Reino Unido refuerza defensas en Malvinas y genera polémica
El gobierno británico adjudicó contratos por valor de 153 millones de libras esterlinas (187 millones de dólares) para equipar a las Islas Malvinas con un nuevo sistema de defensa aérea, lo que ya generó polémica en Europa.
Un futuro lanzador de un sistema de defensa aérea local preparado para lanzar un misil conjunto antiaéreo modular durante ensayos [Picture: MBDA]
En 2015, el secretario de Defensa, Michael Fallon, había anunciado que Gran Bretaña gastaría 280 millones de libras esterlinas en los siguientes diez años para renovar y fortalecer la defensas de las Islas Malvinas.
Entre la actualización de los equipos de defensa se encuentra la instalación de un sistema de comunicaciones mejorado en la sede militar de Monte Agradable, así como el reemplazo de los misiles de defensa aérea Rapier que quedarán fuera de servicio hacia finales de esta década.
Los acuerdos que recién ahora se volvieron públicos incluyen también la adjudicación de un contrato por parte de los británicos a una empresa israelí para proporcionar un sistema de defensa remoto del archipiélago.
El principal contrato adjudicado por el Ministerio de Defensa de Israel, con un valor de 78 millones de libras esterlinas (95 millones de dólares), fue firmado en enero pasado con el sistema Rafael Advanced Defense Systems de Israel para desarrollar una red de gestión, comando, control, comunicaciones, informática e inteligencia, informó el portal Mercopress.
El constructor de misiles MBDA y el proveedor de radares de vigilancia Saab (específicamente los Giraffe AMB) también recibieron contratos para instalar otros elementos al nuevo sistema terrestre de defensa aérea ya ordenado para las islas.
La corporación israelí Rafael Advanced Defense Systems, con la ayuda de los socios británicos Babcock, suministrará su Sistema Modular Integrado C4I de Defensa de Aire y Misiles, en una fase de desarrollo y fabricación que probablemente será completada en 2020.
Babcock, en tanto, se sumará a la actividad desde el Reino Unido con la gestión de proyectos y adquisición de hardware: sin embargo, el contenido de trabajo británico en el proyecto es del 40 por ciento, mientras que el resto llegará desde Israel.
Israel se aseguró el acuerdo tras haber entregado "la mejor solución técnica con la mejor relación precio-calidad", indicó un funcionario del Ministerio de Defensa británico, informó Mercopress.
Sin embargo, los ejecutivos de la industria en Europa reaccionaron con enojo por la concesión a la contratista israelí.
Doug Barrie, referente del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos de Londres, dijo que estaba desconcertado por la decisión: "Al menos en los papeles, esto parece un área delicada para otorgar a un socio no perteneciente a la OTAN o no europeo. Hubiera pensado que el gobierno podría haber querido permanecer más cerca de casa con esta tecnología, ya que sin duda entra en el territorio de la capacidad operacional soberana", dijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario