sábado, 15 de febrero de 2025

COAN: Analizando un F-16 B50 CFT para ataque marítimo de larga distancia


Una propuesta para el COAN: Un F-16 para ataque marítimo de largo alcance



Introducción

La Fuerza Aérea Argentina (FAA) ha adquirido 24 F-16 MLU de Dinamarca. La Aviación Naval Argentina (COAN) está evaluando qué hacer con sus 16 AMD Super Etendard en inventario (incluye los 11 Super Etendard antiguos y los 5 Super Etendard Modernizé más nuevos). Sin embargo, como la FAA adquirirá el F-16, se podría pensar en una propuesta a la COAN para que, en lugar de insistir en continuar con el Super Etendard, ¿por qué no intentar comprar algún nuevo F-16 B50/52+ bien perfilado con capacidad de ataque antibuque completo y de largo alcance? Resulta en un avión con una enorme capacidad de ataque, con alcance extendido, compatible en muchos aspectos con las aeronaves que tendrán en inventario la Fuerza Aérea, entre muchas bondades. Exploremos esta idea. La línea de razonamiento sigue los siguientes supuestos:
  • El Super Etendard solo opera desde bases terrestres, lo que limita su capacidad de acercarse al objetivo de manera autónoma, a menos que reciba reabastecimiento en vuelo con KC-130, como sucedió durante el ataque al HMS Invincible.
  • Los costos reales para obtener repuestos y realizar el mantenimiento en el futuro tienden a ser extremadamente altos sino imposibles.
  • El F-16, ya adquirido por la Fuerza Aérea Argentina (FAA) y que se espera complete más escuadrones en el futuro, ayudará a estandarizar el mantenimiento y el entrenamiento entre ambas fuerzas, similar a lo que ocurrió anteriormente con los A-4 Skyhawks.
  • El F-16, equipado con tanques de combustible conformables (CFT), puede controlar gran parte del Mar Argentino, tal como es reconocido actualmente por la ONU (ver detalles abajo).
  • Los costos de adquirir un escuadrón de F-16, de manera especulativa, promedian alrededor de mil millones de dólares a través del programa de Ventas Militares al Extranjero (FMS) (ver detalles abajo).



Usuarios con capacidad de ataque naval

Varios países utilizan la plataforma F-16 en funciones que incluyen capacidades de ataque aire-mar, utilizando bombas guiadas por láser (LGB) y misiles antibuque (AShM) como parte de su armamento estándar. Aquí hay algunos ejemplos notables:


1. Estados Unidos

- Armas: La Fuerza Aérea de EE. UU. utiliza F-16 capaces de transportar LGB y varios AShM como el AGM-84 Harpoon.
- Rol: Si bien se utilizan principalmente en capacidades polivalentes, incluida la superioridad aérea y el ataque terrestre, los F-16 están equipados y entrenados para misiones de ataque marítimo.

 2. Israel

- Armas: La Fuerza Aérea de Israel equipa sus F-16 con una variedad de municiones guiadas con precisión, incluidas LGB y misiles antibuque autóctonos como el Gabriel.
- Rol: Israel utiliza los F-16 en una capacidad de múltiples funciones, incluido un énfasis significativo en el ataque marítimo debido a la importancia estratégica del Mar Mediterráneo.

 3. Turquía

- Armas: Los F-16 turcos están equipados con LGB y misiles Harpoon para operaciones marítimas.
- Rol: Turquía utiliza F-16 para una variedad de misiones, incluido el ataque marítimo, dada su extensa costa y sus intereses marítimos estratégicos en los mares Egeo y Mediterráneo.

 4. Grecia

- Armas: Los F-16 griegos pueden transportar LGB y misiles Harpoon, lo que enfatiza su capacidad para llevar a cabo misiones de ataque marítimo.
- Rol: la flota F-16 de Grecia tiene varias funciones, incluida la interdicción y defensa marítima, debido a la distribución geográfica del país con numerosas islas y fronteras marítimas importantes.

 5. Singapur

- Armas: La Fuerza Aérea de la República de Singapur (RSAF) equipa sus F-16 con LGB y misiles Harpoon.
- Rol: Singapur, como pequeña nación insular con importantes intereses marítimos, utiliza F-16 tanto para misiones de defensa aérea como de ataque marítimo para proteger sus aguas y rutas marítimas.

 6. Corea del Sur

- Armas: La Fuerza Aérea de la República de Corea (ROKAF) utiliza F-16 con LGB y misiles Harpoon para funciones de ataque marítimo.
- Papel: La posición estratégica de Corea del Sur y las amenazas marítimas de la vecina Corea del Norte requieren una sólida capacidad de ataque marítimo.

 7. Egipto

- Armas: Los F-16 egipcios están equipados con LGB y misiles Harpoon para misiones de ataque marítimo.
- Rol: Egipto utiliza los F-16 para diversas funciones, incluida la defensa de sus extensas costas a lo largo del Mediterráneo y el Mar Rojo.

8. Taiwán

- Armas: Los F-16 taiwaneses están equipados con LGB y misiles Harpoon para misiones de ataque marítimo.
- Rol: Taiwán utiliza los F-16 para diversas funciones, incluida la defensa de sus extensas costas a lo largo del estrecho de Taiwán con patrullas aérea de combate armados con Harpoon antes las crecientes amenazas chinas.




Estos países han integrado sus plataformas F-16 con una variedad de armamento que les permite realizar misiones de ataque marítimo de manera efectiva. La flexibilidad y adaptabilidad de la plataforma F-16 la hacen adecuada para una variedad de funciones, incluidas aquellas que requieren un ataque preciso a objetivos marítimos.


Uso de CFT

El uso de tanques de combustible conformados (CFT) en los F-16 para la función de ataque aire-mar varía según el país y los requisitos específicos de la misión. Los CFT aumentan la capacidad de combustible de la aeronave sin ocupar puntos de anclaje debajo de las alas, que pueden usarse para armas y sensores adicionales. A continuación se ofrece una descripción general de cómo algunos de estos países utilizan los CFT para funciones de ataque marítimo:

 1. Estados Unidos

- Uso de CFT: los F-16 estadounidenses generalmente no están equipados con CFT, ya que los usuarios principales (unidades de la Guardia Nacional Aérea y escuadrones en servicio activo) priorizan la flexibilidad y el rendimiento sobre el alcance extendido. Sin embargo, algunas funciones especializadas podrían considerar los CFT si un rango ampliado es crucial.
- Rol: Los conjuntos de misiones principales generalmente se llevan a cabo sin CFT, dependiendo de tanques de combustible externos si es necesario para operaciones extendidas.

 2. Israel

- Uso de CFT: Los cazas israelíes F-16I "Sufa" están equipados con CFT. La IAF utiliza CFT para ampliar el alcance operativo de sus F-16, lo cual es crucial para las misiones sobre el Mediterráneo y posibles operaciones más allá de sus fronteras inmediatas.
- Rol: Los CFT permiten a los F-16 israelíes llevar más armas y sensores al liberar puntos duros debajo de las alas, lo cual es ventajoso para misiones de ataque marítimo prolongadas.

 3. Turquía

- Uso de CFT: Los F-16 turcos no suelen utilizar CFT. Por lo general, dependen de tanques de combustible externos para una mayor autonomía.
- Rol: Si bien Turquía tiene importantes intereses marítimos, a menudo se prefieren las ventajas de flexibilidad y rendimiento sin CFT.

 4. Grecia

- Uso de CFT: Los F-16 griegos, específicamente el F-16 Block 52+ y el Block 70/72 Viper, están equipados con CFT.
- Rol: Los CFT se utilizan para ampliar el alcance y la resistencia de los F-16 griegos, lo que resulta beneficioso para las misiones de patrullaje marítimo y ataque en todo el Mar Egeo y más allá.

 5. Singapur

- Uso de CFT: La Fuerza Aérea de la República de Singapur equipa sus F-16 con CFT para mejorar su alcance y capacidad de carga útil.
- Rol: Los CFT son particularmente útiles para los F-16 de Singapur debido a la necesidad de operaciones de largo alcance en la región, mejorando sus capacidades de ataque marítimo.

 6. Corea del Sur

- Uso de CFT: Los F-16 de Corea del Sur, en particular el F-16 Block 52 y el Block 70/72, pueden equiparse con CFT.
- Rol: El uso de CFT amplía el alcance operativo y la resistencia de los F-16 de la ROKAF, lo cual es fundamental dadas las amenazas marítimas y la necesidad de amplias capacidades de patrullaje y ataque alrededor de la Península de Corea.



 7. Egipto

- Uso de CFT: Los F-16 Block 52 egipcios están equipados con CFT.
- Rol: Los CFT proporcionan un mayor alcance y resistencia, lo que permite a los F-16 egipcios realizar misiones de ataque marítimo de larga duración sobre el Mediterráneo y el Mar Rojo.

