sábado, 28 de mayo de 2016

Buque de asalto anfibio: USS Iwo Jima

USS Iwo Jima (LHD-7)


El USS Iwo Jima (LHD 7) es un buque de asalto anfibio multipropósito clase Wasp de la Armada de los Estados Unidos, el segundo buque construido en ser nombrado en memoria de la batalla de Iwo Jima.

Fue construido por Ingalls Shipbuilding en Pascagoula, Mississippi. Los trabajos de construcción se iniciaron el 3 de septiembre de 1996, la quilla fue puesta en grada el 12 de diciembre de 1997 y botado el 4 de febrero de 2000. Fue amadrinado por la señora Zandra Krulak, esposa del general Charles C. Krulak, ex comandante del Cuerpo de Marines.

Hizo el viaje inaugural el 23 de junio de 2001, acompañado por más de 2000 veteranos de la Segunda Guerra Mundial —muchos de ellos sobrevivientes de la batalla de Iwo Jima, siendo asignado una semana más tarde en Pensacola, Florida, con puerto base en Norfolk, Virginia.


Historial
AstilleroIngalls Shipbuilding
ClaseClase Wasp
TipoLHD
Autorizado28 de febrero de 1995
Iniciado12 de diciembre de 1997
Botado2 de febrero de 2000
Asignado30 de junio de 2001
Destinoen servicio
Características generales
Desplazamiento41 180 t apc
Eslora257 m
Manga34 m
Calado9,1 m
Armamento• 2 sistemas de misiles Sea Sparrow
• 2 sistemas de misiles RIM-116 RAM
• 2 sistemas Phalanx CIWS
• 4 cañones Mk 38 de 25 mm
• 4 ametralladoras Browning M2
Propulsión• 2 turbinas de vapor
• 2 calderas 4,1 MPa
• 2 hélices
Potencia70 000 CV
Velocidad22 nudos
Tripulación1108 oficiales y marineros
Tropas1894 marines
Aeronaves• 30 helicópteros
• 6-8 AV-8B Harrier
Indicativo de llamadaNovember.svg Xray.svg Xray.svg Golf.svg
November – Xray – Xray – Golf1

viernes, 27 de mayo de 2016

Los secretos de las Malvinas

LOS SECRETOS DE LA GUERRA DE MALVINAS

Seprin




El gobierno inglés resolvió mantener como secreto de estado toda la documentación vinculada con la guerra de las Malvinas por noventa años, o sea, hasta el año 2072. Esta decisión, conocida el 2010, se presenta como muy llamativa, porque los secretos de estado en general se revelan al cabo de 25 o 30 años. Desde el lado argentino podemos suponer que esta decisión sin precedentes tiene como fundamento el hecho de que las revelaciones podrían ser utilizadas contra Gran Bretaña en la reclamación sobre la reivindicación de las islas.

Conociendo la astucia y la inescrupulosidad del gobierno inglés en esta materia podríamos decir que esto es así sin ninguna duda. Al cabo de los sesenta y dos años que hay por delante, cabe suponer que el pleito estará superado a favor o en contra de cualquiera de los contendientes y ya carecerá de importancia lo que pudiese surgir de esos secretos.

Como quiera que sea, Inglaterra guarda secretos y uno de ellos esté referido al motivo inicial de la contienda. Del lado argentino todo el mundo cree que fue un acto irresponsable del Gral. Galtieri, entonces Comandante en Jefe del Ejército y presidente de facto de la República; y de las otras dos armas, marina y aviación, que lo acompañaron. Esto fue precisamente lo que los servicios de contrainteligencia ingleses pusieron en circulación, como así también que la Junta Militar procedía de esa forma para aliviar el frente interno, acosado por paros de la CGT.

¿Cómo se puede aceptar con tanta simplicidad tal irresponsabilidad de las FFAA, de acometer una aventura bélica con una tropa recién incorporada, con casi nula preparación? ¿Cómo se puede creer que los comandantes de la marina y la fuerza aérea y sus respectivos estados mayores no tuvieron la posibilidad de advertirle al Ejército, los inmensos riesgos de esa aventura? ¿Estaban todos enloquecidos? Esto es imposible de creer.

Descartada por increíble la hipótesis de que la contienda se inició por un acto de locura de las FFAA argentinas, tiene que existir otra explicación, basada en razones muy poderosas que tuvo el gobierno inglés, a cargo de Margaret Thatcher, para que el conflicto se desatara. Ese es el secreto más comprometedor ante la opinión pública mundial y ante la historia de la civilización, que el gobierno inglés quiere preservar.

