro, por el contrario, regresó sin problemas y rapidamente informó de las victorias obtenidas por él y Giménez.
Diego Fernando Zampini
Bibliografía:
«La Guerra de las Malvinas», Fascículo N 40, Ediciones Fernández Reguera, Buenos Aires, diciembre 1986
«Guerra Aérea en las Malvinas», Brigadier Benigno H. Andrada, Emecé Editores S. A., Buenos Aires, 1983
«La Guerra Inaudita. Historia del Conflicto del Atlántico Sur», Rubén Oscar Moro, Editorial Pleamar, Buenos Aires, 1985.
«Dios y los Halcones», Pablo Marcos Rafel Carballo, Editorial Abril S. A., Buenos Aires, 1983.
«Falklands, the Air War», Rodney A. Burden — Michael I. Draper — Douglas E. Rough — Colin R. Smith & David A. Wilton, Arms and Armour Press, 1987.
Fuente
martes, 20 de diciembre de 2016
Habrá vuelos a Malvinas desde Río Gallegos
Malvinas: la Argentina y Gran Bretaña acordaron reanudar los vuelos de las islas al continente
Los vuelos de las Malvinas al continente se harían a Río Gallegos o a Buenos Aires una vez al mes
Martín Dinatale | LA NACION
Luego de dos días de reuniones intensas en Londres los gobiernos de la Argentina y Gran Bretaña acordaron hoy restituir los vuelos de las islas Malvinas al continente así como también se estableció el protocolo final para avanzar en la identificación de los soldados NN que yacen en el cementerio de Darwin y se avanzó en la idea de reencauzar las relaciones bilaterales con el Reino Unido.
Según expresaron a LA NACION fuentes calificadas de la Cancillería y de Londres los vuelos de las Malvinas al continente se harían a Río Gallegos o a Buenos Aires una vez al mes aunque no están definidos aun los detalles técnicos. Tampoco está definido que aerolínea hará los vuelos. Hasta ahora sólo había una escala del vuelo de LAN Chile que va de Punta Arenas para Malvinas. Pero se sumará el vuelo consensuado tras el encuentro de Londres.
"Hubo muy buena sintonía con Gran Bretaña y también un muy buen clima con los isleños que estaban presentes en el encuentro", dijo un funcionario consultado. Los detalles técnicos del restablecimiento de los vuelos se darán a conocer en un comunicado conjunto de las cancillerías.
Habrá vuelos a Malvinas
En la reunión de Londres participaron los vicecancilleres Alan Duncan de Gran Bretaña y Pedro Villagra Delgado de Argentina, más una comitiva de ambas partes. Dos legisladores isleños estaban presentes por el lado del Reino Unido pero la reunión se hizo a nivel bilateral.
Por otra parte, se firmó un acuerdo para avanzar con los detalles técnicos para el proceso de identificación de los 123 soldados argentinos sin nombre que murieron en la guerra de 1982 y que están enterrados en Malvinas. Así, se acordó que el equipo de forenses de la Cruz Roja comenzará a trabajar en lo inmediato en el proceso de identificación de los soldados con las muestras de ADN que aportaron los familiares de esos soldados NN.
Fuentes de la comitiva argentina que está en Londres remarcaron a LA NACION que el Gobierno dejó en claro en todo momento el reclamo de soberanía argentina que existe sobre las islas Malvinas más alla de los acuerdos firmados.
A su vez, Gran Bretaña y la Argentina avanzaron en buena parte del comunicado conjunto firmado en septiembre pasado en todo lo que tiene que ver con los acuerdos comerciales, cooperación científica y tecnológica, aumento de inversiones y relaciones culturales.
En lineas generales se trabajó sobre lo que la canciller Susana Malcorra denomina la "agenda positiva " con Londres que implica el restablecimiento de las relaciones luego de la confrontación que hubo durante el periodo kirchnerista.
Los vuelos de las Malvinas al continente se harían a Río Gallegos o a Buenos Aires una vez al mes
Martín Dinatale | LA NACION
Luego de dos días de reuniones intensas en Londres los gobiernos de la Argentina y Gran Bretaña acordaron hoy restituir los vuelos de las islas Malvinas al continente así como también se estableció el protocolo final para avanzar en la identificación de los soldados NN que yacen en el cementerio de Darwin y se avanzó en la idea de reencauzar las relaciones bilaterales con el Reino Unido.
Según expresaron a LA NACION fuentes calificadas de la Cancillería y de Londres los vuelos de las Malvinas al continente se harían a Río Gallegos o a Buenos Aires una vez al mes aunque no están definidos aun los detalles técnicos. Tampoco está definido que aerolínea hará los vuelos. Hasta ahora sólo había una escala del vuelo de LAN Chile que va de Punta Arenas para Malvinas. Pero se sumará el vuelo consensuado tras el encuentro de Londres.
"Hubo muy buena sintonía con Gran Bretaña y también un muy buen clima con los isleños que estaban presentes en el encuentro", dijo un funcionario consultado. Los detalles técnicos del restablecimiento de los vuelos se darán a conocer en un comunicado conjunto de las cancillerías.
Habrá vuelos a Malvinas
En la reunión de Londres participaron los vicecancilleres Alan Duncan de Gran Bretaña y Pedro Villagra Delgado de Argentina, más una comitiva de ambas partes. Dos legisladores isleños estaban presentes por el lado del Reino Unido pero la reunión se hizo a nivel bilateral.
Por otra parte, se firmó un acuerdo para avanzar con los detalles técnicos para el proceso de identificación de los 123 soldados argentinos sin nombre que murieron en la guerra de 1982 y que están enterrados en Malvinas. Así, se acordó que el equipo de forenses de la Cruz Roja comenzará a trabajar en lo inmediato en el proceso de identificación de los soldados con las muestras de ADN que aportaron los familiares de esos soldados NN.
Fuentes de la comitiva argentina que está en Londres remarcaron a LA NACION que el Gobierno dejó en claro en todo momento el reclamo de soberanía argentina que existe sobre las islas Malvinas más alla de los acuerdos firmados.
A su vez, Gran Bretaña y la Argentina avanzaron en buena parte del comunicado conjunto firmado en septiembre pasado en todo lo que tiene que ver con los acuerdos comerciales, cooperación científica y tecnológica, aumento de inversiones y relaciones culturales.
En lineas generales se trabajó sobre lo que la canciller Susana Malcorra denomina la "agenda positiva " con Londres que implica el restablecimiento de las relaciones luego de la confrontación que hubo durante el periodo kirchnerista.
lunes, 19 de diciembre de 2016
Una inútil negocia los vuelos con los britones y los fucking kelpers
Malvinas: reunión crucial para reanudar los vuelos
Funcionarios de la Argentina y de Gran Bretaña se encontrarán hoy en Londres para avanzar en el acuerdo alcanzado en septiembre; participarán representantes de las islas
Martín Dinatale | LA NACION
Alan Duncan con la inútil que ya nos costó miles de dólares para que fracasara como candidata de la ONU
La Argentina y Gran Bretaña buscarán hoy en Londres avanzar hacia el relanzamiento de las relaciones bilaterales y cerrar algunos temas vinculados a las islas Malvinas. Así, se espera que el eje predominante del encuentro sea el eventual anuncio de un plan para reanudar los vuelos entre el continente y el archipiélago.
Fuentes calificadas de la Cancillería y de Londres dijeron a LA NACION que en la reunión estarán el vicecanciller británico, Alan Duncan; el flamante vicecanciller argentino, Pedro Villagra Delgado, y dos legisladores de las Malvinas (¿?!!!!) que se sumarán al diálogo.
Las negociaciones empezarán hoy y seguirán mañana. El gobierno de Mauricio Macri confía en poder impulsar "una agenda positiva" con Gran Bretaña en lo que se refiere al intercambio comercial y a una larga lista de acuerdos de cooperación bilateral. Pero el dato más relevante y esperado del encuentro es sin duda el capítulo referido a las Malvinas.