Limitaciones con el uso de CFT

Los tanques de combustible conformados (CFT) se introdujeron con el F-16 Block 50/52 y variantes posteriores. Aquí hay un desglose más detallado:

Bloques F-16 capaces de utilizar CFT

1. F-16 Bloque 50/52+

 - Introducción: Estos bloques introdujeron la capacidad de transportar CFT.
 - Características: Estas variantes vienen con aviónica mejorada, sistemas de radar (como el radar AN/APG-68(V)9) y la opción de montar CFT.
 - Usuarios: Países como Grecia y Turquía tienen aviones F-16 Block 50/52+ con CFT.

2. F-16 Bloque 60
 - Introducción: Esta variante avanzada, desarrollada para los Emiratos Árabes Unidos, incluye CFT como parte de su configuración estándar.
 - Características: El Bloque 60 incluye un radar AESA AN/APG-80, aviónica avanzada y otras mejoras.

3. F-16 Bloque 70/72 (Viper)
 - Introducción: La versión más nueva y avanzada del F-16, también conocida como F-16V (Viper), incluye capacidad CFT.
 - Características: esta variante cuenta con un radar AN/APG-83 AESA y aviónica mejorada, y está optimizada para los requisitos de la guerra moderna.
 - Usuarios: Países como Bahréin, Bulgaria y Eslovaquia están adquiriendo o han adquirido aviones F-16 Block 70/72.

Aumento de alcance y capacidad de ataque

Estimar el aumento del alcance de los F-16 equipados con tanques de combustible conformados (CFT) implica varios factores, incluido el perfil de la misión, la carga útil y la capacidad de combustible. Aquí hay una descripción general:

 Tanques de combustible conformados (CFT)
- Capacidad: Cada CFT en un F-16 puede contener aproximadamente 450 galones (1700 litros) de combustible, sumando un total de 900 galones (3400 litros) cuando se usan ambos tanques.
- Incremento en el alcance: el combustible adicional proporcionado por los CFT generalmente aumenta el alcance entre un 20% y un 30%, dependiendo de la configuración de la aeronave y el perfil de la misión.

Estimaciones del alcance para casos de referencia

- Sin CFT: el radio de combate básico de un F-16 sin CFT, que lleva una carga típica de armas y combustible, es de aproximadamente 500 millas náuticas (nm) para una misión de ataque.
- Con CFT: Agregar CFT aumenta este radio en un 20-30%, lo que resulta en un rango estimado de 600-650 nm (1,111/1204 km) para una misión de ataque.

Análisis de escenario


 Completamente cargado de armas (misión de ataque)
- Supuestos: El F-16 lleva una carga completa de armas aire-mar, incluidos AShM y LGB.
- Alcance: Con los CFT, el radio de impacto sería de aproximadamente 600-650 nm (1,111/1204 km) desde la base.

 Lleno sólo de combustible (misión de reconocimiento)
- Supuestos: El F-16 está configurado para una misión de reconocimiento, transportando provisiones externas mínimas y maximizando la capacidad de combustible interna y CFT.
- Alcance: el alcance máximo del ferry para un F-16 con CFT y tanques de caída externos puede exceder las 2000 nm (3,704 km). Para una misión de reconocimiento típica con algo de combustible de reserva, un radio operativo estimado sería de alrededor de 1.000 nm. (1,852 km)

 Bases operativas y alcance potencial

1. Base Aeronaval Comandante Espora
 - Misión de ataque: 600-650 nm (1,111/1204 km)
 - Alcance potencial: A lo largo de la costa central y norte argentina, alcanzando el sur de Brasil y el Atlántico Sur abierto.
 - Misión de reconocimiento: Hasta 1.000 nm (1,852 km)
 - Alcance potencial: Gran parte del Atlántico Sur, incluido el Océano Austral.

2. Base Naval Almirante Zar

 - Misión de ataque: 600-650 nm (1,111/1204 km)
 - Alcance potencial: Cubriendo una porción importante de la costa patagónica, incluidas las Islas Malvinas.
 - Misión de reconocimiento: Hasta 1.000 nm (1,852 km)
 - Alcance potencial: Extendiéndose profundamente hacia el Atlántico Sur y cubriendo la totalidad de las Islas Malvinas y más allá.

3. Base de Río Grande

 - Misión de ataque: 600-650 nm (1,111/1204 km)
 - Alcance potencial: Abarcando la costa sur patagónica, las Islas Malvinas y llegando hasta la Península Antártica.
 - Misión de reconocimiento: Hasta 1.000 nm (1,852 km)
 - Alcance potencial: Extendiéndose hacia el Atlántico Sur, cubriendo toda la región de las Islas Malvinas y hacia la zona de convergencia antártica.




Con los CFT, el alcance y la flexibilidad operativa del F-16 mejoran significativamente, lo que lo convierte en una plataforma formidable para misiones de ataque y reconocimiento desde las bases navales clave de Argentina. Este alcance ampliado permite una mayor cobertura del Atlántico Sur, zonas marítimas críticas e incluso operaciones potenciales cerca de las Islas Malvinas.


Propuesta para la Aviación Naval Argentina: Transición al Bloque F-16 50/52+ para capacidades marítimas mejoradas


Objetivo:
Presentar una justificación estratégica, operativa y financiera para que la Aviación Naval Argentina (COAN) realice la transición de la envejecida flota AMD Super Étendard a la moderna plataforma F-16 Block 50/52+ con tanques de combustible conformados (CFT), enfatizando la superioridad en capacidades de ataque aire-mar y alcance operativo ampliado.

 Beneficios estratégicos

1. Capacidades mejoradas:
 - Aviónica y sistemas modernos: el F-16 Block 50/52+ está equipado con aviónica avanzada, sistemas de radar (AN/APG-68(V)9) y conjuntos de guerra electrónica, lo que proporciona un combate y una conciencia situacional superiores. eficacia.
 - Flexibilidad multifunción: a diferencia del Super Étendard, el F-16 puede realizar una transición perfecta entre misiones aire-aire, aire-tierra y aire-mar, mejorando la flexibilidad operativa.

2. Alcance operativo más largo:
 - Tanques de combustible conformados (CFT): los CFT amplían significativamente el alcance operativo del F-16 sin ocupar puntos de anclaje debajo de las alas, lo que permite que el avión lleve armas y sensores adicionales esenciales para misiones de ataque marítimo de largo alcance.

3. Estandarización con la Fuerza Aérea:
 - Interoperabilidad: La adquisición de F-16 tanto para la AAF como para la ANA garantiza la interoperabilidad, facilitando operaciones conjuntas, infraestructura de mantenimiento compartida, programas de capacitación y apoyo logístico.
 - Entrenamiento y tácticas comunes: los pilotos y el personal de tierra pueden beneficiarse de un programa de entrenamiento unificado, mejorando la competencia y reduciendo el tiempo y el costo asociados con el entrenamiento en diferentes plataformas.


 Ventajas operativas


1. Capacidad superior de ataque marítimo:
 - Integración avanzada de armas: el F-16 Block 50/52+ puede transportar una amplia gama de misiles antibuque (AShM) modernos, como el AGM-84 Harpoon, así como bombas guiadas por láser (LGB). para ataques de precisión contra objetivos marítimos. Asimismo, se abre la opción de integrar el AShM Gabriel israelí que ya se encuentra operativo en Israel. Taiwán y Corea del Sur podrían también presentar variantes de sus AShM para ser integrados en el sistema de armas.
 - Supervivencia y eficacia: Equipado con sistemas de contramedidas de última generación y capacidades de furtividad, el F-16 ofrece una mayor capacidad de supervivencia en entornos disputados en comparación con el Super Étendard.

2. Mayor capacidad de carga útil:
 - Flexibilidad de armamento: con más puntos de apoyo y mayor capacidad de carga útil, el F-16 puede transportar una combinación de misiles, bombas y tanques de combustible, brindando a los planificadores de misiones más opciones y capacidades para operaciones complejas.

3. Mantenimiento y confiabilidad:
 - Historial comprobado: La plataforma F-16 tiene un historial comprobado de confiabilidad y facilidad de mantenimiento, respaldado por una cadena de suministro global y una amplia base de usuarios, lo que garantiza una preparación operativa sostenida.


 Consideraciones financieras y logísticas


1. Rentabilidad:
 - Costos reducidos de capacitación y mantenimiento: la estandarización de la flota con los F-16 de la FAA puede generar ahorros significativos en capacitación, mantenimiento y logística al aprovechar las economías de escala.
 - Modernización y ciclo de vida: invertir en nuevos aviones F-16 Block 50/52+ proporciona un ciclo de vida operativo más largo y protección contra la obsolescencia en el futuro, lo que reduce la necesidad de actualizaciones y revisiones frecuentes.

2. Asociaciones económicas y estratégicas:
 - Ventas militares en el extranjero (FMS): la adquisición de F-16 a través del programa FMS de EE. UU. puede proporcionar condiciones de financiación favorables, acceso a la última tecnología y acuerdos de soporte a largo plazo.
 - Influencia regional: Modernizar el ANA con F-16 mejora la postura de defensa regional de Argentina y demuestra un compromiso para mantener una fuerza de aviación naval capaz y moderna.

Conclusión

La transición al F-16 Bloque 50/52+ representa una decisión estratégica, operativa y financieramente sólida para la Aviación Naval Argentina. Las capacidades avanzadas, el alcance extendido y la interoperabilidad con la Fuerza Aérea brindan una solución integral para mejorar las capacidades de defensa marítima de Argentina. Al adoptar la plataforma F-16, ANA no sólo modernizará su flota sino que también garantizará eficacia operativa y preparación a largo plazo en un entorno estratégico en rápida evolución.



Próximos pasos:


1. Estudio de viabilidad detallado: Realizar un estudio integral sobre la viabilidad y los costos asociados con la transición al Bloque F-16 50/52+.
2. Participación de las partes interesadas: colaborar con las partes interesadas clave, incluido el Ministerio de Defensa, para discutir las ventajas estratégicas y asegurar las aprobaciones y la financiación necesarias.
3. Negociaciones de asociación: iniciar conversaciones con el gobierno de EE. UU. y Lockheed Martin para posibles acuerdos de compra, programas de capacitación y paquetes de soporte.

Con la presentación de esta propuesta, la Aviación Naval Argentina puede dar un paso significativo hacia el logro de una fuerza de ataque marítimo moderna, capaz y flexible.



Costos estimados de adquisición de un escuadrón de ataque marítimo con CFT

Adquirir un escuadrón de aviones F-16 Block 50/52+ con capacidades completas de ataque aire-mar, incluidos tanques de combustible conformados (CFT), implica múltiples consideraciones de costos. Aquí hay una evaluación completa de los costos:

 1. Costos de adquisición de aeronaves

El costo unitario de un F-16 Block 50/52+ varía según la configuración, el equipo adicional y las condiciones del mercado. Sin embargo, un costo unitario promedio se puede estimar de la siguiente manera:

- Costo unitario: Aproximadamente entre 50 y 60 millones de dólares por avión, incluyendo estructura, motores, aviónica y equipo estándar.

Para un escuadrón (normalmente 12 aviones):
- Costo total de la aeronave: 50 millones de dólares x 12 = 600 millones de dólares (extremo inferior)
- Costo total de la aeronave: $60 millones x 12 = $720 millones (extremo superior)

 2. Sistemas y equipos de armas

Equipar la aeronave con las armas y sistemas necesarios para la capacidad de ataque aire-mar:

- Misiles aire-mar (por ejemplo, AGM-84 Harpoon): 1,2 millones de dólares por misil.
- Bombas guiadas por láser (LGB): aproximadamente 100.000 dólares por bomba.
- Sistemas de guerra electrónica y contramedidas: aproximadamente 5 millones de dólares por avión.

Costo estimado para un escuadrón:
- Misiles: 24 misiles x 1,2 millones de dólares = 28,8 millones de dólares
- LGB: 48 bombas x 100.000 dólares = 4,8 millones de dólares
- EW Systems: 12 x 5 millones de dólares = 60 millones de dólares

 3. Tanques de combustible conformes (CFT)

Los CFT aumentan el costo general, pero son cruciales para misiones de largo alcance:

- Costo por avión: Aproximadamente entre 2 y 3 millones de dólares.
- Costo total de CFT para 12 aeronaves: 12 x $2,5 millones (promedio) = $30 millones

 4. Capacitación e infraestructura

Capacitar a pilotos y personal de tierra, así como establecer la infraestructura necesaria:

- Capacitación de pilotos: aproximadamente entre 1 y 2 millones de dólares por piloto.
- Capacitación del personal de tierra: aproximadamente 0,5 millones de dólares por técnico.
- Infraestructura y Simuladores: $50 millones
- Modernización de las BAEN Comandante Espora: 30 millones USD (mínimo)

Para un escuadrón:
- Formación de pilotos (24 pilotos): 24 x 1,5 millones de dólares (promedio) = 36 millones de dólares
- Capacitación del personal de tierra (36 técnicos): 36 x 0,5 millones de dólares = 18 millones de dólares
- Infraestructura: $50 millones

 5. Mantenimiento y soporte

Configuración de mantenimiento inicial y repuestos:

- Repuestos iniciales y soporte logístico: aproximadamente entre 50 y 100 millones de dólares.
- Contratos de Mantenimiento (primeros años): $20 millones por año.

 6. Costos varios

Los costos adicionales que podrían surgir incluyen gastos de logística, transporte y administrativos:

- Costos varios estimados: entre 20 y 30 millones de dólares.

 Resumen de costos estimados
- Adquisición de aeronaves: 600-720 millones de dólares
- Armas y equipamiento: 93,6 millones de dólares.
- CFT: $30 millones
- Capacitación e Infraestructura: $134 millones
- Mantenimiento y soporte: 70-100 millones de dólares (primeros años)
- Costos varios: 20-30 millones de dólares

Costo total estimado:
- Extremo inferior: 947,6 millones de dólares
- Extremo superior: 1.077 millones de dólares

Adquirir un escuadrón de aviones F-16 Block 50/52+ con plena capacidad de ataque aire-mar y CFT para la Aviación Naval Argentina es una inversión importante, estimada entre aproximadamente $917,6 millones y $1.047 millones. Esta inversión cubre la aeronave, armamento, entrenamiento, infraestructura, mantenimiento inicial y otros costos asociados. Esta estimación proporciona una comprensión integral para que los tomadores de decisiones evalúen la viabilidad y los beneficios estratégicos de dicha adquisición.


jueves, 13 de febrero de 2025

Logística: La repercusión del hundimiento del Atlantic Conveyor

En Sea King Rescue de Robert Taylor, helicópteros transportan a los supervivientes del Atlantic Conveyor después de que dos misiles Exocet argentinos lo impactaran el 25 de mayo de 1982. La pérdida del buque portacontenedores tendría repercusiones de gran alcance para las fuerzas británicas que combatían en la Guerra de Malvinas.

Un fracaso en Malvinas

En medio de una guerra inesperada, las fuerzas británicas perdieron uno de sus activos más valiosos—el buque de carga cargado Atlantic Conveyor—en gran parte debido a la falta de previsión.
Por Steven Iacono || Naval Institute

Historia Naval || Volumen 36, Número 2

Rara vez en los anales de la historia militar la pérdida de un solo barco, especialmente un buque mercante, ha tenido un impacto tan grande en el curso de la batalla como lo tuvo el hundimiento del SS Atlantic Conveyor durante la Guerra de Malvinas. En abril de 1982, Argentina invadió las Malvinas, que habían sido una colonia británica por casi 150 años. Después de décadas de posicionarse para luchar una guerra en Europa junto a sus aliados occidentales, Gran Bretaña estaba mal preparada para luchar sola a 8.000 millas de sus costas.

Cargando un buque portacontenedores para la guerra



Protegidos por contenedores de carga apilados, ocho jets Harrier de la Fleet Air Arm y seis de la Royal Air Force, así como helicópteros Chinook y Wessex, llenan la cubierta del Atlantic Conveyor en ruta a las Malvinas. Cuando el barco fue alcanzado, se perdieron tres de los grandes Chinook, seis helicópteros Wessex y valiosos suministros y equipos para las tropas en tierra.
Crédito: Archivo de Fotos del Instituto Naval de EE.UU.

La Royal Navy había sido despojada de una cantidad significativa de aviones embarcados y componentes de alerta temprana aerotransportada (AEW) durante las décadas de 1960 y 1970. De hecho, de los dos portaaviones en servicio, uno (HMS Invincible) ya había sido vendido a Australia aunque aún no transferido, y el otro (HMS Hermes) estaba programado para ser desmantelado. La capacidad de carga también era limitada, y varias docenas de barcos mercantes fueron incorporados al servicio para unirse a la flota enviada para recuperar las Malvinas. Uno de ellos, el Atlantic Conveyor, un buque portacontenedores civil de 15.000 toneladas y 12 años de antigüedad, desempeñaría un papel importante en el esfuerzo. La Junta de Investigación sobre su pérdida arrojaría luz sobre lecciones difíciles que aún son relevantes para las fuerzas navales actuales.

Después de que estalló la guerra, el Atlantic Conveyor fue inicialmente adaptado para funcionar como una cubierta de vuelo adicional para helicópteros y jets Harrier de despegue y aterrizaje vertical. Sin embargo, pronto se determinó que sus bodegas serían necesarias para la masiva operación logística requerida para combatir en el Atlántico Sur. Al final, se cargaron a bordo 14 Harrier (8 Sea Harrier de la Fleet Air Arm y 6 Harrier GR.3 de la Royal Air Force), 5 helicópteros pesados Chinook HC.1, 6 helicópteros Wessex HU.5, varios cientos de bombas de racimo para aeronaves y 80 toneladas de queroseno. También se almacenaron tiendas de campaña para varios miles de tropas junto con sus cocinas y sanitarios asociados, suministros de desalinización, vejigas portátiles de combustible, botes pequeños, equipo de manipulación de material, generadores, planchas metálicas para la creación de una base terrestre para los Harrier, misiles, municiones y numerosos otros suministros vitales.

Los dos portaaviones de la Royal Navy juntos embarcaban solo 20 Harrier; los 14 adicionales transportados en el Atlantic Conveyor aumentaban su número en un 70 por ciento. Estos eran los únicos aviones de ala fija británicos disponibles para operaciones en portaaviones durante la guerra. Se podría argumentar que el transporte era uno de los barcos más importantes de la flota en términos de capacidad de combate; sin embargo, no estaba equipado con ninguna capacidad de autodefensa. Esto tendría repercusiones fatales que resonarían en toda la campaña terrestre que se avecinaba.

El papel mortal del Exocet

Cerca de finales de mayo de 1982, las fuerzas británicas y argentinas habían estado involucradas en operaciones de combate por casi un mes. Dos fragatas Type 21 de la Royal Navy, HMS Ardent y Antelope, habían sido hundidas junto con el destructor de misiles guiados HMS Sheffield. El crucero argentino General Belgrano también había sido hundido, y casi dos docenas de aviones argentinos habían sido derribados. La pérdida del Sheffield era particularmente preocupante porque había sido alcanzado por un misil Exocet, contra el cual la Royal Navy tenía capacidades defensivas limitadas, y se creía que Argentina poseía cinco de estos misiles.

La versión francesa AM39 Exocet viajaba a casi la velocidad del sonido a una altitud rasante, pesaba casi 1.500 libras y transportaba una ojiva de 364 libras. Solo dos buques de guerra británicos en el grupo de batalla llevaban el sistema de misiles Sea Wolf, diseñado para derribar objetivos de alta velocidad y baja altitud. Irónicamente, se le atribuyó solo cinco derribos de los 117 aviones argentinos perdidos durante la guerra, mientras que los cañones navales y el fuego de armas ligeras fueron responsables de siete derribos. A lo largo de la flota, ametralladoras operadas manualmente fueron sujetadas a las barandillas de los barcos como una última línea de defensa contra amenazas de misiles y aeronaves.

El 25 de mayo, un día patriótico en Argentina, se esperaba un esfuerzo intensificado del enemigo. Por la tarde, el destructor de misiles guiados HMS Coventry fue hundido tras ser alcanzado por múltiples bombas aéreas no guiadas. Más tarde ese día, se detectaron emisiones de radar Agave provenientes de aviones de ataque Super Étendard de fabricación francesa, los únicos aviones argentinos conocidos capaces de transportar el misil Exocet. Los barcos británicos dispararon cohetes de chaff como señuelos y realizaron maniobras evasivas. Dos misiles Exocet pasaron a través o por debajo de la nube de chaff lanzada por la fragata HMS Ambuscade. Luego, los misiles se fijaron en el siguiente objetivo en su trayectoria: el Atlantic Conveyor, impactándolo.

Aproximadamente tres minutos pasaron entre la detección del radar y el impacto. Aunque el transporte permaneció a flote durante tres días, el incendio dentro de él era incontrolable y la detonación de materiales explosivos bajo cubierta finalmente arrancó su proa. Doce vidas se perdieron y el barco se hundió con tres Chinook y seis helicópteros Wessex, junto con sus valiosos suministros, aún a bordo. Afortunadamente, los 14 Harrier habían sido trasladados a los portaaviones unos días antes.

El Atlantic Conveyor era una parte vital del esfuerzo de guerra, pero sucumbió a la falta de previsión. La ausencia total de aviones de alerta temprana dentro de la flota significaba que los barcos de patrulla avanzada (picket ships) eran necesarios para proporcionar advertencias de ataques aéreos, dejándolos en posiciones expuestas. Además, colocar tanto equipo importante y el 70 por ciento de los aviones de ala fija disponibles en un solo buque, que también estaba repleto de explosivos y combustible, fue altamente cuestionable.

La velocidad y eficiencia con la que los barcos civiles fueron llevados al servicio militar fue admirable, pero no proporcionarles capacidad de autodefensa resultó costoso en vidas y material.


Investigaciones sobre la Pérdida

El informe oficial de la Junta de Investigación sobre la pérdida del Atlantic Conveyor se haría público, y algunos de los hallazgos causarían furor. En las etapas iniciales de planificación de la respuesta británica a la invasión de las Malvinas, se señaló que el buque de transporte estaría en la zona de combate, pero esto no llevó al Ministerio de Defensa (MoD) a proporcionarle ninguna capacidad de autodefensa, como cohetes de chaff o cañones. Aunque esto se atribuyó a un descuido debido al tiempo limitado y la necesidad de actuar con rapidez, también hubo controversia dentro del ministerio sobre si era legal hacerlo.

El personal británico corre hacia la costa de Bluff Cove poco después de que el buque de desembarco Sir Galahad, cargado con soldados de la Guardia de Gales, fuera alcanzado por bombas de 500 libras. La pérdida de los helicópteros Chinook a bordo del Atlantic Conveyor llevó a la decisión de trasladar tropas por mar hasta la ensenada, en el lado este de la Isla Soledad.
Crédito: Alamy


Otro informe desclasificado del MoD dirigido al Primer Ministro señaló que el barco carecía de capacidades de autodefensa y que era casi imposible interceptar un Exocet excepto directamente en la línea de visión del buque objetivo. Además, una vez que los Harrier habían sido desembarcados, aparentemente el Atlantic Conveyor ya no era considerado un activo de alto valor, aunque todavía transportaba una enorme cantidad de suministros, helicópteros, combustible, municiones y equipos. Otras ambigüedades sobre cómo se almacenaban los explosivos militares y materiales inflamables a bordo, así como la falta de conocimiento y/o entrenamiento de la tripulación civil sobre sus características, también fueron señaladas en el informe de la Junta de Investigación.

Repercusiones del Hundimiento

Durante las semanas posteriores al hundimiento del Atlantic Conveyor, las fuerzas terrestres británicas sintieron agudamente la pérdida del barco. El movimiento de tropas a través de la isla Soledad (East Falkland), que abarcaba casi 50 millas hasta la capital Puerto Argentino (Port Stanley), estaba destinado a realizarse utilizando los helicópteros de transporte del buque, especialmente los pesados Chinook.

Sin la mayoría de ellos, los paracaidistas y los Royal Marines se vieron obligados a llevar a cabo lo que se conocería como el "Gran Yomp" (yomp es un término coloquial para una larga marcha con equipo completo), lo que probablemente extendió la duración de la guerra.

La escasez de helicópteros significó que hubo una constante disputa entre la necesidad de mover tropas frente a la necesidad de transportar suministros y municiones. Como ejemplo logístico, se calculó que usar helicópteros Sea King de menor capacidad requeriría 85 misiones individuales solo para mover una batería de artillería de seis cañones de 105 mm con 500 proyectiles por cañón.

El comandante de la Tercera Brigada de Comandos señaló que, en algunos momentos, sus cañones de artillería solo podían disparar 16 proyectiles al día debido a las limitaciones de reabastecimiento.

El clima en las Malvinas es notoriamente adverso, y al estar en el hemisferio sur, las islas estaban entrando en el otoño/invierno cuando comenzó el combate. Las temperaturas diarias en junio oscilaban entre 40°F (4°C) durante el día y cerca de la congelación por la noche, con vientos promedio de 19 mph (30 km/h).


Debido a la pérdida de los helicópteros Chinook, las fuerzas terrestres británicas se vieron obligadas a realizar una ardua marcha a través de la Isla Soledad, cargando mochilas sobrecargadas en un clima frío y húmedo. Este escuadrón de Royal Marines se está preparando para salir de patrulla, probablemente poco después de desembarcar en la bahía Ajax de la isla.
Crédito: Archivo Fotográfico del Instituto Naval de EE. UU.


Las carreteras principales generalmente no estaban pavimentadas, el terreno era rocoso y el suelo rara vez estaba completamente seco en esa época del año. Las condiciones fueron brutales, y muchos soldados sufrieron lesiones por frío que aún eran notables meses después de la guerra.

Era casi imposible mantenerse seco, y los pies mojados fueron un problema particular, lo que llevó a una gran incomodidad durante la larga marcha a través de la isla.

La pérdida de tiendas de campaña y equipo de apoyo a bordo del Atlantic Conveyor agravó las difíciles condiciones tanto para las tropas británicas como, posteriormente, para los prisioneros de guerra argentinos. En general, la pérdida de los helicópteros en el buque afectó gravemente la movilidad de las fuerzas terrestres.