LA GESTA DE LAS MALVINAS

¿Fue una gesta realmente? No se alcanza a comprender a quienes califican la acción desplegada como “gesta” y al mismo tiempo abominan contra la irresponsabilidad de ocupar las islas sin una tropa debidamente preparada, sin los adecuados armamentos, que quedaron en el continente, sin comida y tantos otros defectos que llevan a preguntar, en qué cosa radica la calidad de gesta frente a tanta impericia. Cuando se celebró el primer aniversario, el 02 de abril de 1984, ya recuperada la democracia (pero no el sistema republicano, que fue escandalosamente falseado desde entonces hasta hoy), el gobernador de la Provincia de Buenos Aires (Alejandro Armendaris) presidió un acto de celebración de la gesta, en presencia de familiares de soldados, oficiales y suboficiales muertos y de lisiados en silla de ruedas, en su discurso mostró esa contradicción insoluble: “Hemos venido a celebrar…, dijo …bueno, aquí no hay nada que celebrar…”. Los presentes quedaron atónitos: qué celebración es ésta en la que no hay nada que celebrar. Concedió condecoraciones a los lisiados y entregó medallas a los familiares de los muertos, que para él carecían de toda significación. Eran por actos personales protagonizados por cada uno de ellos a favor de una aventura militar, que no fue gesta. Murieron y se incapacitaron por nada. He allí la dramática contradicción de quienes creen que el hecho de la ocupación de las islas fue obra de un general etílico.

La verdad sobre esto es un secreto de estado inglés. Ningún inglés lo va a revelar jamás hasta el año 2072. Pero la decisión del gobierno británico no alcanza a ciudadanos de otras nacionalidades, en este caso, a un alemán, General de la Wermach, que ocupó el cargo de Segundo Comandante de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), con quien alternó accidentalmente el docente de la Universidad Nacional del Nordeste, Dr. Kornel Zoltan Méhesz, en un acto protocolar realizado en una universidad de Alemania. El hecho ocurrió a finales de la década del ochenta del siglo último. Al enterarse dicho General que su interlocutor era argentino nacionalizado, le manifestó su admiración por el recio comportamiento de la bisoña tropa argentina y, en algo así como una actitud de expiación por la actuación que la OTAN le hizo jugar al Reino Unido de Gran Bretaña en contra de la República Argentina, le manifestó que la guerra obedeció a una necesidad vital de estrategia de dicho organismo, enfrentado en la guerra fría contra Moscú, ya que según las encuestas de opinión el pueblo inglés se hartó de la “dama de hierro”, Margaret Thatcher, y para desplazarla apoyaría al partido Laborista. Éste propiciaba como plan de gobierno el retiro de los misiles intercontinentales Pershing, instalados por la OTAN en territorio británico, con ojivas nucleares apuntadas hacia Moscú y las principales ciudades de la ex Unión Soviética. El triunfo del laborismo conduciría a la desarticulación del sistema defensivo de la Organización, basado en la principal arma estratégica que tenía para enfrentar la “guerra fría”, que entonces se hallaba en proceso de intensificación paulatina.

La información que recibió el profesor Méhesz formó parte de la denuncia que, por iniciativa del Centro Correntino de Estudios, entonces Presidido por el Suboficial Mayor Rufino Antonio Billordo y suscripta por varias decenas de ciudadanos, se planteó contra Margaret Thatcher ante el Juzgado Federal de Ushuaia el año 1999, por crimen de guerra, sin citar entonces la fuente de la información, por circunstanciales motivos de oportunidad ahora superados. La denuncia se refería no solamente al criminal acto de ordenar el hundimiento del crucero argentino “Gral. Belgrano”, que se hallaba fuera de la zona de exclusión fijada unilateralmente por Gran Bretaña, sino también por la orden de atacar innecesariamente, en contra de la opinión del comandante de la fuerza de desembarco, la guarnición de Prado del Ganso (mal conocida como Ganso Verde), produciendo una brutal carnicería en ambos bandos. Los hechos referidos y la responsabilidad de Thatcher se basan exclusivamente en relatos efectuados por los periodistas ingleses Hastings y Jenkins, casi desconocidos en nuestro país, en su obra LA BATALLA POR LAS MALVINAS, Emecé Editores S.A, Buenos Aires, 1984. A quien le interese imponerse con mayor detalle del texto de la denuncia, puede solicitarlo en MOGLIA EDICIONES, calle La Rioja 755, de esta ciudad (folleto de 60 páginas).