Mike Summers, uno de los delegados de las islas que estarán en Londres, confirmó ayer a LA NACION que el propósito del encuentro es lograr un acuerdo para reanudar los vuelos a las Malvinas.
"Queremos que se cumpla con los compromisos de la declaración conjunta de septiembre, donde se acordó que la Argentina no tenía ninguna objeción al plan de reanudación de vuelos", señaló Summers.
No está claro aún si la reanudación de los vuelos se hará de Buenos Aires a las Malvinas o de las islas a Brasil o a Chile. Actualmente, las islas tienen una única conexión aérea comercial semanal con Punta Arenas, a cargo de LAN Chile. Una vez por mes, uno de esos vuelo semanales hace escala en Río Gallegos. La intención de Londres es ampliar la oferta de vuelos al continente para lograr una mayor y más rápida conectividad de los isleños. Durante los años 90 había dos vuelos semanales del continente a las islas.
En la reunión que se hará hoy en Londres, por la Argentina, además de Villagra Delgado, estarán el vicecanciller Duncan; la subsecretaria de Malvinas de la Cancillería, María Teresa Kralikas, y el embajador ante organismos internacionales en Ginebra, Marcelo Sima.
Sima formó parte de las negociaciones con Londres y la Cruz Roja en las que se discutió el proceso de reconocimiento de los soldados NN que están enterrados en las Malvinas. Se espera que mañana también haya un anuncio relevante sobre este tema (ver aparte).
En lo que atañe a las relaciones bilaterales, el comunicado conjunto que se suscribió en septiembre pasado es muy amplio y ambicioso. Ese principio de acuerdo provocó una fuerte polémica en el Congreso argentino, ya que sus condiciones no habían sido consultadas previamente por el Gobierno con los legisladores.
El comunicado contempla, entre otras cosas, la lucha conjunta contra la corrupción y el crimen organizado; eventuales acuerdos de cooperación en ciencia y tecnología, derechos humanos y cuestiones de género; convenios sobre arte, cultura, educación y deportes, y la crisis de los refugiados. Pero sin dudas el punto más controvertido es el relacionado con el capítulo sobre el Atlántico Sur.
Tanto en Londres como en Buenos Aires hay grandes expectativas en alcanzar resultados concretos que dejen atrás la etapa de confrontación que llevó adelante el gobierno de Cristina Kirchner.
"Se precisa avanzar en la solicitud de expresiones de interés de aerolíneas calificadas para operar el servicio de vuelos a las Falklands (Malvinas)", afirmó anoche en un comunicado el gobierno de las islas, que también mostró interés en que prosperen las negociaciones con la Argentina sobre cooperación científica, exploración de recursos petroleros y explotación conjunta de la pesca.
El comunicado conjunto de septiembre pasado fue un intento de mejorar relaciones que estaban particularmente deterioradas. En ese sentido, la canciller Susana Malcorra expresó la semana pasada a LA NACION que "hay una gran cantidad de temas que definimos trabajar con Gran Bretaña en una agenda que en un 80% sea propositiva y que en un 20% gire en torno de una cuestión compleja como lo son las Malvinas".
La canciller también dejó sentada su posición acerca de la reanudación de los vuelos: "Es evidente -señaló- que una de las áreas donde hay mucho interés del Reino Unido es la cuestión de los vuelos. Miraremos cuáles son las propuestas. En la cuestión de aerotransportes estamos abriéndonos de una manera muy significativa. Eso puede ser una forma de simplificar una posible solución del tema vuelos".
De todas maneras, en el Gobierno aseguraron ayer que antes de suscribir un acuerdo con Londres por la reanudación de los vuelos a se remitirá todo lo conversado al Congreso para su debate y eventual aprobación. En la Casa Rosada y en la Cancillería creen que no se debe volver a cometer el error de septiembre pasado, cuando el comunicado conjunto no fue previamente discutido y esa falta de búsqueda de consensos cayó muy mal tanto en el oficialismo como en la oposición.