Esto, en última instancia, llevaría a la decisión de transportar algunas tropas por mar a la costa este de la Isla Soledad. En Bluff Cove, ataques aéreos argentinos contra los barcos de desembarco mientras descargaban soldados provocaron la muerte de 51 militares británicos, heridas a varios más, la pérdida de un buque (RFA Sir Galahad) y daños a otros.

Los ataques aéreos en Bluff Cove representaron la mayor pérdida de vidas británicas en toda la guerra.

Deficiencias de inteligencia y diseño naval

La tarea de recapturar las Malvinas obligó a la Royal Navy a luchar una guerra con graves déficits en inteligencia militar, alerta temprana aerotransportada (AEW) y tecnología/diseño de buques—factores que jugaron un papel en el hundimiento del Atlantic Conveyor.

El almirante John Forster "Sandy" Woodward, comandante del grupo de portaaviones y batalla, declararía más tarde que se debía una deuda especial al Atlantic Conveyor, ya que detrás de él, el siguiente barco en la trayectoria de los misiles era el portaaviones HMS Hermes.

El daño o la pérdida de uno de los dos portaaviones podría haber cambiado el curso de la guerra.

La amenaza de los Exocet fue una preocupación constante. Cuando se supo a finales de mayo que Francia estaba en proceso de vender un cargamento de estos misiles a Perú, la primera ministra británica Margaret Thatcher imploró al presidente francés François Mitterrand que detuviera la venta, ya que se creía que Perú transferiría los misiles a Argentina.

Francia reanudaría la venta de armas a Argentina pocos meses después de la guerra, y en los años siguientes suministraría docenas de Exocet y Super Étendard.


El Memorial del Atlantic Conveyor en la Isla Soledad rinde homenaje a los 12 tripulantes que murieron como resultado del ataque al buque portacontenedores. La falta de capacidades de autodefensa de la embarcación y la ausencia de aviones británicos de alerta temprana durante el conflicto fueron factores clave en su pérdida.
Crédito: Alamy


Una advertencia no atendida

En 1979, el Primer Lord del Mar y Jefe del Estado Mayor Naval, el almirante Terence Lewin, dio una conferencia en la que señaló que los aviones de alerta temprana serían vitales en cualquier guerra futura.

Sin embargo, esto se dijo bajo la expectativa de que fueran aeronaves basadas en tierra, ya que el único buque de la Royal Navy capaz de operar aviones AEW (HMS Ark Royal) ya había sido dado de baja.

Tres años después, la Royal Navy fue enviada a la guerra sin aviones AEW ni suficientes misiles Sea Wolf.

La falta de alerta temprana permitió que los pilotos argentinos lanzaran sus misiles Exocet a solo 20 millas de distancia en el ataque al HMS Sheffield y a 22 millas en el ataque al Atlantic Conveyor—distancias extremadamente cortas en la guerra moderna.

Como se mencionó en un informe sobre defensa aérea, una fragata Type 21 como la HMS Ambuscade se esperaba que enfrentara modernos aviones a reacción de alta velocidad con solo el sistema de misiles Seacat y dos cañones de 20 mm operados manualmente, mientras que un buque de la Segunda Guerra Mundial del mismo tamaño estaba armado con más de dos docenas de cañones para derribar aviones de hélice.

Se estima que el sistema Seacat tenía solo un 10% de efectividad.

Además, el Ministerio de Defensa y el Tesoro Británico tendían a diseñar y construir buques pensando en el costo y la exportabilidad, lo que limitaba el armamento y las mejoras en radar, especialmente en la clase de fragatas que incluía a la Ambuscade, Ardent y Antelope.

Gran Bretaña había supuesto que una guerra futura sería contra fuerzas soviéticas cerca de sus costas, luchando junto a sus aliados de la OTAN.

En la primavera de 1982, la velocidad y eficiencia con la que se movilizaron barcos civiles para el servicio militar fue admirable, pero no equiparlos con defensas propias costó vidas y material.

El Atlantic Conveyor fue una pieza clave en el esfuerzo de guerra, pero sucumbió a una falta de previsión.


El rescate de los Sea King


Referencias

1. Keith Speed, Sea Change (Bath, UK: Ashgrove Press, 1982), 22.

2. Max Hastings and Simon Jenkins, The Battle for the Falklands (New York: W. W. Norton & Company, 1983), 11.

3. British Royal Navy, Board of Inquiry Report: Loss of SS Atlantic Conveyor (21 July 1982); David Brown, The Royal Navy and the Falklands War (Annapolis, MD: Naval Institute Press, 1987), 230.

4. Ministry of Defence white paper, “The Falklands Campaign: The Lessons,” 12 December 1982, 45.

5. Norman Friedman, The Naval Institute Guide to World Naval Weapons Systems (Annapolis, MD: Naval Institute Press, 1989).

6. John Woodward and Patrick Robinson, One Hundred Days (London, UK: Fontana Press, 1992), 298.

7. Margaret Thatcher, declassified communiqué, Telegram #311 (30 May 1982) to French President François Mitterrand, Margaret Thatcher Foundation, margaretthatcher.org.

8. “Paris, Breaking Ranks, Ends Argentina Arms Ban,” The New York Times, 11 August 1982; SIPRI Arms Transfers Database (data report generated for 1982 to 1992), sipri.org.

9. British Ministry of Defence, “Exocet Attack, 25th May,” to the British Prime Minister, 2 June 1982, the Margaret Thatcher Foundation, margaretthatcher.org.

10. British Royal Navy, Board of Inquiry Report: Loss of SS Atlantic Conveyor.

11. Kenneth Privratsky, Logistics in the Falklands War (Barnsley, UK: Pen & Sword Books Limited, 2014), 126.

12. Privratsky, Logistics in the Falklands War, 128.

13. Ian Speller, “Limited War and Crisis Management: Naval Aviation in Action from the Korean War to the Falklands Conflict,” Tim Benbow, ed., British Naval Aviation: The First 100 Years (Farnham, UK: Ashgate Publishing Limited, 2011), 171.

14. Climate and Average Weather Year Round in Falkland Islands, weatherspark.com.

15. Francis Golden, Thomas Francis, Deborah Gallimore, and Roger Pethybridge, “Lessons from History: Morbidity of Cold Injury in the Royal Marines during the Falklands Conflict of 1982,” Journal of Extreme Physiology and Medicine 2, no. 1 (December 2013): 23.

16. Nick Vaux, March to the South Atlantic (Barnsley, UK: Pen & Sword Books, 2007), 130–31.

17. Brown, The Royal Navy and the Falklands War, 302.

18. Woodward and Robinson, One Hundred Days, 78; Hastings and Jenkins, The Battle for the Falklands, 90.

19. Hastings and Jenkins, The Battle for the Falklands, 132.

20. Speed, Sea Change, 22.

21. Terence Lewin, “The Royal Navy: Present Position and Future Course,” Journal of the Royal Society of Arts 127, no. 5277 (August 1979): 561–75.

22. Brown, The Royal Navy and the Falklands War, 141, 228.

23. LCDR James Haggart, USN, “The Falkland Islands Conflict, 1982: Air Defense of the Fleet,” paper presented to the Marine Corps Command and Staff College, 2 April 1984 (Alexandria, VA: Defense Technical Information Center, 1984).

24. Alastair Finlan, “War Culture: The Royal Navy and the Falklands Conflict,” Stephen Badsey, Mark Grove, and Robert Havers, eds., The Falklands Conflict Twenty Years On: Lessons for the Future (New York: Taylor & Francis, 2005).

25. Speed, Sea Change, 19–20; Robert Gardiner, ed., Conway’s All the World’s Fighting Ships 1947–1982: The Western Powers (London: Conway Maritime Press, 1983), 166.

26. Gardiner, Conway’s All the World’s Fighting Ships 1947–1982: The Western Powers, 166.


martes, 11 de febrero de 2025

El derribo de Tom Lucero en San Carlos

Relato de Nicolás Kasanzew acerca del derribo del Teniente Lucero, el 25 de Mayo de 1982

El derribo del Teniente Lucero en el combate de San Carlos.
El 25 de Mayo del 82, tras ser blanco de un misil Rapier y haberse eyectado, Ricardo “Tom” Lucero cae al mar. La foto fue tomada desde la nave inglesa Fearless, la misma que él había atacado y que lo rescató de las aguas.
El sobrenombre se lo debía a sus cualidades de bondad y sencillez, en analogía con el famoso personaje de la novela de Harriet Beecher Stowe "La Cabaña del Tío Tom".
En la posguerra, imposibilitado de mantener a su familia con el magro retiro de Capitán de la Fuerza Aérea, debió dedicarse a la fumigación aérea, tarea que lo llevó a un accidente fatal.
Como a tantos otros de nuestros héroes, no supimos cuidarlo.
La foto fue tomada por Roy Gillingham a bordo del buque de asalto anfibio HMS Fearless.

domingo, 9 de febrero de 2025

LPD: clase Yushan, el mejor armado del Mundo

¿Ideal para el Teatro Malvinas?