En la citada denuncia se refiere que nuestro país fue objeto de una trampa, perfectamente orquestada por la OTAN, en resguardo de su sistema estratégico, que se hallaba en peligro de desmantelamiento. Con la colaboración de EEUU le hicieron ver a la Junta Militar que una ocupación sin bajas de las Islas (así se hizo) serviría para destrabar las negociaciones de Nueva York, que en ese momento se hallaban estancadas por la desinteligencia sobre si debían respetarse los deseos o los intereses de los habitantes de las islas. Todo sería solucionado por vía diplomática, sin acciones bélicas. Tanto es así que, cuando Thatcher ordenó la movilización de la “Task Force”, John Nott, Ministro de Defensa inglés, manifestó al periodismo que “cuando los argentinos vean que sus barcos comienzan a hundirse, volverán a la mesa de negociaciones”. Esta supuesta actitud negociadora es otra mentira más destinada a convencer que la acción de ocupación era un acto de locura de los militares argentinos. La guerra intensificó el espíritu nacionalista del pueblo inglés (es lo que se buscaba) y Thatcher fue reelegida nuevamente como Primer Ministro. Objetivo logrado: los misiles no fueron removidos al precio de la vida de más de 900 solados ingleses (dato que también ocultan), algo así como 1300 argentinos y más de 40 pilotos de la aviación, también argentina.

A la Argentina la impulsó un motivo de honda raíz patriótica. A Inglaterra, en cambio, la impulsó la perfidia de Thatcher. Ahora queda a cargo del lector definir si fue una gesta o una baladronada de militares argentinos enloquecidos. ¿Cuántos años más seguiremos manteniendo esta falsedad?
Políticamente, en la Argentina, la derrota en el conflicto precipitó la caída de la junta militar que gobernaba el país; en el Reino Unido, por su parte, la victoria en el enfrentamiento ayudó a que el gobierno conservador de Margaret Thatcher lograra la reelección en las elecciones del año 1983.2 Posteriormente fue posible la firma de un tratado en 1984 con Chile.

miércoles, 25 de mayo de 2016

¿Vuelve la estupidez de seducir a los putos kelpers?

Malvinas: el Gobierno evalúa restituir los vuelos y dar asistencia sanitaria
También cree que se podría acordar una cooperación científica y ampliar las becas de estudio a los kelpers; estrategia de acercamiento sin debate de soberanía
Martín Dinatale - LA NACION


Un grupo de argentinos visitó ayer las islas Malvinas. Foto: LA NACION / Mauro V. Rizzi

En forma paralela a la nueva etapa de "agenda positiva" que el Gobierno empezó a transitar con Gran Bretaña, la administración de Mauricio Macri evalúa una apertura y un acercamiento hacia los habitantes de las islas Malvinas con dos objetivos: diferenciarse de la estrategia confrontativa de Cristina Kirchner y asegurar un plan de "base humanitaria" con los kelpers.

Este esquema que se propone encarar Macri contempla la idea conceptual de que el territorio de las Malvinas es argentino y que, por lo tanto, a quienes viven allí "hay que tratarlos por igual como si fueran argentinos o extranjeros viviendo en territorio argentino", según graficó a LA NACION un funcionario allegado al Presidente. Esto implicará, en la práctica, establecer una relación "más normal" con las islas que la que tenía el gobierno kirchnerista. Así, se evalúa la posibilidad de dar asistencia en salud y educación a los isleños, así como la posibilidad de ampliar los vuelos del continente a las Malvinas.

No obstante, por el momento, esta estrategia no contemplará un acercamiento oficial ni extraoficial del Gobierno a los kelpers, porque Macri cree que la discusión por la soberanía de las Malvinas debe seguir encuadrada sólo con Gran Bretaña en el ámbito de las Naciones Unidas. Tampoco se analiza por ahora la posibilidad de establecer acuerdos de negocios conjuntos en el sector petrolero o marítimo. Desde este punto de vista, Macri también busca diferenciarse de la política de lazos estrechos que tenía Carlos Menem, con la recordada entrega de libros del osito Winnie Pooh que mandaba el canciller Guido Di Tella a las islas. "Esa política no la avalamos y no funcionó", dijo tajante un funcionario de la Cancillería a LA NACION.

En cambio, el Gobierno podrá ensayar un punto intermedio entre la estrategia amiga de Menem y el aislamiento de los Kirchner. La idea ahora es establecer una suerte de "plan de base humanitaria", como lo definió recientemente la canciller Susana Malcorra.

Para poner en marcha ese plan de base humanitaria, la canciller piensa, como ingeniera que es, en el principio de Pareto: hay un 80% de cosas en las que Macri está de acuerdo con Gran Bretaña y un 20% en las que no hay acuerdo. "La ventaja con Gran Bretaña es que sabemos cuál es ese 20%: son las Malvinas. Entonces, en lugar de dedicar todo nuestro tiempo a ese 20%, vamos a trabajar y producir resultados en el 80%", dijo Malcorra en una reciente entrevista a Clarín.