Otro de los ejes polémicos de aquel comunicado fue que dejaba a un lado el debate por el reclamo de la soberanía argentina sobre las Malvinas en un paraguas diplomático similar al que utilizó Carlos Menem durante los años 90 al establecer su vínculo con Londres y con los isleños.
El vicecanciller británico Alan Duncan y la canciller Susana Malcorra se reunieron en septiembre pasado en Buenos Aires, donde redactaron el comunicado. Foto: Archivo
Malvinas
En el comunicado, ambos se comprometieron a establecer "un diálogo para mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco". Se deja a un lado el debate por la soberanía
Soldados NN
Si bien no se habló del diferendo , sí se acordó avanzar en la identificación de 123 soldados sepultados en el cementerio de Darwin
Ingreso a la OCDE
Gran Bretaña también apoyó la aspiración de la Argentina de ingresar a la organización internacional económica
Plan anticorrupción
Ambos países se comprometieron a alinearse en la agenda global anticorrupción
Comercio en común
Se acordó trabajar para incrementar el comercio bilateral y los vínculos de cooperación
Refugiados
Londres avaló el plan de Macri para recibir 3000 refugiados sirios
Funcionarios de la Argentina y de Gran Bretaña se encontrarán hoy en Londres para avanzar en el acuerdo alcanzado en septiembre; participarán representantes de las islas
Martín Dinatale | LA NACION
Alan Duncan con la inútil que ya nos costó miles de dólares para que fracasara como candidata de la ONU
La Argentina y Gran Bretaña buscarán hoy en Londres avanzar hacia el relanzamiento de las relaciones bilaterales y cerrar algunos temas vinculados a las islas Malvinas. Así, se espera que el eje predominante del encuentro sea el eventual anuncio de un plan para reanudar los vuelos entre el continente y el archipiélago.
Fuentes calificadas de la Cancillería y de Londres dijeron a LA NACION que en la reunión estarán el vicecanciller británico, Alan Duncan; el flamante vicecanciller argentino, Pedro Villagra Delgado, y dos legisladores de las Malvinas (¿?!!!!) que se sumarán al diálogo.
Las negociaciones empezarán hoy y seguirán mañana. El gobierno de Mauricio Macri confía en poder impulsar "una agenda positiva" con Gran Bretaña en lo que se refiere al intercambio comercial y a una larga lista de acuerdos de cooperación bilateral. Pero el dato más relevante y esperado del encuentro es sin duda el capítulo referido a las Malvinas.
Mike Summers, uno de los delegados de las islas que estarán en Londres, confirmó ayer a LA NACION que el propósito del encuentro es lograr un acuerdo para reanudar los vuelos a las Malvinas.
"Queremos que se cumpla con los compromisos de la declaración conjunta de septiembre, donde se acordó que la Argentina no tenía ninguna objeción al plan de reanudación de vuelos", señaló Summers.
No está claro aún si la reanudación de los vuelos se hará de Buenos Aires a las Malvinas o de las islas a Brasil o a Chile. Actualmente, las islas tienen una única conexión aérea comercial semanal con Punta Arenas, a cargo de LAN Chile. Una vez por mes, uno de esos vuelo semanales hace escala en Río Gallegos. La intención de Londres es ampliar la oferta de vuelos al continente para lograr una mayor y más rápida conectividad de los isleños. Durante los años 90 había dos vuelos semanales del continente a las islas.
En la reunión que se hará hoy en Londres, por la Argentina, además de Villagra Delgado, estarán el vicecanciller Duncan; la subsecretaria de Malvinas de la Cancillería, María Teresa Kralikas, y el embajador ante organismos internacionales en Ginebra, Marcelo Sima.
Sima formó parte de las negociaciones con Londres y la Cruz Roja en las que se discutió el proceso de reconocimiento de los soldados NN que están enterrados en las Malvinas. Se espera que mañana también haya un anuncio relevante sobre este tema (ver aparte).