Muelle de plataforma de desembarco (LPD) clase Yushan




 

El muelle de plataforma de aterrizaje clase Yushan ( chino :玉山級兩棲船塢運輸艦) es una clase de muelle de plataforma de aterrizaje construido por CSBC Corporation, Taiwán para la Armada de la República de China (ROCN). Están previstos cuatro barcos, uno de los cuales se botará en abril de 2021.

Descripción

Los barcos de la clase Yushan tienen una eslora de 153 m (502 pies), una manga de 23 m (75 pies) y su desplazamiento estándar es de 10.000  t (9.800 toneladas largas). La clase tiene un calado de 6,1 m (20 pies), una velocidad máxima de 21 nudos (39 km/h) y un alcance de 7.000 millas (11.000 km).

Los barcos pueden transportar varios APC anfibios AAV7 junto con 673 soldados. El barco también tiene una única cubierta de vuelo con dos hangares con capacidad para acomodar helicópteros Sikorsky UH-60 Black Hawk o los helicópteros navales Sikorsky SH-60 Seahawk.

La clase está inusualmente bien armada para una plataforma de aterrizaje con un cañón de 76 mm, dos Phalanx CIWS y dos lanzadores de misiles modulares de 8 misiles tierra-tierra Hsiung Feng II o 16 misiles tierra-aire Hai Chien . También tienen funciones de reducción de firma de radar y protección de pulso electromagnético.

El barco líder de esta clase costó 4.635 millones de dólares NTD (163 millones de dólares).

La clase está destinada a cumplir funciones tanto militares como humanitarias, como buque de mando para operaciones anfibias, nave nodriza para los pequeños barcos de desembarco de la ROCN y transporte logístico general capaz de abastecer islas sin instalaciones portuarias.


ROCS Yushan atraca en el astillero naval de Tsoying.

Descripción general de la clase
Nombre Clase Yushan
Constructores Corporación CSBC, Taiwán
Operadores Armada de la República de China
Precedido por ROCS Hsu Hai
En comisión 2023-presente
Planificado 4
Terminado 1
Características generales
Tipo Muelle de plataforma de desembarco
Desplazamiento 10.600 t (10.400 toneladas largas) estándar
Longitud 153 metros (502 pies)
Haz 23 m (75 pies)
Borrador 6,1 m (20 pies)
Velocidad 21 nudos (39 kilómetros por hora)
Rango 7.000 millas (11.000 kilómetros)
Capacidad Varios APC anfibios AAV7
Tropas 673
Armamento
  • 4 × lanzadores de misiles para 16 SSM Hsiung Feng II o 32 SAM Hai Chien
  • 1 cañón OTO Melara de 76 mm
  • 2 × 20 mm CIWS Phalanx
  • Cañón T-75 de 2 × 20 mm
Aviones transportados 2 × helicópteros Black Hawk o Seahawk
Instalaciones de aviación Cubierta de vuelo, dos hangares


Historia

La clase Yushan está destinada a mantener el inventario de los muelles de la plataforma terrestre de la ROCN en dos barcos. El barco líder de la clase llenará el vacío dejado por el retiro del ROCS Chung Cheng (anteriormente USS Comstock ), mientras que un segundo barco planeado reemplazará al ROCS Hsu Hai (anteriormente USS Pensacola ), que sirvió en la Armada de la República de China. desde 1999.

Los esfuerzos de diseño comenzaron a principios de 2015 y se dieron a conocer el 15 de mayo de 2016. La quilla del buque líder se colocó en junio de 2020. Yushan se botó en abril de 2021, a la ceremonia de lanzamiento asistieron la presidenta Tsai Ing-wen y el ministro de Defensa. Chiu Kuo-cheng . La presidenta Tsai describió el buque como un "hito" en el camino de Taiwán hacia la autosuficiencia en la construcción naval.

El primer barco de la clase, Yushan , comenzó sus pruebas en el mar el 7 de julio de 2022. El barco fue entregado el 30 de septiembre de 2022 por CSBC Corporation, Taiwán. Yushan entró en servicio en junio de 2023.



Buques de clase

 Número de banderín   Nombre   Constructor   Lanzado   Oficial   Estado   Nota 
LPD-1401 Yushan Corporación CSBC, Taiwán 12 de abril de 2021 19 junio 2023 Activo


Análisis del LPD Clase Yushan para Argentina en el Teatro de Operaciones Malvinas

El muelle de plataforma de desembarco (LPD) clase Yushan podría ser una opción interesante para Argentina dentro del teatro de operaciones de Malvinas, aunque presenta tanto ventajas como desventajas en este contexto estratégico.

✅ Ventajas:

1. Capacidad de transporte y desembarco

  • Puede transportar hasta 673 soldados y varios vehículos anfibios AAV7, lo que permitiría trasladar un contingente de infantería de marina y medios mecanizados en una eventual operación de refuerzo o defensa de las islas.
  • Su capacidad de operar en zonas sin infraestructura portuaria lo hace útil para reabastecer fuerzas en Malvinas, donde el terreno y las condiciones meteorológicas complican el apoyo logístico.

2. Autonomía y resistencia

  • Con un rango de 7.000 millas náuticas, puede operar sin necesidad de apoyo inmediato, lo que es clave considerando la distancia entre el continente y Malvinas (aprox. 350 millas náuticas).
  • Su velocidad de 21 nudos le da una capacidad de despliegue relativamente rápida en el Atlántico Sur.

3. Capacidad aérea y autodefensa

  • Dispone de dos hangares y una cubierta de vuelo que permite operar helicópteros UH-60 Black Hawk o SH-60 Seahawk, ideales para transporte de tropas, evacuación médica y reconocimiento.
  • Está fuertemente armado para su tipo, con:
    • Misiles antibuque Hsiung Feng II (16 en total)
    • Misiles antiaéreos Hai Chien (hasta 32)
    • Cañón OTO Melara de 76 mm
    • CIWS Phalanx de 20 mm para defensa antiaérea
    • Cañones T-75 de 20 mm

Esto lo hace más autónomo que otros LPD convencionales, que suelen depender de escoltas.

4. Versatilidad para operaciones militares y humanitarias

  • Puede actuar como buque de mando para operaciones anfibias o de evacuación médica en caso de conflicto o desastre natural.
  • Su capacidad de transporte y reabastecimiento lo hace útil para mantener una presencia sostenida en Malvinas en escenarios de crisis.

❌ Desventajas y desafíos:

1. Vulnerabilidad en un conflicto de alta intensidad

  • A pesar de su armamento, sigue siendo un buque de apoyo anfibio, no diseñado para combates prolongados contra fuerzas navales británicas con capacidades avanzadas (como submarinos nucleares, fragatas Type 23 con misiles Sea Ceptor y cazas F-35B).
  • Su supervivencia dependería de una flota de escolta, algo que Argentina actualmente no posee en cantidad suficiente.

2. Limitaciones en condiciones del Atlántico Sur

  • El estado del mar en el Atlántico Sur es extremo, lo que podría afectar las operaciones de desembarco y vuelo de helicópteros.
  • Aunque tiene reducción de firma de radar, no cuenta con sigilo avanzado, lo que lo haría detectable por los radares británicos en Malvinas.

3. Costos y adaptación

  • Su costo de 163 millones de dólares por unidad es relativamente accesible, pero Argentina enfrenta restricciones presupuestarias en materia de defensa.
  • Logística y mantenimiento: Requiere una infraestructura de apoyo y repuestos que no son estándar en la Armada Argentina.

📌 ¿Es viable para Argentina en Malvinas?

El LPD clase Yushan podría ser útil para Argentina en un escenario de operaciones en Malvinas, pero con importantes limitaciones. Sería ideal para transporte de tropas y apoyo logístico, pero su supervivencia en combate dependería de escoltas y superioridad aérea, algo que Argentina no tiene garantizado frente a la actual defensa británica en las islas.

Si Argentina lograra desarrollar una flota de escoltas adecuada (fragatas modernizadas y submarinos operativos), el Yushan podría ser una pieza clave para proyección de fuerzas y soberanía en el Atlántico Sur. De lo contrario, sería vulnerable a un ataque británico y difícil de operar sin superioridad aérea y naval.