¿Acaso esta idea de trabajo conjunto implicará dejar de lado el reclamo por la soberanía de las islas? Nada de ello. El Gobierno está convencido de que hay que trabajar con Londres sobre otros temas, que encuadra en la "nueva agenda positiva". A la vez, Malcorra admitió que "ahora hay un mayor reconocimiento de la participación de la sociedad civil en distintas formas". Así, deslizó que se evalúan "opciones de apertura" y una diplomacia más flexible hacia los isleños.

En la Cancillería admiten que no hay que cerrar la puerta a los kelpers. Por el contrario, se piensa, por ejemplo, en ampliar el cupo de becas para estudiantes de las islas en universidades argentinas. Éste es un plan que inauguró el kirchnerismo en la última etapa del gobierno de Cristina Kirchner y que se profundizará. También se analiza la intención real de atender en hospitales de la Argentina a los kelpers ante una emergencia sanitaria. Un destacado funcionario de la Cancillería explicó a LA NACION que "se está trabajando en un plan para asistir en salud a la población de las Malvinas para operaciones de alta complejidad, para que no tengan que ir a Londres o terminar en un hospital de Punta Arenas que no les da respuesta", dijo.

En relación con los vuelos, se analiza restituir los viajes directos desde la Argentina hasta las islas al menos una vez por semana, como era antes de 2003, cuando que fueron cancelados. Actualmente sólo una vez al mes hay un vuelo de LAN que viene de Chile y hace escala en Río Gallegos. "Esta apertura permitirá que se fomente el turismo", dijo un funcionario de Macri. Así, el Gobierno rechaza la idea de darle a Uruguay o a Brasil una oferta de vuelos a las islas, porque cree que ese rol lo debe cumplir la Argentina.

También se mencionó en el Gobierno la idea de armar una cooperación científica en el Atlántico Sur. Esto podría implicar un intercambio de trabajos en las Malvinas o en las islas Sandwich. Por el momento, el Gobierno no evalúa abrir el comercio hacia las islas, aunque éste es un tema casi central para los kelpers, porque deben comprar frutas o verduras frescas a Chile o a Europa a costos siderales. La intención de hacer negocios petroleros o marítimos en aguas del Sur por parte de la Argentina quedó abierta tras el reciente fallo de la ONU que habilitó la ampliación de la plataforma continental marítima.


Los planes de acción

El Gobierno analiza restituir los vuelos a Malvinas que fueron cancelados en 2003 por los Kirchner. Hoy sólo hay un vuelo una vez al mes que viene de Chile y hace escala en Río Gallegos

La Argentina podrían brindar asistencia sanitaria y educativa a los kelpers que asi lo requieran. Esto evitaría que viajen a Londres para operaciones de alta complejidad

Se trabaja también en la idea de establecer una cooperación científica en el Atlántico Sur

24 de Mayo: Escuadrilla "Nene" de la FAA



 Arte: Aldo Campos (c)

martes, 24 de mayo de 2016

Otro verso británico de que descubrieron petróleo en aguas argentinas

Petrolera británica encontró un "yacimiento de clase mundial" en Malvinas
La empresa Rockhopper Exploration asegura haber conseguido un "logro fabuloso". El pozo está en las aguas custodiadas por el Ejército inglés
Infobae



Estiman que la cuenca tiene un potencial de casi 1.000 millones de barriles Estiman que la cuenca tiene un potencial de casi 1.000 millones de barriles Casi un mes y medio después de que la ONU aprobó extender la plataforma marítima de la Argentina, la cual incluye a las islas del Atlántico Sur y la Antártida, la petrolera Rockhopper Exploration Plc reveló el hallazgo de un "yacimiento de clase mundial" en el área marítima Sea Lion, al norte de las Islas Malvinas.

El presidente de la empresa, Pierre Jean-Marie Henri Jungels, realizó el anuncio en la última asamblea de accionistas de la compañía. Según dijo, se trata de un "logro fabuloso", comparable a las reservas que reporta en Argentina la compañía privada Pluspetrol.

"Se confirmó el tamaño del Sea Lion como un yacimiento de petróleo de clase mundial", dijo a sus accionistas Pierre Jean-Marie Henri Jungels, y prometió convertir a la cuenca norte de las Islas Malvinas en una "nueva provincia productora de hidrocarburos".

"Este fue un logro fabuloso para un pequeño equipo, hábilmente dirigido por su nuevo CEO, Sam Moody. No todos los operadores logran este resultado con equipos a menudo considerablemente más grandes", resaltó Jungels durante el encuentro en la sede de la compañía, ubicada en el número 5 de Welbeck Street, en Londres.