En lo que atañe a las relaciones bilaterales, el comunicado conjunto que se suscribió en septiembre pasado es muy amplio y ambicioso. Ese principio de acuerdo provocó una fuerte polémica en el Congreso argentino, ya que sus condiciones no habían sido consultadas previamente por el Gobierno con los legisladores.
El comunicado contempla, entre otras cosas, la lucha conjunta contra la corrupción y el crimen organizado; eventuales acuerdos de cooperación en ciencia y tecnología, derechos humanos y cuestiones de género; convenios sobre arte, cultura, educación y deportes, y la crisis de los refugiados. Pero sin dudas el punto más controvertido es el relacionado con el capítulo sobre el Atlántico Sur.
Tanto en Londres como en Buenos Aires hay grandes expectativas en alcanzar resultados concretos que dejen atrás la etapa de confrontación que llevó adelante el gobierno de Cristina Kirchner.
"Se precisa avanzar en la solicitud de expresiones de interés de aerolíneas calificadas para operar el servicio de vuelos a las Falklands (Malvinas)", afirmó anoche en un comunicado el gobierno de las islas, que también mostró interés en que prosperen las negociaciones con la Argentina sobre cooperación científica, exploración de recursos petroleros y explotación conjunta de la pesca.
El comunicado conjunto de septiembre pasado fue un intento de mejorar relaciones que estaban particularmente deterioradas. En ese sentido, la canciller Susana Malcorra expresó la semana pasada a LA NACION que "hay una gran cantidad de temas que definimos trabajar con Gran Bretaña en una agenda que en un 80% sea propositiva y que en un 20% gire en torno de una cuestión compleja como lo son las Malvinas".
La canciller también dejó sentada su posición acerca de la reanudación de los vuelos: "Es evidente -señaló- que una de las áreas donde hay mucho interés del Reino Unido es la cuestión de los vuelos. Miraremos cuáles son las propuestas. En la cuestión de aerotransportes estamos abriéndonos de una manera muy significativa. Eso puede ser una forma de simplificar una posible solución del tema vuelos".
De todas maneras, en el Gobierno aseguraron ayer que antes de suscribir un acuerdo con Londres por la reanudación de los vuelos a se remitirá todo lo conversado al Congreso para su debate y eventual aprobación. En la Casa Rosada y en la Cancillería creen que no se debe volver a cometer el error de septiembre pasado, cuando el comunicado conjunto no fue previamente discutido y esa falta de búsqueda de consensos cayó muy mal tanto en el oficialismo como en la oposición.
Otro de los ejes polémicos de aquel comunicado fue que dejaba a un lado el debate por el reclamo de la soberanía argentina sobre las Malvinas en un paraguas diplomático similar al que utilizó Carlos Menem durante los años 90 al establecer su vínculo con Londres y con los isleños.
Acercamiento diplomático
El vicecanciller británico Alan Duncan y la canciller Susana Malcorra se reunieron en septiembre pasado en Buenos Aires, donde redactaron el comunicadoEl vicecanciller británico Alan Duncan y la canciller Susana Malcorra se reunieron en septiembre pasado en Buenos Aires, donde redactaron el comunicado. Foto: Archivo
Malvinas
En el comunicado, ambos se comprometieron a establecer "un diálogo para mejorar la cooperación en todos los asuntos del Atlántico Sur de interés recíproco". Se deja a un lado el debate por la soberanía
Soldados NN
Si bien no se habló del diferendo , sí se acordó avanzar en la identificación de 123 soldados sepultados en el cementerio de Darwin
Ingreso a la OCDE
Gran Bretaña también apoyó la aspiración de la Argentina de ingresar a la organización internacional económica
Plan anticorrupción
Ambos países se comprometieron a alinearse en la agenda global anticorrupción
Comercio en común
Se acordó trabajar para incrementar el comercio bilateral y los vínculos de cooperación
Refugiados
Londres avaló el plan de Macri para recibir 3000 refugiados sirios
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