ROCS Yushan durante su ceremonia de botadura


Misiles de defensa aérea Sky Sword 2

Bajocubierta de Yushan


Baños en el Yushan


Literas en Yushan


Quirófano en Yushan


ROCS Yushan en el ensayo del evento de celebración del Doble Décimo Día , 8 de octubre de 2023










miércoles, 5 de febrero de 2025

Operación Plum Duff: El aviador trasandino que rescató a los SAS


Imagen referencial. Un Sea King HC.4 de 825 Escuadrón Aéreo Naval despega después de trasladar, desde San Carlos a Darwin, a comandos de la compañía 42 de los Royal Marines (Photo by Paul Haley/ Crown Copyright. Imperial War Museums via Getty Images)IWM/Getty Images - Imperial War Museums

Operación Plum Duff. El aviador chileno que rescató a los comandos británicos que planeaban atacar la base aérea de Río Grande


LA NACION



Jorge Freyggang Campaña, ex oficial de la Fuerza Aérea de Chile, se hizo famoso por ser el primer piloto comercial en llegar a la Antártica; sin embargo, pocos –ni siquiera sus más cercanos- conocían su rol en la guerra de Malvinas


Daniel Avendaño y Mauricio Palma

Son casi las 11 de la noche y caen las primeras gotas sobre Gotemburgo. Solo dos chilenas, que promedian los 70 años, esperan frente al Stora Teatern, el centenario recinto del puerto sueco. Hace poco más de una hora que terminó el concierto de los Inti Illimani, y esperan tomarse una fotografía con los músicos.

Finalmente, aparecen los fundadores de la banda, Horacio Salinas y José Seves, que ya superan los 70 años y que no dudan en posar junto a sus compatriotas.

Es 21 de septiembre de 2023 y nos acercamos a Seves: le contamos que estamos escribiendo un artículo sobre el piloto Jorge Freyggang, hermano mayor de Renato, un saxofonista que estuvo en la banda durante diez años mientras estaban exiliados en Italia.

“Fuimos muy cercanos con Renato”, aclara el dueño del vozarrón emblemático del grupo.

También le señalamos que diversos documentos sindican a este excapitán de la Fuerza Aérea de Chile como uno de los represores de la dictadura chilena. Esta vez, José Seves -con cara contrariada- señala que jamás supo de esta historia. Nos dirá que es un episodio desconocido al interior de los Inti, como se le conoce a esta agrupación fundada en 1967 y que fuese una férrea promotora del gobierno socialista de Salvador Allende.

Dos semanas más tarde, el lunes 2 de octubre de 2023, y minutos antes de que el conjunto Amankay, integrado por holandeses y chilenos, se presente por primera vez en el teatro de la Universidad de Santiago, nos acercamos a Renato Freyggang y le preguntamos por su hermano Jorge y su rol en las sesiones de tortura en la base aérea de Temuco en 1973. El ex Inti Illimani, con semblante sereno, nos dice: “No tenía idea”, y luego agrega que le gustaría cooperar, saber si hay más antecedentes, y que no tendría problemas en reconocer que Jorge estuvo en eso. “En realidad, no me extraña, hubo muchos involucrados”.

La historia le daría la razón.


El aviador Jorge Freyggang

La pandilla salvaje

Hijo de un suboficial de la FACh que por mérito ascendió a oficial, Jorge Humberto Freyggang Campaña nació el 1 de abril de 1947. Eran cuatro hermanos, tres varones y una niña, y vivieron toda su infancia en Santiago.

A los 18 años ingresó a la Escuela de Aviación y a fines de 1969 egresó con el grado de subteniente, ocupando la antigüedad número 25. Difícilmente llegaría al generalato. Poco después fue destinado a Punta Arenas, en el extremo sur de Chile. Allí conoció a Susana López González, hija de comerciantes locales; se casaron con separación total de bienes.

En mayo de 1973, el teniente Freyggang fue enviado a la Base Aérea Maquehue de Temuco, la que había iniciado sus operaciones a fines de los años 20 y en la que, varias décadas más tarde, el Papa Francisco ofrecería una misa teñida de polémica: subió al altar acompañado por un obispo silente y encubridor de un sacerdote pedófilo.

Es en este lugar, que en los 60 albergaba a la escuela de helicópteros de la FACh, donde Freyggang escribió su historia más brutal a partir del golpe militar del 11 de septiembre de 1973.

Uno de los que padeció aquella infamia fue Jorge Silhi Zarzar. Hasta su casa ubicada en el centro de Temuco, llegaron tres miembros de la FACh y un enfermero civil. Allí encañonaron a su madre y lo sacaron violentamente desde su hogar. Lo trasladaron hasta la Base Maquehue, ubicada a seis kilómetros al suroeste del centro de la ciudad. En aquel recinto, al entonces liceano lo recibiría “La pandilla salvaje”, un grupo compuesto por oficiales y suboficiales, dirigida por Freyggang Campaña.

“Aquí comienza un calvario que yo no me imaginaba que resultaría posible entre seres humanos: interrogatorios reiterados con golpes, con palos, con electricidad y lo peor de todo, el submarino seco, que es la bolsa de nylon que te ponen en la cabeza hasta que tú abras la mano y decidas que quieres hablar. Si lo hacías para aliviarte y no contestaban lo que ellos querían, volvía el submarino seco”, cuenta el hoy abogado Silhi, desde su casa en la capital de la Región de la Araucanía.

En esos días, Jorge Silhi tenía 19 años recién cumplidos. Era un conocido dirigente estudiantil y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Por lo mismo, recibió instrucción militar, pero sin alcanzar a pertenecer a las estructuras claves de su partido. En los interrogatorios insistirá que su perfil era intrascendente.

“Jorge Freyggang estuvo en mis interrogatorios y era uno de los que me golpeaba, pero los que más golpeaban eran los suboficiales”. En una de las sesiones de tormento, Silhi -quien siempre estuvo vendado- logró sacarse la bolsa plástica que lo asfixiaba y ahí Freyggang le tomó las manos y las ató con un cinturón.

Tras ocho días detenido en la Base Maquehue, donde lo interrogaron dos o tres veces al día y después de sufrir “una de las peores pateaduras”, Silhi fue dejado en libertad gracias a contactos familiares. “Cuando soy liberado, el que me va a dejar a mi hogar era Freyggang”, recuerda el abogado temuquense, que reconoció la voz de quien daba las órdenes de las golpizas que padeció.

A fines del 73, Jorge Silhi salió del país con destino a Argentina, donde permaneció un año. Volvería a Chile a estudiar Derecho, ya completamente descolgado de una militancia política. Recién a mediados de los 80 defendería a algunos perseguidos políticos de la dictadura de Pinochet.


Jorge Silhi en su casa en Temuco

El apellido Freyggang es repetido en varios procesos judiciales que se sustanciaron por los crímenes cometidos en Maquehue. En ellos, exoficiales y suboficiales sindicaron al entonces teniente como integrante e incluso jefe de la unidad de inteligencia que operó en aquel recinto militar. Varios de los integrantes de la denominada pandilla salvaje fueron condenados y hoy cumplen condena en prisión.
Un reconocimiento inusual

En la hoja de vida militar de Jorge Freyggang Campaña, un documento de 56 carillas manuscritas y entregada por la propia FACh, se consigna que dos semanas antes del golpe militar –y con la edad de 26 años- pasó a ser jefe del Departamento de Inteligencia del Grupo 3 Maquehue de Temuco, donde “tuvo una destacada actuación antes, durante y después de los sucesos del 11 de septiembre de 1973″.

El texto agrega: “Cumplió con valentía y decisión su actuación frente a elementos marxistas, practicando interrogatorios, detenciones, allanamientos y otras misiones”.


Hoja de vida militar de Jorge Freyggang

Como pocas veces, la propia FACh acreditó la participación de uno de sus oficiales en detenciones extrajudiciales. Aún más: Freyggang obtuvo las mejores calificaciones mientras estuvo destinado en Temuco.

El 12 de septiembre de 1975, dejó su rol en inteligencia y asumió distintas labores administrativas; incluso sería el director del jardín infantil del regimiento.

Seis meses después, en la Laguna del Laja, sufrió su primer accidente aéreo cuando estrelló el helicóptero Dell UH-1H que conducía. La institución lo felicitó por su maniobra y concluyó que se debió a una “falla de material”.

A mediados de 1977, solicitó ser dado de baja de la institución “por motivos particulares”. A fines de agosto dejó las filas de la FACh con el grado de capitán, cerrando su hoja militar llena con múltiples loas; “se le puede confiar cualquier misión”, apuntaron sus superiores.

En los días siguientes, regresó a la Patagonia para iniciar su añorado negocio: tener su propia línea aérea. Para ello, se asoció con su suegro Sergio López, quien era dueño de una librería en Punta Arenas. Ambos se endeudaron y en diciembre del mismo año compraron la línea aérea Tama a Luciano Julio, que solo contaba con una aeronave, un maltrecho CC-CAK.

A pesar de lo precario de la firma, Freyggang le dio un nuevo impulso a la empresa: él piloteaba, su suegro era ejecutivo y su mujer atendía el público. Con el viejo avión aumentó la periodicidad de los vuelos entre Punta Arenas, Cerro Sombrero, Porvenir y Puerto Williams.