Rockhopper anunció este jueves que sus reservas netas de petróleo se duplicaron a más de 300 millones de barriles, mientras expertos independientes estiman que la cuenca tiene un potencial de casi 1.000 millones de barriles, un nivel similar al que reporta en la Argentina la firma local Pluspetrol (otra operadora mediana, Panamerican Energy, tiene reservas por 1.600 millones).

EL HALLAZGO TIENE UN POTENCIAL DE CASI 1.000 MILLONES DE BARRILES DE PETRÓLEO

Los hallazgos offshore se encuentran en un área en litigio entre el país y el Reino Unido, y corresponden a una operatoria cuestionada en Naciones Unidas y en otros foros internacionales, al punto que el anterior gobierno juzgó "ilegal" la exploración y producción de hidrocarburos en la zona.

En la Argentina, el reclamo por los derechos soberanos sobre las Islas Malvinas, sometidas a la ocupación británica desde 1841 (sólo interrumpida entre abril y junio de 1982), tiene categoría de política de Estado.

Al margen del conflicto político y diplomático, Jungels lamentó que la crisis financiera en el mercado europeo limitara los préstamos bancarios disponibles, y sostuvo que de no haber sido por esa restricción "podríamos incluso haber visto por primera vez petróleo este año".

Rockhopper es propietaria de más del 50% de dos yacimientos petrolíferos, Sea Lion (león marino) e Isobel Elaine, que podrían contener reservas de 747 millones barriles de petróleo y gas, según la auditoría independiente preparada por ERC Equipoise Limited (ERCE).

La empresa tenía una participación de 24% en estos yacimientos, pero la aumentó a 64% al fusionarse a fines del año pasado con la compañía Falkland Oil & Gas, según la denominación en inglés.

LA ZONA EN LA QUE SE ENCUENTRA EL POZO ES RECLAMADA POR LA ARGENTINA

El CEO de Rockhopper, Moody, destacó que la nueva auditoría "confirma el potencial de las Malvinas Norte para ser una cuenca de 1.000 millones de barriles".

El complejo de Sea Lion tiene más de la mitad de esas reservas, con casi 270 millones de barriles de bajo riesgo, que según el ejecutivo "podría ser evaluado con tan sólo 3 ó 4 pozos más dirigidos de manera óptima".

Además, añadió Moody, el descubrimiento Isobel Elaine "tiene el potencial de ser un tercio del desarrollo regional, que potencialmente contiene más de 500 millones de barriles".

Jungels remarcó durante la asamblea de accionistas de Rockhopper el "privilegio de haber estado involucrado con una de las más emocionantes historias de exploración y producción de la última década".

"Realmente se puede decir que se ha abierto una nueva provincia de hidrocarburos, de la que en el tiempo que tengo toda la confianza en que vamos a ver a los 1.000 millones de barriles -y más- de petróleo producido", vaticinó el presidente de la compañía.

Jungels resaltó que "tuvimos el maravilloso -y raro en el mundo de la exploración- éxito de encontrar Sea Lion con nuestro primer pozo", operado en la superficie inicialmente testeada por la compañía Shell.

"Este fue, por supuesto, un momento de transformación para la empresa, y de hecho para la industria en las aguas alrededor de las Falkland Island (Islas Malvinas)", señaló el ejecutivo inglés.

Tras destacar que el plan de desarrollo en fases sensibles "establecerá a las Malvinas como nueva provincia productora de hidrocarburos", Jungels puso de relieve los "progresos reales" en el armado de la ingeniería básica para la explotación, que incluye el FEED (Front End Engineering Design).

Como "factor negativo", sin embargo, mencionó el colapso del precio del petróleo de la últimos dos años, "con sus consecuencias para el flujo de caja de los socios actuales y potenciales".

No obstante, concluyó, "una evaluación del valor de Rockhopper debe tener en cuenta tanto nuestra sólida posición financiera con dinero en efectivo en el balance general, y nuestro potencial para generar flujo de efectivo a través de la producción en Sea Lion en algún momento", aunque se espera para ello una suba de los precios del petróleo.

domingo, 22 de mayo de 2016

USS Iwo Jima iba a reemplazar al HMS Invincible si era hundido


No tan neutral, después de todo: Ronald Reagan hizo planes secretos para prestar buque de guerra de EE.UU. a Gran Bretaña si perdían un portaaviones durante la Guerra de las Malvinas
Revelación hecha por el ex secretario de la Armada EE.UU. John Lehman
Reagan habría cedido el uso del buque de guerra de Gran Bretaña anfibio USS Iwo Jima debe dañar haber llegado a cualquiera o HMS Invincible HMS Hermes
EE.UU. fue oficialmente neutral durante el conflicto de dos meses
Por GRAHAM SMITH | MailOnline

   

Ronald Reagan hizo planes secretos para prestar un buque de guerra de Gran Bretaña EE.UU. si perdía un portaaviones durante la Guerra de las Malvinas, que ha surgido.
El entonces presidente estaba dispuesto a apoyar la primera ministra Margaret Thatcher a pesar de los EE.UU. siendo oficialmente neutral durante el conflicto de 1982.
La impresionante revelación fue hecha por John Lehman, ex secretario de la Armada de EE.UU., el Instituto Naval de EE.UU. el martes.
Reagan habría prestado Bretaña el uso del buque de guerra anfibio USS Iwo Jima debe dañar haber llegado a cualquiera o HMS Invincible HMS Hermes, que la Royal Navy había desplegado para defender las islas de las fuerzas argentinas.


Estrechos vínculos: Ronald Reagan hicieron planes secretos para prestar Margaret Thatcher un buque de guerra EE.UU. si Gran Bretaña perdió un portaaviones durante la Guerra de las Malvinas, que ha surgido


Préstamo: Sr. Reagan habría entregado Bretaña el uso del buque de guerra anfibio USS Iwo Jima (en la foto) debe dañar haber llegado a cualquiera o HMS Invincible HMS Hermes, que la Royal Navy había desplegado a las Malvinas

El Sr. Lehman dijo que él formuló los planes de estar detrás de la señora Thatcher con el secretario de Defensa Caspar Weinberger tras una solicitud británica.
Reagan se dice que ha aprobado su propuesta sin dudarlo, le dice al Sr. Lehman: 'Dar Maggie todo lo que necesita para seguir adelante con ella.'
Los planes fueron puestos juntos en completo secreto.

Sr. Lehman dijo: 'Nos interesa dejar al Departamento de Estado, a excepción de [Secretario de Estado Al] Haig, fuera de él.
"Al igual que en la mayor parte de las peticiones de los británicos en el momento, que era una solicitud informal en un" qué pasaría si "la base, la marina de guerra de la marina de guerra. '
Ambos HMS Invincible o HMS Hermes fueron equipados para manejar cinco verticales Sea Harrier de despegue armados con misiles Sidewinder estadounidense.


HMS Invincible fue uno de los dos portaaviones desplegados para defender las Malvinas de las fuerzas argentinas. Ella fue dado de baja en 2005


Royal Marines participan en un ejercicio a bordo del HMS Hermes durante el conflicto de las Malvinas

Estas especificaciones hacen el USS Iwo Jima un reemplazo ideal ya que, aunque principalmente un porta-helicópteros, que era capaz de operar la versión de EE.UU. del Sea Harrier.
Es probable que la nave habría sido atendido por una mezcla de marinos estadounidenses retirados y privados que están familiarizados con los sistemas operativos de la nave.
Almirante James 'Ace' Lyson, comandante de la Segunda Flota de EE.UU. en 1982, ayudó a planear el posible despliegue de un buque de EE.UU. en el Atlántico Sur.
Ahora retirado, dijo: "Decidimos que el USS Iwo Jima sería la nave que sería el más fácil para los británicos para operar y haría para una transferencia sin problemas.
'También se identificaron "asesores" del contrato que estarían a bordo para ayudar a los británicos con algunos de los sistemas.'
La revelación se produce como de las relaciones diplomáticas entre Gran Bretaña y Argentina alcanzan su punto más bajo desde la guerra.
Malvinas residentes han anunciado planes para un referéndum el próximo año en un intento por defenderse de las reclamaciones argentinas al territorio, que se han vuelto más vocal en torno a los 30 años de conflicto.
La semana pasada, David Cameron participó en una fila de pie extraordinaria con el presidente de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner sobre el futuro de los Falkands.
El líder de América del Sur apareció para intentar empujó un paquete de relleno de documentos sobre la reclamación de su país al territorio británico en las manos del señor Cameron en la cumbre del G-20 en México.
Para su furia, el primer ministro se negó a aceptarlo - e insistió en que respeta las opiniones de los isleños, que quieren seguir siendo británicos.

jueves, 19 de mayo de 2016

Business as Usual: Malcorra esconde el reclamo argentino por más fondos

Malcorra: "Malvinas no es más el tema principal con Gran Bretaña"
La canciller dijo que Cristina Kirchner "sobreenfocó" el reclamo por la soberanía de la islas ante el Reino Unido. "Hay que explorar el diálogo", aseguró
iProfesional