Pero la gran apuesta de Freyggang fue en 1980: viajó a Estados Unidos para adquirir tres aviones. Tama se ponía pantalones largos y, cada tanto, ponían avisos publicitarios en los diarios locales. Pero sabía que necesitaba algo más grande para remecer el débil mercado aeronáutico de la zona, hasta que ideó su gran golpe de marketing: el domingo 22 de marzo de 1981, su rostro apareció en la prensa local bajo el titular: “Hazaña histórica de empresa magallánica. Abierta ruta comercial a la Antártica. Jorge Freyggang, piloto civil, fue el primero en llegar a la Antártida con un avión comercial.”


El 22 de marzo de de 1981 el diario El Magallanes da cuenta de la hazaña de Jorge Freyggang, primer piloto civil en unir en vuelo América con la Antártida

El viaje hasta la base Teniente Marsh en la Antártida fue su particular homenaje a la institución que lo formó como piloto, el mismo día del aniversario de la FACh, celebrando el aterrizaje de esta hazaña aeronáutica entre los vítores de sus ex camaradas del aire, a quienes les llevó varias sandías.

¿Un espía de los ingleses?

El otoño de 1982 fue durísimo para los habitantes del extremo sur del continente. Argentina estaba en guerra con Gran Bretaña por la soberanía de las islas Malvinas. Fue una conflagración corta pero sangrienta.

A muy poco andar del conflicto, el alto mando de la Real Fuerza Aérea Británica (RAF) envió a Chile a uno de sus hombres para que consiguiese el apoyo local bajo el más estricto sigilo. El elegido fue Sidney Albert Edwards, un oficial que a sus 48 años hablaba perfecto español y era experto en inteligencia militar. En Londres sabían que estaban dando inicio a una relación quid pro quo, en la que la ayuda sería recíproca: tras la guerra, Chile recibiría seis Hawker Hunter, un radar de larga distancia, misiles antiaéreos y tres cazabombarderos Canberra de reconocimiento fotogramétrico de gran altura. Mientras que los aviadores británicos usarían el espacio aéreo chileno para labores de espionaje, instalando en Punta Arenas un radar que les permitió detectar los movimientos de los cazas argentinos, y varias pistas en las que aterrizaban aeronaves inglesas camufladas como máquinas chilenas.

Pero la ayuda subrepticia hacia los británicos no estuvo exenta de incidentes.


Sea King con las aspas plegadas a bordo de la cubierta de vuelo del HMS Intrepid. Atrás asoma el portaaviones ligero HMS Hermes.


El mapa con la operación frustrada que publicó el periódico inglés Daily Mail en 2014

El 17 de mayo de 1982, el helicóptero Sea King HC-4VC, bajo el mando del teniente Richard Hutching, despegó desde el portaviones HMS Invencible. En el interior iban además ocho hombres del S.A.S., las fuerzas especiales del ejército británico. Era una misión arriesgada y casi suicida. La operación secreta, denominada Plum Duff, tenía como objetivo infiltrar la base aeronaval argentina de Río Grande, destruir los aviones Super Étendard, asesinar a sus pilotos, pero por sobre todo, destruir los 3 misiles AM-39 Exocet que aún mantenía la Fuerza Aérea Argentina, el principal dolor de cabeza para Margaret Thatcher, luego que semanas antes, el 4 de mayo, dos de estos misiles habían hundido al destructor británico HMS Sheffield.


La base Aérea de Río Grande, en 1982, objetivo de los comandos que participaron en la operación Plum Duff

Pero algo falló, y debido a las condiciones climáticas, el teniente Hutching abortó la misión pues había sido detectado por un radar hostil: el copiloto pudo observar una bengala en las cercanías. Decidieron dejar a los comandos SAS en un punto cercano al río Silva. Luego prosiguieron rumbo a Punta Arenas y ya en territorio chileno, el Sea King fue abandonado y destruido por sus propios ocupantes.




El incendio del helicóptero no sólo fue advertido por los lugareños sino que rápidamente se convirtió en noticia internacional. Los tres tripulantes del Sea King decidieron esconderse, hasta recibir nuevas órdenes. Fueron siete largos días en que el incidente pasó a ser un inesperado y casi insalvable conflicto diplomático, hasta que –según rezaba el protocolo- Hutching tomó su teléfono satelital y llamó a Sidney Edwards:

“Entréguense a las autoridades chilenas y yo me ocuparé de que lleguen a Santiago”, fue la instrucción que recibió el piloto. Y así lo hicieron. En los días siguientes abandonaron el territorio chileno rumbo a Londres.


La Prensa Austral publico la noticia del rescate de los tres pilotos del Sea King. Si bien la crónica habla de "misterio", jamás menciona a los 8 comando británicos que iban en el helicóptero


La tripulación del Sea King británico tuvo una salida "oficial". Los tres pilotos dieron una conferencia de prensa al llegar a Santiago, pero negaron la existencia de comandos británicos en el continente

Mientras, los 8 hombres de la SAS seguían escondidos en el sur de Chile, específicamente en la ciudad de Porvenir. Pero no aguantarían mucho tiempo.

Se hacía urgente sacarlos del país, por lo que los oficiales de enlace chilenos contactaron al ex camarada de la FACh, Jorge Freyggang. Los ingleses pagaron una alta cifra con el propósito de resguardar las identidades de sus pasajeros que, de paso, mejoraron las alicaídas arcas de aerolíneas Tama.

Aprovechando la tranquilidad del domingo 30 de mayo, los ocho comandos británicos fueron trasladados desde Porvenir hasta Punta Arenas a bordo de un monomotor. En la capital de Magallanes, los esperaba el Beecheraft Queen Air BE-80 piloteado por Freyggang. Hizo escala en Puerto Montt para cargar combustible y al llegar a Santiago, fueron recibidos por una columna de vehículos que los llevó a una casa de seguridad. Jorge Freyggang respiró tranquilo. La misión secreta había resultado exitosa y la paga generosa. Estuvo 6 días en la capital, reunió a su familia y el sábado emprendió el vuelo de regreso a Punta Arenas.

Sería el último de su vida.



Vecinos de Punta Arenas aún conservan, como souvenirs, pedazos del Sea King que los comandos británicos abandonaron y prendieron fuego tras abortar el ataque a la base de Río Grande

Aquel 5 de junio de 1982 había sido pronosticado con mal tiempo. No era un buen día para volar. Los 1308 kilómetros que separan Puerto Montt con la austral Punta Arenas se encontraban con cielos completamente nublados. Es una geografía compleja y un clima inestable, con vientos bravos. Pero Freyggang se tenía confianza. Había despegado aquella mañana desde Santiago en su Beecheraft Queen Air BE-80. Hizo una escala en el aeropuerto El Tepual de Puerto Montt. Lo acompañaba su esposa Susana López, sus hijos Jorge (9), Patricio (7), Susana (2) y la asesora del hogar, Brunilda Navarro. Despegaron cerca de las 10 de la mañana para volver a su amado Magallanes.

A las 18:10 horas, Jorge Freyggang se contactó con el operador de la torre de control del aeródromo de Chile Chico. Tenía una emergencia:

“Solo veo mar a mi alrededor; también veo la luna. No observo tierra. Me queda combustible para unos 20 minutos, así que trataré de amarar. Búsquenme. No me olviden”.

Fue su último contacto radial.

“Perdido avión de Tama”, tituló al día siguiente diario El Magallanes. La noticia caló hondo en Punta Arenas. Freyggang era un hombre conocido en la austral ciudad y había consolidado cierto prestigio entre los aviadores. Su bigote le otorgaba más años que los 35 que tenía al momento del accidente.


Los archivos oficiales de la Operación Plum Duff fueron desclasificados hace 10 años. Sin embargo, las imágenes del helicóptero británico incendiado en el sur de Chile trascendieron en 1982

“Era un tipo extrovertido, simpático, alegre y ameno. Muy sincero y transparente”, lo recuerda hasta estos días desde su oficina en Punta Arenas, Luis Utman, quien lo conoció cuando ingresaron como cadetes a la Escuela de Aviación en 1965. El destino los volvió a unir a principios de los 80, cuando Luis comenzó a pilotear para la empresa Tama. Por eso le dolió tanto su partida, pues a pesar de la experiencia de Freyggang, poco pudo hacer aquel infausto atardecer de junio de 1982. Los fuertes vientos y escaso combustible lo sentenciaron. Técnicamente se cree que el avión pudo caer entre Punta Arenas y el Mar de Drake. Utman participó directamente en la búsqueda del avión siniestrado, la que se prolongó por dos semanas.

Durante años se especuló que el chileno había sido un espía trabajando para los ingleses y que incluso volaba de manera permanente a Puerto Argentino, en las Islas Malvinas. Incluso se levantó la versión de que su accidente habría sido un atentado de la inteligencia argentina, o que habría fingido su propia muerte y la de su familia, siendo visto años más tarde en Inglaterra, Australia u otro país, que sólo la imaginación popular pudo inventar.

Los rastros de Freyggang Campaña y su familia nunca fueron encontrados.
Daniel Avendaño y Mauricio Palma