La canciller Susana Malcorra afirmó que las Islas Malvinas no son más "el tema dominante" en la relación entre la Argentina y Gran Bretaña.
Señaló que las relaciones bilaterales con frecuencia son buenas en un 80% y malas en un 20%
"Queda claro que ese 20% tiene que ver con Las Malvinas. Pero en el largo plazo, podemos encontrar una solución", aseguró.
"Las órdenes del presidente Macri son concentrarse en el 80%. Necesitamos desarrollar la confianza", agregó y consideró que la gestión de la ex presidenta Cristina Kirchner se "sobreenfocó" en ese tema y sostuvo que la cuestión de la soberanía argentina sobre el archipiélago no debe "distraer la atención de temas bilaterales más significativos como el comercio y la inversión".
"La cuestión Malvinas está fijada por la Constitución Nacional, pero tenemos que explorar el diálogo y la asociación más allá de Malvinas", indicó al diario británico The Financial Times.
Además, ratificó que la Argentina no mantendrá relaciones diplomáticas directas con los habitantes de las islas autodenomiados "kelpers" pero se pronunció a favor de ser "flexible" con ellos.
"Creo que primero hay una cuestión de formalidad legal, que es que nuestro vínculo es con el Reino Unido y que, dicho sea de paso, el Reino Unido es quien representa los derechos de los isleños. Es decir que, desde lo formal, nosotros tenemos que mantener nuestro vínculo con el Reino Unido, inclusive por razones de legalidad internacional", señaló la canciller.
De todos modos, evaluó que "a medida que avanzan los tiempos, y hay un mayor reconocimiento a la participación de los pueblos, hay un mayor reconocimiento a la participación de la sociedad civil en distintas formas, uno puede ir pensando en opciones de aperturas. No tengo ninguna sobre la mesa en este momento".
"Pero sería flexible a decir: a ver, escuchemos y pensemos abiertamente", señaló la canciller en una entrevista publicada por un matutino porteño.
En ese sentido, dijo que su intención es "tratar de poner un poquitito de aceite sobre las aguas" y "pensar en la gente, en las personas".
Por último la canciller agregó que "una de las cosas que yo quiero resaltar es que, hoy por hoy, no hay ningún impedimento por parte de la Argentina en que los isleños tengan autorización para viajar y para volar en cualquier momento que necesiten, particularmente si hay una emergencia".




miércoles, 18 de mayo de 2016

Malcorra quiere encapsular y kelperizar las negociaciones para acceder a la ONU

El ajedrez de Macri: mover a Susana Malcorra sin entregar las Malvinas
La jugada para lograr protagonismo en la ONU. El temor a un acuerdo secreto con Gran Bretaña por la soberanía de las Islas.


Por Rodrigo Lloret | Perfil

Malcorra, candidata a suceder a Ban Ki-moon en la ONU. | Foto: Cedoc


El presidente Mauricio Macri está jugando por estas horas una crucial partida de ajedrez sobre el tablero mundial. Pero el deseo de impulsar la candidatura de Susana Malcorra para la Secretaría General de las Naciones Unidas podría tener un impensado impacto en el histórico reclamo argentino por la soberanía de las islas Malvinas.

Malcorra tiene una carrera brillante en la diplomacia de las Naciones Unidas, donde trabajó por 12 años. Fue directora de Operaciones del Programa Mundial de Alimentos entre 2004 y 2008. Luego fue secretaria general adjunta del Departamento de Apoyo a las Actividades sobre el Terreno, donde se desempeñó hasta 2012. Y, finalmente, se convirtió en la jefa de Gabinete del secretario general Ban Ki-moon, hasta el 10 de diciembre de 2015, cuando fue convocada por Macri para conducir el Palacio San Martín.

La jefa de la diplomacia argentina, no quedan dudas, tiene un gran aval para ser la sucesora del surcoreano desde el 1° de enero de 2016. Pero, para alcanzar su objetivo, Malcorra debe lograr dos condiciones: obtener la mayoría en el Consejo de Seguridad de la ONU y que ninguno de los miembros permanentes vote en contra. Si tan solo un país de los cinco grandes se opone, el camino de la canciller estará clausurado.

El mismo reglamento de la Asamblea General indica que el Consejo de Seguridad debe presentar al candidato para que luego sea votado en sesión privada y secreta. Por lo tanto, Malcorra solo podrá ser secretaria general de las Naciones Unidas si Estados Unidos, Gran Bretaña, Rusia, China y Francia la apoyan.

Y es en Gran Bretaña donde se plantea el principal obstáculo. ¿Por qué apoyaría el gobierno británico a una candidata de Argentina a convertirse en nada menos que la principal funcionaria del principal organismo internacional donde se discute la soberanía de las Malvinas?

Malcorra jura que ese tema no fue tratado en la reciente reunión que mantuvo con su colega británico, Philip Hammond. En cambio, aclaró que solo se avanzó en los temas en común: cooperación en el Atlántico Sur, la promoción de inversiones y lucha contra el crimen organizado. Ambos cancilleres se encontraron el pasado 4 de julio en Londres y la reunión representó el primer encuentro entre funcionarios de tan alto nivel de Argentina y Gran Bretaña en 15 años.

Curiosamente, la cumbre se produjo muy pocos días antes de que Argentina oficializara que Malcorra competirá por la ONU.

Es en ese marco, donde hay que prestar atención a las recientes declaraciones que Malcorra hizo a la prensa, en particular, una extensa entrevista que concedió al diario Clarín en Londres, donde la canciller ha pasado los últimos días.

La estrategia de Malcorra sobre Malvinas podría resumirse en dos puntos:

1. Encapsular Malvinas (una fórmula que recuerda la figura del “paraguas” utilizada por el menemismo)

“(Con Gran Bretaña) tenemos lo que yo como ingeniera digo, el principio de Paretto: hay un 80% de cosas en las cuales estamos de acuerdo y siempre hay un 20% en el cual no estamos tan de acuerdo. La ventaja con Gran Bretaña es que sabemos cual es ese 20%: son las Malvinas. Entonces, en lugar de dedicar todo nuestro tiempo a ese 20%, vamos a trabajar y producir resultados en el 80%. En el caso de Malvinas, nosotros tenemos un mandato claro, definido por la Constitución. Entonces ni siquiera hay un signo de pregunta respecto de si esto es o no es un tema prioritario para nosotros. Pero también reconocemos que, con esta retórica enormemente agresiva que hemos tenido en los últimos tiempos, no se ha avanzado en ningún resultado concreto, no nos ha servido a los efectos de estar más cerca de una solución”.

2. Sumar a los kelpers a la mesa de negociación (algo que también hizo el menemismo)

“A medida que avanzan los tiempos, y hay un mayor reconocimiento a la participación de los pueblos, hay un mayor reconocimiento a la participación de la sociedad civil en distintas formas, uno puede ir pensando en opciones de aperturas. No tengo ninguna sobre la mesa en este momento. Pero sería flexible a decir: ‘a ver, escuchemos y pensemos abiertamente’. (…) Vamos a pensar en la gente, en las personas. Una de las cosas que yo quiero resaltar es que, hoy por hoy, no hay ningún impedimento por parte de la Argentina en que los isleños tengan autorización para viajar y para volar en cualquier momento que necesiten, particularmente si hay una emergencia. Pero, de repente, hay cosas que podemos hacer para flexibilizar y facilitar eso aún más. Entonces parte de lo que debemos trabajar en los próximos meses es precisamente en que cosas puntuales. Que pueden ser pequeñas grageas. Nada va a ser una enorme política de estado, podemos trabajar para facilitar esta apertura”.

No está mal, nada mal, que se recuperen las relaciones con Gran Bretaña. Argentina debe superar el conflicto más importante para su diplomacia a través del diálogo. Pero tratándose de un tema tan importante, no debe quedar ninguna duda de lo que se está negociando.

Algo de eso planteó recientemente el ex canciller Dante Caputo en una columna titulada “La oportunidad de Malcorra”, publicada en el diario La Nación. “La campaña que implica hablar con cada uno de los países para obtener el apoyo llevará, lógicamente, a un encuentro con el Reino Unido. Esa reunión no debería convertirse en una negociación en la cual la cuestión Malvinas esté en el centro de la discusión. La Argentina deberá reafirmar su posición sobre la solución diplomática y eventualmente avanzar hacia alguna idea innovadora que cuente con apoyo del gobierno y la mayoría de la oposición. Me parece indispensable que en esas reuniones estén presentes dos miembros de la oposición parlamentaria. Los motivos son sencillos de imaginar: todo acuerdo de palabra debe tener testigos que aseguren su cumplimiento y conviene que en un tema de esta naturaleza haya una representación más amplia que la del gobierno. Un procedimiento sencillo que dará seguridad para el Reino Unido y para la Argentina”.

Nunca antes en la historia de la ONU, un argentino logró convertirse en secretario general de las Naciones Unidas. Se trata de un lugar de mucho prestigio para nuestra diplomacia. Pero es también un premio que no debe lograrse a cualquier precio.

Macri debe pensarlo muy bien antes de mover a su Dama.